Nacida como la hija oculta del protagonista masculino y la villana

🪻Capítulo 79🪻

Después de que Eshimed terminó de hablar, un profundo silencio se apoderó del lugar. Sin embargo, no era el mismo silencio provocado por la ira del Emperador.

Me acerqué a Eshimed y me arrodillé junto a él para hablarle al Emperador.

—Comprendo que Su Majestad el Emperador esté enfadado. Pero Su Majestad, si renunciamos a mantener las costumbres por no ser capaces de realizar con exactitud las tradiciones de nuestros antepasados, como mencionó Su Alteza el Segundo Príncipe, entonces eventualmente el espíritu del pueblo se cortará y solo surgirá una profunda desconexión.

—Ahora que el Rey Espíritu del Fuego ha desaparecido, el Imperio Roshan se enfrenta a una crisis sin precedentes y a un punto de inflexión en el tiempo. Pido encarecidamente a Su Majestad el Emperador no rechace la llegada de una nueva era... Sino que lidere el camino para abrazarla con el corazón y la mente abierta.

—... Su Majestad, admiro y estoy de acuerdo con la voluntad de Su Alteza el Segundo Príncipe y la Princesa Edith.

Alguien salió de entre la multitud, luego se arrodilló junto a Eshimed y expresó su acuerdo con nuestras intenciones.

La persona no era otro más que el Conde Celt.

Lo que había en los ojos del anciano, donde se veían las huellas del tiempo, era un sincero sentimiento de patriotismo hacia el Imperio Roshan.

—La petición hecha por Su Alteza el Segundo Príncipe y la Princesa Edith a Su Majestad el Emperador... Pido disculpas, pero me causó una profunda vergüenza al creer que he vivido mucho tiempo más. ¿Cómo es posible que haya vivido tanto tiempo sin cambiar y enorgulleciéndome de mis viejos pensamientos y valores?

Tras desviar la mirada hacia Eshimed y a mí, el Conde Celt habló con firmeza, luego volvió a mirar al Emperador.

—Aunque el Rey Espíritu del Fuego se ha ido, ¿cuál es el problema? Agua, tierra, hielo, viento... Pase lo que pase, el Imperio Roshan nunca desaparecerá si continuamos con la tradición de honrar al fénix, el espíritu de Roshan.

—¡Así es, Su Majestad! Se ha resistido implícitamente a permitir que Su Alteza el Segundo Príncipe suceda al trono alegando que fue bendecido por espíritus de la oscuridad y no ha sido bendecido por el Rey Espíritu del Fuego como los anteriores emperadores.

De repente, otro noble salió de entre la multitud y se arrodilló frente al Emperador mientras hablaba con fuerza.

Se trataba del Marqués Oppenheimer.

—Pero en este momento, ofrezco mi más sincero consejo a Su Majestad. Aunque Su Alteza el Segundo Príncipe no recibió la bendición del fuego, es él quien comprende mejor que nadie las virtudes que debe poseer un emperador del Imperio Roshan. ¡La persona que debe gobernar la nueva era en la que Roshan ha entrado, no es otra que Su Alteza el Segundo Príncipe!

—¡Su Majestad! No me importa si me ejecutan en este lugar por cometer blasfemia. ¡Por favor, designe a Su Alteza el Segundo Príncipe como nuevo príncipe heredero y traiga estabilidad al Imperio!

—Su Majestad, admiro la voluntad de Su Alteza el Segundo Príncipe, pero la Princesa Edith, que comparte su voluntad, también tiene las cualidades de una emperatriz increíblemente perfecta a pesar de su corta edad. Si gobiernan Roshan como emperador y emperatriz Su Alteza el Segundo Príncipe y la Princesa Edith, que son sabios, ¡la paz y la prosperidad realmente llegaran!

¿No es demasiado exagerado?

«El Conde Celt, el Marqués Oppenheimer, el Marqués Hopper y el Marqués Aslan.»