REIGN OF TERROR

CINCUENTA Y SEIS - AEMOND ONE-EYE

Habian sido lunas dificiles para todos, pero a este punto del año Aemond se sentia exhausto mentalmente... una vez que recuperaron la Fortaleza Roja tenia la esperanza de encontrar a Rhaella, pero su hija no estaba, nadie sabia quien se la habia llevado o a donde. Aemond sabia que Rhaella no podia estar con Viserra - pues ya estaba enterado que su esposa divagaba por las tierras de los rios, posiblemente buscando a su hija - diario montaba en Vhagar en busqueda de Rhaella, pero toda busqueda fue sin exito.

Aun seguia dolido por todas las muertes, por ver el reino quebrantado, por ver a Rhaenyra convirtiendose en una mujer fria y cruel - que a decir verdad no la culpaba, su hermana habia sufrido bastante - y sobre todo le dolia estar lejos de Rhaella y Viserra, pese a que esta ultima le habia traicionado.

Por más que trataba no podia odiar a Viserra, sabia que todo lo que hacia era por culpa de Gaemon que la habia puesto en contra de ellos... aun así los recuerdos dolian, en espacial los  buenos recuerdos.

Podia sentir el fin de la guerra y no sabia si eso era bueno o malo. Claro que queria que Rhaenyra siguiera en el trono, que su familia mantuviera el poder que les habian robado, pero sabia que eso significaba la muerte de Viserra... ni Rhaenyra, ni Daemon estaban dispuesto a perdonarla y lo sabia pues Daemon constantemente hablaba sobre salir a "cazar" a Viserra, Valerion y Viserion.

-Ninguno de los tres se ha visto en Harrenhal desde hace semanas - explico lady Mysaria - ... pero la contrabandista ha estado enviado a sus "moscas"  a la capital, estoy segura que traman algo.

El consejo de guerra estaba reunido, Rhaenyra estaba sentada en la silla del monarca con Daemon a su dercha y la reina Alicent a su izquierda, el resto estaba en sus correspondientes lugares y el principe Aemond se sentaba junto a Lord Corlys Velaryon.

-Debemos estar atentos, es posible que quieran liberar a Lady Lelia o Amaela - continuo Daemon - la princesa Viserra conoce demasiado bien el castillo, podria entrar con facilidad...

-Hay que recordar que la princesa es una madre - hablo Lord Corlys - su prioridad es encontrar a su hija, dudo que se presente en la capital antes de encontrar a la princesa Rhaella.

-Respecto a los niños, alteza - dijo Lady Mysaria - me temo que tengo noticias de Maelor Targaryen.

Rhaenyra se sintio intrigada y se acomodo en su silla, todas las miradas se dirigieron a la consejera de rumores, quien parecia un poco apenada de lo que iba a contar.

-Puedo confirmar que fue Ser Rickard Thorne quien saco al principe de Kings Landing, tenia la intención de llevarlo al campamento de Lord Hightower... - explico Mysaria.

-¿Entonces esta con los Highotwer? - pregunto Alicent.

Mysaria nego con la cabeza y tomo una bocanada de aire.

-En Puenteamargo, una multitud ataco al caballero y al pequeño... ambos estan muertos, segun me informar la multitud despedazo al niño, solo...

-Por todos los siete - susurro Alicent escandalizada.

La reina verde se dio mediavuelta sosteniendo las lagrimas, camino hacia la ventana sintiendose conmovida por la muerte del niño de tres años y preocupada por el paradero de su nieta Rhaella.

-Lady Caswell enviara lo que se pudo recuperar del cuerpo - finalizo Mysaria.

-Dioses... - murmuro Rhaenyra con la mirada perdida - gracias por la información, mi lady.

Mysaria asintio en respuesta.

Aemond se sintio preocupado, si ese habia sido el destino de Maelor ¿Qué pasaba con Rhaella? ¿Qué si estaba muerta y nadie lo sabia? ¿Qué si no estaba en buena compañia?

