Solo Mio

Capitulo 27

Hola😁
Esta es la única forma que tengo de pedírles disculpas por el tiempo que me han estado esperando.
Espero este capitulo compense el tiempo perdido.
Disfrutenlo😘

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Después de un breve silencio, Ciel finalmente, encontró el coraje de hablar con sinceridad, liberandose de las restricciones que lo mantenían callado.

Ciel: Antes que todo, quiero disculparme sinceramente por mi actitud anterior. Sé que no necesitas mi ayuda y confío en tus habilidades, pero aún así sentí la necesidad de intentar ser útil. Lamento si te molesté o causé algún problema. -Dijo con pena y mostrando el arrepentimiento que antes no pudo.

No obstante, el hombre no mencionó nada al respecto y parecía estar más enfocado en otro tema.

Sebastian: A lo largo del tiempo, nunca te he preguntado sobre tu vida personal, ni he pedido explicaciones sobre lo ocurrido con tu hermano. En este momento, no me considero digno de hacer tales preguntas. Sin embargo, me atrevo a interrogar a mi amo. ¿Podrías por favor contarme qué sucede entre Lady Elizabeth y tú? Estoy dispuesto a escuchar pacientemente tu respuesta.

Ciel inclinó su cabeza, luchando con su indecisión, pero estaba plenamente consciente de que no podía seguir ocultando la verdad. Así que determinó que era hora de hablar.

Ciel: Cuando éramos niños, mi hermano, Lizzie y yo éramos inseparables. Éramos los mejores amigos, nos apoyábamos mutuamente, jugábamos y reíamos sin preocupaciones en nuestra mente.

Flashback:

Elizabeth (12años): ¡Ven Ciel! ¡Corre!

Ciel (R) (12años): ¡Voy! ¡Vamos hermanito!

Los jóvenes corrían con mucha energía por el inmenso jardin de la mansión que para ellos parecía no tener fin. Cada risa cada juego cada travesura, todo contaba en ese momento como parte de su niñez.

Ciel (R) (12años): ¡Vamos Ciel! ¡Sé que puedes alcanzarme hermanito! -Exclamaba, tratando de darle ánimos a su muy cansado hermano menor.

El joven de apenas 6 años corría incansablemente, pero la fatiga comenzaba a dominarlo. Decidió renunciar a perseguir a su hermano y buscar un lugar para descansar antes de que su cuerpo sufriera un colapso.

Ciel (R): ¿Ciel, estás bien? -Preguntó regresando rápidamente con su hermano.

Ciel (T): Sí, estoy bien hermano. -Le dijo logrando deslumbrar con su sonrisa encantadora.

Ciel (R): Qué bueno... -Suspiró aliviado.

Elizabeth: ¿Qué sucedió? -Preguntó al acercarse junto a ellos- ¿Ciel, te encuentras bien?

Ciel (R): Al parecer, jugar a las traes es un poco difícil para Ciel. Deberiamos terminar por hoy. -Sugirió, pero casi como si se tratara de una broma, el más joven se levantó de inmediato y fingió estar lleno de energia.

Ciel (T): ¡Ya me encuentro mejor! ¡Continuemos! -Habló con determinación.

Ciel (R): Pero hermano...

De repente, el muchacho tocó a su hermano mayor y salió corriendo.

Ciel (T): ¡Ahora, tú la traes! -Exclamó desde una distancia la cual consideraba prudente para luego, volver a echarse a correr.

Ciel (R): Ciel eres un tramposo... -Se quejó mientras sonreía y veía a la muchacha a su lado reír suavemente- Deberías correr o haré que tú las traigas.