La Flor De Un Demonio

Capítulo 76

Las chispas aparecieron cuando el metal se encontró con metal, causando que sus portadores retrocedieran para mantener la distancia uno del otro, lo cual no duro mucho. Tanjiro y Kokushibo intercambiaban ataques con sus espadas, demostrando una gran velocidad, fuerza, reflejos y maestría con la espada. En uno de esos ataques, Kokushibo logro cortar la mano izquierda de Tanjiro, haciendo que el cazador agarre su espada con la derecha y siguiera peleando, en lo que su mano amputada se regeneraba.

Ambos siguieron su pelea, donde era más que un enfrentamiento para terminar una guerra que duro muchas Eras. Era el enfrentamiento final entre alumno y maestro, y solo uno se llevaría la victoria. 

—Pudiste haber ....recibido más ....poder de mi señor —Dijo Kokushibo, evitando los ataques de Tanjiro con su espada —Solo...debiste darle...el lirio —

—¿Para que? ¡Para que el sea un ser invencible! —Exclamo Tanjiro, agarrando su espada con sus dos manos y usando la sexta postura de su respiración —¡Jamás! ¡Hubiera preferido morir antes que entregárselo! —

—Eres un desagradecido —Dijo el demonio de seis ojos, usando su habilidad del mundo transparente para ver los movimientos de Tanjiro —El te convirtió ...en un ser.... superior a los humanos —

—¡Yo jamás pedí ser esto! —

Kokushibo dio un gran salto hacia atrás, teniendo distancia con el fuego verde que apareció y rodeo a Tanjiro como si fuera un tornado. De poco a poco, el fuego fue disminuyendo, revelando a Tanjiro, el cual tenia la parte superior de su cuerpo al descubierto, debido a que su ropa ya estaba dañada por los cortes que recibió de la primera superior, dejando ver su físico bien marcado. 

—Terminemos con esto...sensei —

Tanjiro agarro su espada con la mano derecha, donde guio y puso el metal en su mano izquierda, para seguido apretarlo con fuerza, causando que la sangre saliera de su mano. Kokushibo miraba eso atento, ya que, siendo su maestro, Tanjiro tenia una forma de hacer sus cosas, y tener resultados increíbles.

Y no estaba equivocado.

El fuego verde apareció en la mano cerrada de Tanjiro, para después este se extienda por el metal. Ahora la hoja que conformaba la espada de Tanjiro estaba envuelta en llamas verdes, eso hizo que Kokushibo recordara los recuerdos de Hantengu, de como Tanjiro hizo los mismo en su pelea contra el en la villa de los herreros.

La primera luna superior miraba esa hoja envuelta en llamas, sintiendo que había algo en ella que es peligroso para el. Y no estaba equivocada de nuevo. Al ver bien esa hoja, noto un color carmesí que venia de ella, pero el fuego verde lo ocultaba muy bien. Si el no tuviera seis ojos, de seguro no lo hubiera notado.

—Cuando gustes —

Y las espadas volvieron a chocar, con Kokushibo con su espada con otras tres hojas que sobresalían de ella, y Tanjiro con su espada envuelta en fuego verde. Ambos dispuesto en darlo todo.

—Respiración lunar: Decimocuarta postura: Calamidad - Luna creciente divina—

Los ojos de Kokushibo se abrieron cuando un vórtice gigante de cortes omnidireccionales se dirigieron hacia el. Actuando rápido, hizo la misma postura, haciendo que ambos ataque choquen entre ellos.

—Tú...—La primera superior miro un poco sorprendido a Tanjiro —Puedes usar... mi respiración... contra mi — 

—¿Sorprendido? —Pregunto Tanjiro, sin esperarse una respuesta en realidad.

El antiguo cazador solo lo miraba, sintiendo algo dentro de si miso que no podía comprender. Pero no le dio importancia.

—Respiración lunar: Séptima postura: Espejo siniestro - Gloria lunar —