Alessa Rodríguez.
Algunas semanas después...
Me desperté feliz por George, hoy sería el día de la apertura de su restaurante. Me levanté de la cama y me arreglé. Luego, bajé las escaleras y fui a la cocina.
— ¡Buenos días! Estoy feliz por ti — dije, dándole un beso a George.
— ¡Gracias! Estoy muy feliz de haber podido abrir este restaurante, mi sueño se hizo realidad y tú fuiste la persona que más me ayudó en esto. Tengo mucha suerte de tenerte a mi lado — respondió, besándome de nuevo.
— Solo te di un pequeño empujón, pero me alegra que haya salido bien.
— Agradezco tu "pequeño empujón".
Algún tiempo después, subimos al coche y nos dirigimos al restaurante. Al llegar, entramos al lugar y nos encontramos con Márcia esperándonos.
— Gracias por esperarnos — agradeció George.
— No hay problema.
— Entonces, ¿lista?
— Claro, estoy súper lista, pero también ansiosa.
— Entonces somos dos.
Algún tiempo después, George abrió las puertas y pronto las primeras personas comenzaron a entrar.
Después de un tiempo, dejé el restaurante y regresé al edificio. Al llegar, subí las escaleras y entré en el apartamento.
— Buenas tardes — saludé a mis hermanos y a mi padre. — ¿Cómo están?
— Estamos bien, ¿y tú? — respondió Luis. — Tu hermano tiene algo que contarte.
— Estoy muy bien. ¿Qué necesita contarme David? — me senté al lado de David.
— Bueno... — David suspiró profundamente, reuniendo valor para contarme.
— ¿Por qué estás nervioso?
— Es que... no estoy seguro de si lo que quiero hacer es lo correcto, y tampoco quiero parecer apresurado.
— Entonces cuéntame.
— Estoy pensando en pedirle matrimonio a Márcia. Sé que llevamos poco tiempo juntos, pero mi amor por ella es antiguo. No quiero preocuparme por la posibilidad de separarnos en el futuro. ¡No! Prefiero creer que Márcia y yo tendremos un futuro largo y feliz juntos.
Lo miré emocionada y a la vez sorprendida. Estaba feliz de haber escuchado eso.
— Me parece hermoso, David. Es increíble ver tu deseo de compartir la vida con Márcia y de querer pedirle matrimonio. Sabes que estaré a tu lado para apoyarte en todo. Sin embargo, están empezando la relación ahora. ¿No crees que sería mejor esperar un poco más?
— Entiendo que pueda parecer que estoy avanzando demasiado rápido, porque de hecho lo estoy, pero el amor que siento por ella es inmenso, Alessa. Quiero construir una vida a su lado, y aunque lleváramos años de novios, le pediría matrimonio de la misma manera. Entonces, ¿por qué no hacerlo ahora? ¿Qué piensas, debo pedirle matrimonio?
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El Nuevo CEO
DragosteAlissa se muda a España con sus hermanos menores, para tener una vida mejor y un nuevo trabajo. Entonces Alissa comienza a trabajar en una nueva empresa, siendo secretaria de uno de los mayores empresarios del país, George Jones. En una reunión que...