𝐓𝐇𝐄 𝐅𝐈𝐑𝐄 𝐃𝐄𝐌𝐎𝐍 ┃𝑈𝑛𝑂𝑅𝐷𝐼𝑁𝐴𝑅𝑌

Capítulo 11

『Enfermería.』

──¡Ah! ¡Otra vez esto es culpa de ese mocoso busca-problemas! ──Gritó Darren mientras preparaba otro tónico para el estudiante que acababa de llegar.

──¿De verdad han estado llegando tantos? ──Preguntó Keene con confusión (ya que recién había llegado también).

──Sí, este es el séptimo que llega con quemaduras y varios golpes en el cuerpo ──respondió soltando un suspiro para intentar calmarse, cosa que realmente no estaba funcionando tanto──. No entiendo porque el director no lo echa de una buena vez de la escuela, solo está causando problemas y provocando que yo tenga más trabajo del necesario.

──Bueno, según escuche el director ya le ha dado una advertencia y creo que lo mandó a llamar para algo.

──Espero que sea para ponerlo más a raya porque si fuera por mí ya lo habría echado de aquí. ──Exclmaó Darren dándole un sorbo a su café. Fue entonces donde la puerta de la enfermería se abrió dejando ver a otro chico con las mismas heridas que los anteriores.

──Doc... ──Habló el chico con más miedo a Darren que por el dolor que las heridas le provocaban.

──Creo que necesitas que te deje a solas, ¿no? ──Preguntó Keene con una sonrisa divertida mientras Darren remarcaba una vena a causa de la burla de su compañero.

Mientras Keene salía de la enfermería solo escuchaba como Darren soltaba gritos de fastidio hacia quien tuvo la mala suerte de haber llegado en aquel momento.

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Durante el día todo estaba bastante tranquilo, Rodan como siempre estaba vagando por los pasillos sin la necesidad de ir a clases. Claro, a lo único que está obligado a ir es a la sala de prensa.

──«Esto es un total fastidio, nadie es capaz de suponerme un reto ──pensó mientras continuaba con su camino──. No puedo seguir estancado, tal vez mi nivel haya subido pero aún necesito acostumbrarme...».

Después de un rato recordó la azotea, así que decidió ir ahí, pensando que en ese lugar podría pensar un poco cual sería su siguiente movimiento ahora que estaba en Wellston.

En cuanto llegó grata fue su sorpresa al ver a Seraphina ahí, sentada y jugando con su celular. El semblante de ambos cambio a uno de alerta al mismo tiempo que el ceño de Rodan se fruncia.

──No sabía que también te pasabas por aquí ──habló Seraphina con total calma al verlo──, ¿no deberías de estar en clase?

──Soy un rango dios, puedo hacer lo que quiera incluyendo faltar a clases. ──Respondió, quedándose cerca del marco de la puerta.

──Sí, me esperaba eso ──respondió sin dejar de lado su celular, aunque, volvió a mirar a Rodan, pensando en hacer una pregunta──. He escuchado que has estado enviando a varios rangos medios y de élite a la enfermería ──dijo llamando la atención del chico──. ¿A qué se debe eso?

──Solo busco entretenimiento.

──¿Te parece entretenido atacar a personas más débiles que tú? ──Preguntó Seraphina poniéndose de pie, ahora teniendo el ceño fruncido.

──Yo no tengo la culpa de que ellos me ataquen y se choquen conmigo ──le respondió mostrando una sonrisa burlona──. Al contrario de ti sé cuál es mi lugar en este sistema.

──Ni siquiera sé porque te pregunté ──dijo──, eres igual al resto, no haces más que intimidar a los demás.

──Así es como se obtiene el respeto. ──Exclamó con molestia.