Había pasado ya un tiempo desde que me alejé de todo para refugiarme inclusive de mis propios pensamientos.
La absurda monotonía de este gris mundo me asfixiaba poco a poco al punto de que el solo hecho de despertar me resultaba completamente agota...
Aprovechando que Takeshi estaba en sus cinco sentidos totalmente coordinados era un buen momento para tratar de despistar a su hermano y Amy quienes custodiaban la puerta.
Según me he dado cuenta cada uno tiene habilidades diferentes o mejor dicho. Hacen más notable una en comparación a las otras que poseen. Por ejemplo, he visto a Takeshi y a Ryu volar. Pero Ryu no tiene el sentido del olfato como lo tiene su hermano menor y a su vez Takeshi no tiene esa percepción auditiva que le permite esquivar todo a Ryu.
Precisamente ese tipo de cosas son las que Az vería y creo que aprovechar las ventajas y debilidades de otros es algo que el haría.
Le cuento a Takeshi mi plan. Primero vamos a dejar las sábanas que acabamos de usar para hacerles creer que aún estamos arriba.
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Mientras con ayuda de las cenizas de la chimenea taparemos un poco nuestro olor. Creo que debería engañar algo a Amy. Ahora el problema sería poder escabullirse del oído de Ryu.
Takeshi me levanta en sus brazos y levitamos muy despacio hacia el lugar de la chimenea.
Nos cubrimos todo el cuerpo de hollín, es bien sabido que el carbón cubre todo tipo de olores.
Mientras deliberábamos sobre cómo encubrir el sonido, al forzar la puerta, se escucha un estruendo cercano a la casa, como si un árbol se hubiera derrumbado. Takeshi reacciona con rapidez y me saca por la ventana superior, volando a toda velocidad lejos del lugar para adentrarnos en el bosque.
Caminamos con cautela en el bosque, ya que Takeshi piensa que si nos descubren, el primer lugar donde nos buscarían sería el cielo. De repente, se oyen nuevamente ruidos fuertes provenientes de cerca.
Nos alejamos del lugar con precaución; probablemente nuestros custodios hayan ido a investigar, lo cual nos favorece. Takeshi parece preocupado; su rostro refleja la misma expresión que vi cuando conocí a su madre por primera vez.
-¿Ocurre algo?, ¿Qué pasa Takeshi?.
-Ella está cerca. Puedo sentirla.
-¿Quién?¿Umeko?.
-No, ella es mucho peor que mi madre. Y aunque se vea como yo. Es más fuerte, su habilidad es esa, tiene muchísima fuerza. Creo que es ella la que anda tumbando los árboles cerca de aquí.
-Sigo sin saber a quién te refieres exactamente.
-Mi gemela menor. Yomi. Es una obsesiva. Pero no entiendo. Ella es de la guardia de mi padre. No debería estar tan lejos de casa. Debe haber algún motivo de causa mayor por el que está aquí. Creo que tal vez vino por ti. No lo sé, pero si ella está cerca. No estás a salvo.
Me preocupé un poco por las palabras de Takeshi, ya era suficiente con dos custodios, pero una vampiresa superfuerte si es para tener miedo.
Apresuramos el paso con el fin de dejar rápido el bosque.
