REIGN OF TERROR

VEINTITRES - DRAGON'S EGG

Esos ultimos cinco días antes de la boda corrieron lento, para Viserra y Aegon fueron una maravilla restaurando su relación a la manera apasionada, divertida y amorosa que fue, una gran pelea obviamente vino acompañada de sexo de reconciliación y bastante. Los Targaryen no dejaban pasar cada oportunidad que tenian: en los pasadizos secretos, en los aposentos de uno o del otro, en corredores poco concurridos y hasta en aquel lugar que les gustaba tanto para ver el atardecer, habia días en que repetian hasta tres veces, incapaces de esperar a la noche de bodas.

Kings Landing regresaba a su antigua calma, poco a poco - y con la intervención de los capa dorada - las calles dejaron el caos detrás, pero aun así Viserra permanecio dentro de los muros del castillo y sin noticias de su amiga Gargyla.

Las posadas y tabernas comenzaron a llenarse con la llegada de los lords y ladies que asistirian a la boda, así tambien como los aposentos para aquellos que se quedarian en la Fortaleza Roja. A tan solo un día para la boda, ya habian llegado los Strong - familia de Lord Larys, incluida Lady Alia, madre de Valerion -, los Lannister, Baratheon, Stark, Lords de las tierras de la corona, obviamente el recuperado Lord Corlys y la familia de la novia: Lord Gaemon, Lady Lelia y Lady Amaela, por lo que el Pozo del dragón tambien estaba en su maxima capacidad.

Viserra podia ser fria e irrespetuosa con algunas personas, tenia poca delicadeza que caracterizaba a las damas, pero aun así su boda - con el hombre que amaba - le causaba bastante ilusión.

-Mi lady, por favor tiene que decirme a donde vamos - dijo Ser Arryk siguiendo a Viserra por un corredor solitario.

-No se preocupe, Ser. No tengo intención de salir del castillo - dijo Viserra sin voltearlo a ver y caminando apresuradamente.

-He recibido un llamado de atención por el Lord Comandante respecto a lo que paso la otra noche, se supone que yo debo de protegerla, pero no puedo hacerlo si usted se desaparece con tanta frecuencia - insistio el caballero.

Viserra detuvo sus pasos y lentamente se giro hacia el caballero.

-Ser - Viserra sonrió - voy a cogerme a mi futuro marido ¿Eso es algo que considera que requiere su presencia?

Ser Arryk se ruborizo ante las palabras de Viserra, tensamente paso saliva y agacho la mirada incapaz de ver los ojos de Viserra.

-Bien, entonces me esperara aquí, prometo que no hare nada estupido - Viserra palmeo el hombro del caballero y procedio a adentrarse en aquel nivel oscuro del castillo.

Camino y camino - con una sonrisa en su rostro - hasta aquella grieta donde se veía la luz y donde provenia el sonido del mar. Cuando Viserra salió, se encontro a Aegon lanzando pequeñas piedras al mar, esto para distraerse mientras esperaba a su prometida.

-Sabes necesitamos trabajar en tu puntualidad, si mañana llegas tarde al septo me dara un infarto - dijo Aegon vacilantemente y abrazando a Viserra de la cintura.

Viserra sonrió y llevo sus manos a la nuca de su prometido.

-Prometo no llegar tarde mañana, mi principe - sonrió la joven.

Aegon la beso, corto pero apasionadamente, luego la solto para sentarse sobre una roca lisa y admirar el atardecer. Viserra no se sento, permanecio de pie cerrando sus ojos para intensificar el sonido de la marea y sentir la brisa del mar.

-¡Dioses que día nos espera mañana! - dijo Aegon.

-¿Estas dudando? - pregunto Viserra volteando a verlo sobre el hombro.

-Pero claro que no - contesto Aegon jalandola de la falda del vestido, haciendo que Viserra retrocediera y se sentara sobre una pierna del principe - solo un idiota se negaria a casarse contigo ¿Te he dicho que soy el hombre más afortunado de los siete reinos?