El friki y el victoriano.

Entrelazados

Cuando Lysandro vio a Leigh y Armin acercarse a la distancia se dirigió hacia ellos rápidamente, estaba molesto, muy molesto y ni sabia porque pero iba a reclamarle a su hermano, justo cuando se planto frente a ellos para empezar su reclamo Armin se cayó sobre él haciéndolo sonrojar.

- Lysandro me siento muy mal- se quejo casi sin voz el ojiazul.

- ¿Pero qué...? ¿Leigh que le hiciste?- indago molesto el albino sosteniendo al descompuesto pelinegro.

- Nada Lyss, es solo que el pequeño Armin se descompone al aire libre- se defendió el mayor sonriendo inocentemente.

- Leigh tiene razón, es solo que no se me da muy bien salir a pasear- confeso el ojiazul recuperándose de las nauseas.

- Entremos a la casa, le pediré a madre que te sirva algo para el mareo- ordeno el albino con seriedad, estaba molesto con su hermano por "secuestrar" al chico pero en ese momento lo más importante era que se recuperara.

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- ¿Ya te sientes mejor niño?- pregunto la anciana a Armin cuando ya era de noche.

- Si señora- contesto con timidez el pelinegro al sentirse sobreprotegido, desde que llego con Leigh, Josiane y Lysandro estuvieron cuidando de él para que se recuperara de su mareo.

- Leigh la próxima vez que quieras llevarte a Armin por ahí piensa en lo sensible que es- riño Lysandro a su hermano con molestia pero sin llegar a faltarle el respeto, ya que a pesar de todo era su hermano mayor.

- No es culpa de Leigh, es solo que me cuesta salir al aire libre- replico Armin que quería evitar problemas entre los hermanos Ainsworth.

- No Armin, Lysandro tiene razón- acepto arrepentido el diseñador pero al segundo volvió a su aura alegre- la próxima vez que te lleve conmigo a pasear te traeré cargando de regreso para que no te sobre esfuerces- propuso causando un sonrojo en Armin, un ceño fruncido en Lysandro y una sonrisa maliciosa en Rosalya.

- O mejor la próxima vez te llevas a tu novia a pasear- sentencio el chico de ojos bicolor con seriedad.

- A mi no me molesta que ellos vayan de paseo por ahí- comento risueña la albina- claro si luego puedo ser yo la que tenga mi "Time Armin".

- Por eso no hay problema linda, Armin no está comprometido con nadie, así que puede salir con quien desee ¿Verdad Armin?- indago el pelinegro mayor con picardía.

- Creo que sí- contesto el ojiazul inseguro.

Lysandro les iba a decir unas cuantas cosas a su hermano y su cuñada cuando su madre que había ido a la cocina por té y no se había dado cuenta de nada, reapareció e interrumpió la conversación.

- Chicos ya es algo tarde deberían descansar- propuso la amable mujer y ya que nadie se atrevía a desobedecerla decidieron ir a dormir.

- Madre tiene razón lo mejor será descansar para el viaje de mañana- comento Leigh con serenidad- y ya que solo hay tres cuartos y Armin tiene que dormir con alguno yo me lo llevo.

- No es justo yo quería hacer una pijamada con él- reclamo Rosalya.

- Rosa, linda eres una chica, se que Armin es un caballero pero no puedo dejar que duermas en el mismo cuarto que otro chico- argumento Leigh.

- Pero tú ya lo tuviste toda la tarde- se quejo la chica- es mi turno.

- No creo que valga la pena que sigan discutiendo muchachos- comento Josiane con calma.

- ¿Por qué?- indagaron la chica y el diseñador al mismo tiempo.

- Porque el pequeño Lyss ya se lo llevo- contesto la anciana sonriente.

Hasta ese momento Leigh y Rosalya se percataron de que ya no estaban ni Lysandro ni Armin junto a ellos.

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Armin no supo exactamente en qué momento fue arrastrado por el albino lejos de la discusión entre la pareja de novios pero estaba agradecido por no tener que elegir entre uno de ellos dos.

- Tu hermano y Rosalya están algo locos- le comento al chico de ojos bicolor una vez que llegaron a la habitación en la que supuso iban a dormir.

- No "algo", están completamente chiflados si creen que te voy a dejar en manos de alguno de ellos- respondió el chico lanzándose a la cama agotado tras el largo día.

- Lo siento, tuviste que hacer todas las tareas de la granja solo ¿Verdad?- se disculpo Armin sentándose junto a él en la cama.

- No es problema ya estoy acostumbrado, además no es tu culpa que Leigh te arrastrara a quien sabe dónde.

- En realidad estoy feliz de que lo hiciera.

El albino lo observo con el ceño fruncido.

- ¿Por qué?- pregunto con un toque de molestia que el otro no notó.

- Me hizo reflexionar ciertas cosas sobre Alexy,- confesó algo triste pero luego volvió a sonreír- además me conto sobre tu complejo de tener el cabello del mismo color que los conejos.

- Dime por favor que no lo hizo.

- ¡Oh, sí que lo hizo!- respondió el chico para reír a carcajadas.

Lysandro entre avergonzado y divertido lo jalo y comenzó a hacerle cosquillas sin piedad.

- No, cosquillas no- rogo el pelinegro en medio de risas.

- Es mi venganza por reírte de mí a mis espaldas- contesto el chico de ojos bicolor antes de detenerse caer al lado de Armin sobre la cama y juntarlo a él en un abrazo por la espalda.

El ojiazul se sintió extraño, la única persona que lo había abrazado así en su vida era Alexy, pero el abrazo de su hermano y este no eran iguales, la calidez del aliento del albino sobre su cuello, los brazos del más alto rodeándolo con fuerza pero sin brusquedad, el sentir el pecho del otro unido a su espalda, simplemente lo hacían sentir una mezcla de nerviosismo, calidez y seguridad.

Lysandro no comprendía el porqué de sus acciones, su cuerpo actuó por voluntad propia al abrazar al más bajo y ahora que su mente analizaba lo que estaba haciendo estaba muy avergonzado, no podía verse pero estaba más que seguro de que su rostro estaba rojo y no quería que el otro se diera cuenta de su nerviosismo al ver su cara por lo que lo abrazo con más fuerza en un intento de que no se volteara y lo observara.

El pelinegro se sentía tan cómodo en los brazos del otro que sin darse cuenta se fue quedando dormido y el victoriano al sentir la suave respiración del chico cayo también presa del sueño, al final aquella noche en medio del silencio descansaron entrelazados.

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Se que no debería subir capítulos a altas horas de la noche, pero este capítulo es tan tierno que no pude resistirme...