Capítulo 40: Soporte

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-...Do ... dónde estoy?. ¿Eres tú, Abby?.

 ¿Eres tú, Abby?

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-Sí, príncipe. Llegué oportunamente y vi todo lo que pasó. La señorita Asuka me pidió que lo siguiera, disculpe la intromisión, pero creo que su decisión fue acertada.

-Tienes razón. Debo agradecerles luego. ¿Y dónde estamos?

-No hay de qué, joven Ryu. La señorita siempre está preocupada y pendiente de usted. En cuanto a nuestra ubicación estamos dentro de la clínica familiar de la señorita Aiko.

-Gracias por tu ayuda Abby. No tenía fuerzas para ocultarme del amanecer. Además no hace falta que seas tan formal. Somos amigos.

-Lo sé, príncipe

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-Lo sé, príncipe. Pero considero que un trato más informal sería irrespetar a la señorita Asuka.

-Ya no soy el príncipe, recuerda. Soy un caballero de la reina.

-Me niego a aceptar a su hermana como la sucesora. Después de ver lo que le hizo, estoy mas convencida aún de que eso solo traería caos a la sociedad que su madre intenta establecer.

 Después de ver lo que le hizo, estoy mas convencida aún de que eso solo traería caos a la sociedad que su madre intenta establecer

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-Cierto, Yomi. ¿Viste hacia dónde se fue?.

-Mis hombres reportaron haberla visto volando hacia el bosque. Tal parece que se dirige al Palacio.

-Esto no es bueno. Si ella se organiza con las dementes esas que sirven ciegamente al rey. Jinko no saldrá bien librada y nuestra existencia se expondrá ante los demás habitantes.

Silky, caída hacia el mundo irrealDonde viven las historias. Descúbrelo ahora