Silky, caída hacia el mundo irreal

Capítulo 11 : La Madame de pelo rosa

Estaba intrigada por aquella bella mujer. Takeshi mencionó que era su madre aunque si me lo preguntan. Esa señora se veía casi de la edad de él.

-Madre, ¿Conoces a algún Azariel? Estamos buscando al amigo de mi amiga. Dijo Takeshi.

El hecho de que me haya presentado como su amiga debo aceptar que me molestó un poco aunque intenté disimularlo, ya que de momento era algo que no importaba mucho.

-No te veo durante un año y llegas sin avisar a mi club. ¿Para interrogarme? ¿y ella quién es?. Dijo su mamá.

Takeshi me presentó a su madre. Se presentó con el alias de "Madame Vamp" algo acorde ya que así se llamaba este lugar y al parecer era la dueña, lo cual explica el porqué entramos tan rápido. ¿Será que las mujeres de esta realidad no envejecen?. Me pregunté.

-Me llamo Silky y quisiera saber si puede ayudarme a encontrar a alguien. Le dije.

Ella dijo que trataría de ayudarme, pero que si todo resultaba bien le debería un favor. No cuestionó el porqué conozco a Takeshi. Al parecer no es tan cercana a su hijo.

-Revisé unos apuntes y lo último que escribió Azariel es ir a "The Vamps" y se iba a encontrar con una tal Umeko. Comenté.

Madame vio las fotos que le enseñé de mi amigo Azariel. Me dijo que no había visto a nadie similar y que al lugar viene diariamente demasiada gente como para recordar el rostro de tantos, le pedí entonces que me permitiera revisar las cámaras de seguridad del establecimiento, ya que eso me daría una idea de lo sucedido con Azariel, o siquiera saber si logró llegar a este lugar, pero ella solo me dijo que las cámaras no se encontraban funcionando desde hace unos meses y habían olvidado darles mantenimiento; sin embargo, pondría a su mano derecha Amy a nuestra disposición para encontrar información en la ciudad.

Escuchar eso me decepcionó, pues esperaba encontrar algo, algún rastro aunque sea pequeño del paradero de Azariel, al menos tendremos la ayuda de Amy y eso es un consuelo.

Takeshi sugiere que, ya que estamos en el club, sería un buen momento para relajarnos, y su madre nos obsequia acceso VIP con barra libre. Normalmente no bebo, pero pensé que podría servir para mitigar la ansiedad que me invadía en ese instante. Había avisado en casa que me ausentaría por unos días debido a un viaje con amigas, necesitaba tiempo para dedicarme a investigar, y no planeaba volver hasta tener noticias de Azariel. Por lo tanto, decidí aceptar la propuesta de Takeshi y disfrutamos de una velada en "The Vamps".

Conforme la música resonaba y los tragos fluían, la noche avanzaba, y yo me sentía ligeramente ebria. En mi estado de semi inconsciencia, empecé a percibir sutiles diferencias entre los habitantes de este mundo. Algunos parecían ser como yo, pero otros tenían ojos rojos, y aquí había muchos de ellos. No sabía si esto indicaba alguna distinción racial y no tenía intención de investigarlo por el momento. Sin embargo, lo que sí noté fue cierta fogosidad en su comportamiento. No sé si era un efecto hipnótico del alcohol, pero en mi borrachera observé a lo lejos a una mujer mordiendo el cuello de un hombre. Supuse que era algún tipo de fetiche.

Por ahora, parecía ser un incidente aislado. Todavía era pronto para comprender la complejidad de este mundo carmesí.

《Fin del capítulo 11》