-Respecto a Viserion, Valerion y Viserra - continuo Daemon observando el mapa sobre la mesa - tenemos que aprovechar que sus aliados estan cayendo. Segun sabemos Viserion esta por su cuenta, sugiero que sea al primero que enfrentemos... con Vhagar, Vermithor y Caraxes podemos hacerles frente, uno por uno para que sea una victoria asegurada...

-Hay otro asunto que requiere a los dragones - agrego Lord Corlys.

-¿Qué sucede?

-Las fuerzas de los rojos están cerca, alteza... el principe Daeron y el ejercito esta por llegar a La Ladera, bastante cerca de nuestra posición... no tenemos un ejercito bastante grande para hacerles frente... sugiero que primero los detengamos y despues nos enfoquemos en la amenaza de las tierras de los rios.

Rhaenyra asintió.

-Nyra - Daemon volteo a ver a su esposa - yo creo que es importante que primero eliminemos la amaneza de las tierras de los rios, sin dragones los rojos seran absolutamente nada.

-Y al ir detras de Viserion, Valerion y Viserra dejariamos la ciudad desprotegida, justo como ellos lo hicieron y cuando menos pensemos tendremos un ejercito a nuestras puertas - protesto Lord Corlys.

Todos voltearon en dirección de la reina quien estaba sumergida en sus pensamientos contemplando ambas opciones y tratando de buscar una solución.

-Lord Corlys tiene razón - contesto Rhaenyra y volteo a ver a Daemon - y tu también. Pero a diferencia de los rojos tenemos más dragones para no dejar la ciudad desprotegida... Vermithor y Ala de Plata pueden volar a La Ladera para acabar con el ejercito rojo y traer prisionero al principe Daeron... mientras Vhagar y Caraxes pueden salir en busqueda de Viserra, Valerion y Viserion. Seasmoke, Syrax y Tyraxes son suficiente para proteger Kings Landing.

Lord Corlys asintio viendo una solida solución.

-Aun así es importante que no se enfrenten a más de dos dragones a la vez - agrego Rhaenyra a Aemond y Daemon - no podemos darnos el lujo de perder más dragones ¿Entendido?

-Si, alteza - contesto Aemond.

Rhaenyra se puso de pie, al igual que el resto.

-Comenzaremos mañana - agrego la reina para despues salir escoltada por sus guardias.

El resto de Lords comenzo a dejar la sala de uno por uno, pero solo Aemond permanecio en su asiento pensando en la posibilidad de enfrentarse a Viserra y preguntandose si ¿Tendria el valor de ir contra ella?

-¿Aemond? - resono la voz de Alicent al ver que su hijo permanecia inmovil.

-¿Si, madre? - contesto el principe volteando hacia ella.

-Creo que no tengo que preguntar que sucede ¿cierto? Veo la preocupación en tu rostro.

Aemond suspiro y asintio.

Alicent se sento en la mesa y tomo la mano de su hijo.

-Encontraremos a Rhaella - continuo la reina - debe estar bien, estoy segura que debe estar en la Fortaleza de algun lord, nadie lastimaria a una princesa.

-Los hombres son capaces de cualquier atrocidad cuando se trata de poder, madre - contesto Aemond - solo espero que Viserra la encuentre.

Alicent suspiro.

-Se que no es facil, hijo... pero tienes que superar tu sentir por ella. Viserra nos traiciono, te separo de tu hija, asesino a Rhaenys, ayudo a extinguir la casa Strong y...

Aemond volteo hacia Alicent y la reina se detuvo.

-Ambos sabemos que si supiera la verdad ella jamas hubiera apoyado a su padre.

-Así es, pero las cosas no son así...

Aemond sabia que su madre tenia razón, tarde o temprano tenia que aceptar la realidad de Viserra, pues el nunca tendria la fuerza para traicionar a Rhaenyra, a su propia familia y eso implicaba ir en contra de Viserra, pero aun así la amaba, los buenos ratos que vivieron juntos lo atormentaban y deseaba que todo fuese diferente.

-Alteza - dijo un caballero haciendo reverencia - mi principe.

-¿Qué sucede? - pregunto Alicent.

-Una carta, para el principe Aemond - continuo el caballero - es de la princesa Viserra.