🪻Capítulo 77. Santuario de la Sabiduría, Lythera🪻

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—¿Cuánto tiempo debemos seguir discutiendo sobre el cambio de príncipe heredero? —dijo el Conde Celt en tono de cansancio.

—Dado que Su Majestad el Emperador ha declarado con fuerza que no habrá ningún cambio de príncipe heredero... Por mucho que pidamos, no hay nada que podamos hacer.

Mientras el Marqués Oppenheimer leía un documento y hablaba lentamente, el Marqués Hopper golpeó la mesa con fuerza y gritó con voz agitada.

—¡Su Majestad el Emperador es terrible! Guardó silencio sobre el hecho de que el Rey Espíritu del Fuego desapareció sin dejar rastro, y sobre el hecho de que Su Alteza el Primer Príncipe Valerian no recibió ninguna bendición. ¡No se preocupa por sus súbditos del Imperio Roshan! ¡¿No se siente culpable a pesar de haber cometido fraude contra todos?!

—Marqués Hopper, por favor, cálmese.

—Lo hemos soportado durante más de cinco años, ¡y por mucho que sea el Emperador, no puede exceder su propia autoridad! ¿Cómo se puede elevar a un miembro de la Familia Imperial, que ni siquiera recibió una bendición, al puesto de emperador? ¡Si hubiera coronado a Su Alteza el Segundo Príncipe como príncipe heredero hace mucho tiempo, no habría necesidad de perder el tiempo dejando de lado los asuntos estatales por una disputa tan lenta!

El apasionado discurso pronunciado por el Marqués Hopper fue acogido con cierto grado de acuerdo por los numerosos nobles presentes en el salón.

—... Sin embargo, la realidad es que no sólo hay que tener en cuenta la voluntad de Su Majestad el Emperador, sino también las opiniones externas. Los atributos secundarios de Su Alteza el Segundo Príncipe son seres que pertenecen a la oscuridad.

Ante el comentario del Conde Eupus, que contemplaba la situación, el Conde Elticia suspiró y se acarició la frente.

—Han pasado décadas desde que terminó la calamidad. ¿Hasta cuándo vamos a condenar al ostracismo incondicional y odiar a los elementalistas oscuros, independientemente de sus cualidades e incluso su carácter? —dijo el Conde Frederick.

—Tiene razón. Su Alteza Eshimed tiene mejores cualidades que Su Alteza Valerian en cuanto a aprendizaje y política, por no mencionar su talento como elementalista. En lugar de Su Alteza Valerian, que es naturalmente débil, Su Alteza Eshimed se parece mucho a Su Majestad Oswald durante su época como príncipe heredero... Sin embargo, Su Majestad siempre le da prioridad a Su Alteza Valerian.

—¿El Gran Duque Heylian todavía no ha dejado claras sus intenciones?

Los nobles se quedaron en silencio ante la pregunta planteada por el Conde Celt.

Después de que la familia del Duque Kandel y la familia del Duque Bastevan fueron exterminadas y desaparecidas por diferentes motivos, el Gran Duque Roderick Arne Heylian era el único jefe de una familia noble perteneciente al Imperio Roshan que ostentaba una poderosa autoridad sobre la voluntad de todas las familias nobles.

—... El hecho es que la heredera legítima, la Princesa Edith Ronen Heylian, apoya a su prometido, Su Alteza el Segundo Príncipe, mientras que la Princesa Alea Seraphine Heylian, la hija de la Gran Duquesa, apoya al actual Príncipe Heredero. Cada dama apoya a un Príncipe diferente, por lo que Su Excelencia el Gran Duque Heylian está profundamente preocupado.

—Aun así, ahora se debe tomar una decisión. Su Alteza el Segundo Príncipe celebró recientemente su cumpleaños número 14. Ahora es el momento adecuado para cambiar de príncipe heredero.

La edad a la que se realiza la ceremonia de la mayoría de edad es a los 16 años.

Debido a la falta de poco menos de dos años para que el Segundo Príncipe, Eshimed, alcanzara la mayoría de edad, la opinión de todos los nobles y jefes de familia era que se debía tomar una decisión sobre el Príncipe que se convertiría en el siguiente emperador.

Nacida como la hija oculta del protagonista masculino y la villanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora