Capítulo 21

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Andros se reunió en privado con su padre.

Le entregó los diarios del abuelo Baird y conversó con él.

—Lo que te voy a decir quedará entre nosotros hasta que hable con tus hermanos — dijo padre.

—¿Todo bien?

—¿Consideras a tu madre como alguien de Distrito?

—Por supuesto que no — contestó Andros — Ella ha permanecido más tiempo en el Capitolio que en el Doce. Ella mismo lo dijo, nunca nació en el Doce, solo tuvo el infortunio de que ella y Covey fueran acorralados en ese distrito.

Padre deslizó algunos papeles frente a él. Amarillentos por el paso del tiempo.

El primero fue una identificación a nombre de Gene Augustus Graham. Luego un documento por el cambio de nombre a Gene Heist Baird.

Andros no miró el rostro de su padre, solo se concentró en el último documento, un acta de nacimiento.

El acta de nacimiento de su madre, un documento oficial donde indicaba que ella había nacido dentro del Capitolio antes de la Rebelión.

—¿Mamá sabe de esto? — preguntó Andros con la vista fija en su padre.

—Aún no — contestó padre — Pero eventualmente abordaré este descubrimiento de manera que no sea muy impactante para ella, por eso te llame.

—Sabes que haría lo que fuera por el bienestar de mi madre.

—Me agrada escuchar eso — dijo padre — Por lo que te voy a pedir que cuando digitalices los diario de tu abuelo Baird, tendrás que enviar primero a mi el documento. Quisiera leer el contenido primero.

—¿Para ver si no hay nada que pueda alterar a mamá?

—Exactamente.

—Por supuesto, padre. Yo te envío los documentos.

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Haymitch estaba en la sala familiar de los Snow, Madame Snow le había invitado al té para tener más información del Covey.

Todo sería relajado sino fuera por la asisten Florence sentada cerca de la puerta revisando su tableta grafica, le daba la sensación de que están siendo vigilados.

"Porque lo estamos, en cada rincón hay personas leales al presidente"

—Se que Maude Ivory se casó con un chico de apellido Everdeen — dijo Madame Snow colocando un cubo de azúcar en su té — ¿Pero tiene hijos?

—Tres — contestó Haymitch — Fabian Granite, el mayor. Dorothea Coral, la segunda y Dean Tawny, el menor. De hecho, él se casó hace casi un mes.

—¿En serio? ¿Quién es la afortunada?

—Sara Creed — mordisqueo Haymitch su galleta para luego darle un pedazo a la mascota de Madame Snow que lo veía expectante — Es la hija de los boticarios, y era la mejor amiga de Maysilee.

—Oh, Maysilee — se lamentó Madame Snow — Era un chica encantadora.

—Si, lo era — también se lamentó Haymitch. Había noches en que soñaba estar de nuevo en la arena, sosteniendo la mano de su alada mientras se ahogaba con su propia sangre.

—¿Y cómo fue la boda?

—Bueno, primero al medio día, Dean y Sara fueron al Edificio de Justicia para formalizar de manera burocrática su matrimonio — contó Haymitch — Pero luego cuando regresaban a La Veta, el hijo de los panaderos le dio un golpe.

Un Sinsajo EnjauladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora