Muchas cosas pasaban por mi mente aquellos días.
La primera era tirarle con lo primero que entallase a Pedri.
Desde que había llegado al 3º mes de embarazo estaba de lo más insoportable.
O eso o yo estaba más agresiva de lo normal, cosa que también era probable.
Aunque claro, eso solo había sido el principio, porque ahora, al estar a punto de caramelo estaba todavía peor.
– Jade, deja que yo me levante a por el mando.– dijo Pedri estirándose para coger el mando.
– Cariño, por milésima vez, estoy embarazada, no paralítica.
– Me da igual.– dijo mirándome.– Ya sabes lo que te dijo la doctora. Ahora mismo los movimientos bruscos son peligrosos.
– Dijo después de echar varios polvos durante estos meses.– dije mirándole.
– No es lo mismo, no ha habido movimientos bruscos.
Me eché a reír.
Habíamos estado bastante activos en ese aspecto últimamente.
Creo que también era porque yo estaba con las hormonas revolucionadas.
Y bueno, él tenía poco aguante, la verdad.
Los chicos se dejaban ver por aquí bastante seguido y la verdad que lo agradecía, porque se ponían a hacer el gamba y me entretenían la tarde.
Cuando Pedri no estaba en casa siempre venía alguno de los que estuviera lesionado o Fer.
Menudo dilema habíamos tenido para elegirle el nombre al niño.
Sí, niño. Otro chico en la familia González.
Recuerdo que se habían reunido todos en mi casa y empezaron a dar ideas de nombres.
– ¿Valentin?– dijo Ansu.
– ¿Tú quieres que le peguen en el cole o qué?– soltó Balde mirando a este último.
– ¿Por qué no probáis con uno en inglés?
– Quiero saber decir bien el nombre de mi hijo, pero gracias, Eric.– dijo Pedri.
Yo los miraba con una mano en la cabeza y una sonrisa.
– ¿Alejandro?
– Muy típico.– comentó Fer.
– ¿Lucas?– soltó Ferrán.
Pedri y yo nos miramos a la vez.
– No quiero llamar a mi hijo por el nombre de su ex.– dijo Pedri.
– ¿Pablo?– dijo Eric.
– Ni de coña, solo hay un Pablo en este grupo.– dijo Gavi.
– Que sean dos.– dijo Pablo Torre levantando la mano.
– ¿Nicholas?– dijo Fer.
– Muy pijo.– soltó Ansu.
Cerré los ojos mientras escuchaba todo tipo de nombres.
– ¿Jaime?
Entonces se me encendió una lamparita en la cabeza y sonreí.
– Ese me gusta.
– ¿Veis? Siempre tengo buenas ideas.– dijo Balde.
– No me gusta.– dijo Ansu.
– No tiene que gustarte a ti Ansu, sus padres son ellos.
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𝐌𝐎𝐓𝐇 𝐓𝐎 𝐀 𝐅𝐋𝐀𝐌𝐄 +18 | Pedri
Novela JuvenilCuando Jade vuela con Lucas, su maravilloso y perfecto novio a Canarias de vacaciones, era para solucionar algunas de las lagunas que tenían como pareja. Lo que ella no sabía es que iba a cruzarse con alguien que que le iba a hacer cuestionarse si...