Esta historia se sitúa después de lo que sucedió en la serie y se entrelaza con eventos del material audiovisual. Para desarrollar las personalidades y el arco de los personajes usé como referencia la información disponible de la serie, la novela y...
N/A: Perdón por la tardanza, pero tuve torneo de halo y estuve practicando y ¿Qué creen?
Pues que gané, su escritora de confianza es una fregona ❤️
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Así se llama mi equipo: "Taquitos de pastor", jaja. Y somos las reinas coronadas de Halo. Tres mexicanas y una chica trans estadounidense con asecendencia hispana. No tiene nada que ver, pero lo quería compartir con ustedes.
Ora sí, les recuerdo que NO se olviden de las reacciones. Apoyan muchísimo esta historia con sus lecturas, pero también contribuyen con sus votos y comentarios.
Mil gracias por su paciencia y por su amor. Les deseo siempre lo mejor ❤️
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♡♥︎♡MACAO♡♥︎♡
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Alexei se marchó horas atrás y aún no regresaba. La noche había caído hacía más de un par de horas, sumiendo la ciudad en una profunda oscuridad debido a la luna nueva. Todavía no encontraba la fuerza para recuperar su celular y llamar a Chay, a Pete o a Vegas. Necesitaba enfrentar solo al titán que sabía que pronto atravesaría la puerta.
Se removió entre las cobijas acurrucándose contra el pecho de Jai. Cálido y cómodo entre sus brazos incondicionales y afectuosos. El amargo hiel que todavía le inundaba la boca, aunado a la estocada que le había atravesado el torso dejándolo malherido; hubiera sido insoportable si no fuera porque recibió los cuidados de su guardaespaldas. No sabía cómo hablar del tema con nadie que no fuera él.
Necesitaba un poco de paz y poner sus pensamientos en orden antes de enfrentar la realidad que aguardaba y que, como Jai le dijo "no iría a ninguna parte". Por eso, cuando Alexei se fue y Jai tocó a su puerta, mejor se abrazó a él y, luego de compartir sus rumiantes pensamientos en sus brazos, ambos se quedaron dormidos al paso de un rato.
El llanto no llegó a él como hubiera imaginado, quizá el shock no lo dejó llorar o tal vez el hecho de que, en general, Macao no era una persona de lágrima fácil, por el contrario, la vulnerabilidad era algo que tendía a evitar y, mantenerse en una pieza, un recordatorio de que era fuerte y valiente, aunque no se sintiera así internamente.
Escuchó un traqueteo en la entrada y se pegó con más fuerza a Jai cuando el "bip" del seguro desactivándose alcanzó sus oídos. Resopló, decepcionado. No estaba sorprendido de que Alexei tuviera una llave y pudiera entrar a sus anchas sin tocar o ser invitado. Quizá antes le guardara el mínimo respeto como para no hacerlo, pero en vísperas de los últimos eventos, Macao estaba seguro de que el respeto no sería algo que ellos dos compartirían a partir de ese momento.
