Tres lunas pasaron desde el nacimiento de Egg. Viserra debia admitir que era agotador cuidar de un bebé, y tal vez no deberia ser tan "cansado" para ella, pero se rehusaba a dejar a Egg al completo cuidado de las nanas, entre menos lo tocaran mejor. Aun así, cada vez que veia a su niño sabia que todo valia la pena y cuando se encontraba sola con Egg, las lagrimas se le escapaban pensando en Aegon.
Se imaginaba a los tres (Aegon, egg y ella) dormidos en la cama, imaginaba a Aegon tratando de dormir a Egg o cuidandolo cuando Viserra estaba exhausta, lo imaginaba con su hijo recorriendo los jardines, la manera en que el sol brillaria sobre los ojos azules de ambos... y pronto se dio cuenta que era todo lo que Aemond hacia.
Todo lo que un día deseo y le causó ilusión hacer con Aegon, lo vivia con Aemond... no sabia como sentirse respecto a Aemond, a veces se "perdia" observandolo a lo lejos: sus labios, sus fuertes brazos, su afilado rostro, su olor a lavanda y su abdomen ¡Como le encantaba verlo entrenar sin camisa! pero más allá del aspecto de Aemond, se dio cuenta lo mucho que gozaba y anhelaba su compañia, disfrutaba de sus risas y sus silencios, lo enriquecedoras que eran sus charlas, lo segura que lo hacia sentir y la abundante calma.
Habia anochecido, Viserra fue a ver el atardecer por su cuenta y regreso a sus aposentos acompañada de Ser Arryk, al cruzar las puertas el caballero se situo afuera y la princesa las cerro a la par.
Aemond estaba en el sofa, lo más cerca posible de la chimenea, en una mano tenia un libro y en su otro brazo Egg estaba dormido. Viserra sonrio al verlos y camino hacia ellos con cuidado de no hacer ruido.
Viserra abrazo a Egg, y Aemond suspiro de alivio - no se habia querido mover para no despertarlo y el brazo comenzaba a dolerle - Egg se removio un poco en el trayecto de la sala a su cunero, pero con cuidado lo acosto y arropo.
-¡Dioses como deseo dormir! - dijo Viserra recargandose en la pared.
Aemond ya estaba de pie, cerca de la cama y dejo su libro en la mesita de noche.
-No mentian cuando decian que un hijo te cambiaba la vida - dijo Aemond.
Viserra asintió y camino hacia la mesa del vino para servirse una copa.
-A veces me pregunto si recuperare mi cuerpo - murmuro la princesa.
-¿Pero de qué hablas? - Aemond rio entre dientes - ni parece que tuviste un hijo.
Viserra volteo a verlo y le sonrio como si no le creyera.
-Bueno, creo que ya perdí el peso que gane en el embarazo, pero esto - Viserra llevo las manos a sus senos - no eran tan grandes.
Aemond no contesto a nada, se puso rojo cual tomate y desvio la mirada de Viserra. Ella noto lo "incomodo" que fue para Aemond, no podia creer que Aemond aun fuera virgen, que no conociera el placer del sexo.
-Aemond - dijo Viserra seriamente mirandolo a los ojos - no me lo tomes a mal, pero ¿Por qué...? - las palabras no salian de su boca, temia ofender al principe.
-¿Por qué nunca he tocado a alguien?
Viserra asintió.
-Eres un principe apuesto, jinete del segundo dragón más grande del mundo y habilidoso caballero, estoy segura que muchas doncellas se sentirian privilegiadas o incluso ¿Por qué nunca fuiste a un burdel?
Aemond rio entre dientes y siguio a Viserra con la mirada, ella tomo asiento en uno de los sofas y bebio de su copa sin quitarle la mirada al principe.
-No voy a negar que Aegon una vez me ofrecio llevarme a burdel - agrego Aemond - pero, no lo sé... llamale mis principios o lo que sea, pero nunca me interesó.
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REIGN OF TERROR
FanficDespues de la muerte de Maegor I, su esposa Rhaena Targaryen se da cuenta que esta embarazada. La linea de sangre de Maegor continua, generando tensiones con la familia de Jaehaerys por generaciones. Mientras los Targaryen de Roca Dragón (linea de M...