🪻Capítulo 65🪻

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Meinhardt se presentó frente a Siorn, que se encontraba no muy lejos. Fue un encuentro de casi diez años, pero no hubo tiempo para que conversaran.

—Hace mucho tiempo que no uso ese poder... No sé si funcionará.

—¡Pruébalo rápido, tanto si te conviertes en papilla o no! ¡Mi nieta está en peligro!

—¡Muy bien, solo cierra la boca! ¡Eres ruidoso!

—... ¡Maldita sea, eres despreocupado porque eres un viejo solterón! ¡Nunca te casaste ni tuviste hijos hasta esta edad avanzada!

—¡¿Qué?! ¡De quién crees que es la culpa de que no haya podido casarme hasta esta edad!

El Gran Maestro Espiritual de la Tierra, David Callan Theracium y Siorn Arcaitz Bastevan soltaron palabras duras como solían hacerlo, y finalmente terminaron en una pelea.

—Paren, paren. La situación es tensa ahora mismo.

—¿Cuándo se llevarán bien ustedes? ¡No puedo creer que sigan peleando cada vez que se encuentran!

Ezequiel y Sisyphia intervinieron para detenerlos.

—...

—...

David y Siorn se calmaron.

—Ordeno en nombre del Rey Espíritu de la Tierra que se abra el camino frente a nosotros hacia el lugar donde las sombras malignas se extiendan...

*QUUAANG*

La tierra tembló en cuanto David extendió su mano hacia el suelo y murmuró.

¿El sentimiento de ahora era el que sentían aquellos que presenciaban un milagro?

—¡Ha funcionado! ¡Sabía que podrías lograrlo, David!

—Sí... Todavía puedo hacerlo.

Las rocas formando los estratos, las plantas con raíces, las montañas, los ríos y demás cosas que estaban sometidas a la vida con una parte de raíz sostenida por el Rey Espíritu de la Tierra, crearon un camino con el que en pocas horas se podría recorrer una distancia que llevaría varios días.

Ezequiel palmeó el hombro de David con una suave sonrisa en el rostro, y tomó la iniciativa.

—Vamos, deprisa. Debemos encontrar a la nieta de Siorn y Ataraha.

Según la antigua disciplina de lidiar con la oscuridad, el elementalista de la luz tomó la delantera y el elementalista de la electricidad se colocó en la retaguardia.

El grupo de héroes del pasado siguieron el camino.


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—Ha colocado una barrera. A los elementalistas ordinarios ni siquiera les resultaría fácil descubrir este lugar —dijo Ezequiel mientras colocaba una mano en el aire, que a primera vista parecía ser un bosque nocturno común.

Nacida como la hija oculta del protagonista masculino y la villanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora