𝔅𝔦𝔱𝔢 𝔐𝔢 - 𝔜𝔞𝔫𝔤 𝔍𝔲𝔫𝔤𝔴𝔬𝔫 𝔵 𝔗𝔫

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Breve recordatorio: agradezco mucho el apoyo a la historia, todos los capítulos sobrepasan los 100 comentarios pero recién acabo de darme cuenta que cada capítulo tiene entre 200 a 500 lecturas lo cual es muy hermoso pero en votaciones solo tienen entre 30 a 50 je...

— mamá...

Cerré la puerta del horno y miré a Max con atención.

— ¿qué pasa pequeño? — pregunté.

— ¿vendrán a matarnos? — preguntó.

— no. Claro que no. ¿Porque dices esas cosas?

— porque las amenazas ya han llegado... porque tiraron una bomba... — respondió Max con preocupación.

— No te preocupes,  todo estará bien. Lo prometo. — sonreí acariciando su cabello.

Miré la hora y me dirigí a las heladeras donde inmediatamente tuve que sostenerme de la puerta ante un punzante dolor en mi intimidad.

— ¿mam-

— A-aggh... — cerré mis ojos adolorida.

Apreté con fuerza la puerta y agaché la cabeza sintiendo como un líquido salía de mi vagina.

Miré las gotas de sangre en el suelo con mucho miedo e intenté calmarme por Max que parecía estar más asustado que yo.

— ¡mamá! — gritó.

— Shh... ¡estoy- bien! — respondí estresada.

Di un paso y lamí mis labios aguantando el dolor.

Es imposible caminar.
No puedo moverme.
Duele mucho...

— quédate aquí. Ya vuelvo...

— pe-

— porfavor.

Caminé hacia las escaleras con cierta prisa y pasando por desapercibido por la sala donde estaban los demás y una vez que subí la mitad de las escaleras no tuve más opción que sentarme completamente retorcida del dolor.

Observé la mancha de sangre de mi pantalón y empecé a llorar aterrada.

No quiero llamar a Jungwon...
No después de esa pelea...

Con esfuerzo volví a levantarme y corrí a la habitación de Jungwon donde me metí al baño.

Apoyé mis manos en el lavabo y miré al suelo viendo la cantidad de sangre que perdía.

No es normal.
Voy a morir.

Respire agitada y tomé la toalla de las manos con fuerza para sentarme en el suelo y abrir mis piernas.

¿Voy a parir?...

Baje mi pantalón con desesperación y apreté con fuerza la toalla sintiendo como las heridas de mi vagina volvían a abrirse.

— porfavor... no... porfavor no. — susurré con mucho dolor.

Mordí la toalla para lograr gritar sin hacer mucho ruido y cerré mis ojos sintiendo más líquido salir.

Voy a morir desangrada.

El charco de sangre cada vez se hacía más grande, lo cual me preocupaba.

Apoyé mi mano en mi vagina ensangrentada y observé cómo mis piernas iniciaban en un preocupante temblor.

Intenté levantarme pero mis piernas habían dejado de tener fuerza y como si no fuera suficiente, una gran cantidad de líquido combinado con sangre salieron de la zona acompañando de punzantes dolores.