Milenio Vacío II: Viejo Mundo

Pasantías II

El trío de pasantes inició el día en las oficinas de Endeavor, quien los recibió de pie con una expresión adusta en el rostro, mientras observaba a los tres jóvenes ingresar.

—Apenas comenzaremos el día y ya está enojado. —Masculló Bakugo, escondiendo su desaprobación bajo su bufanda.

En la cafetería, un repentino estruendo rompió la tranquilidad del lugar. Endeavor, visiblemente molesto, golpeó su rostro con la palma de la mano, denotando su frustración ante la interrupción, siendo Katsuki el primero en entender que era lo que sucedía, como lo demostraba su rostro repleto de venas saltonas.

—¡¿POR QUÉ?!

—Nos puede ser de utilidad para no tener bajas en el equipo y atrapar villanos... —Le respondió el héroe número uno, arrepentido de sus decisiones.

—¡OI! EDE... ENDA... HI-HIGE!

Una serie de venas saltaron en su frente, acompañado de un tic en su ojo; más antes de que reclamara irritado por el apodo con el que el pirata se había dirigido, Shoto lo interrumpió.

—Solo deja que te llame así... Sus apodos solo empeoran con el tiempo.

—¿No tienes carne?

—Es muy temprano para eso...

—Pfff... Que pésimo trabajo

—¡TCH!

—Debemos mantenernos saludables, y eso es muy pesado para comenzar. —Shoto trató de hacerlo entrar en razón.

—Cuando me siento hambriento no puedo trabajar... Renuncio. —Reclamó con un puchero, torciendo su boca y cruzando sus brazos.

—¡NI SIQUIERA ESTAS TRABAJANDO! —Endeavor levantó la voz, acompañado por una fuerte llamarada naciendo de sus hombros.

—Ah, cierto. —Respondió a su queja con un tono bobo, golpeando su palma con el puño.

—Este idiota... —Murmuró irritado el héroe.

—Luffy san, ¿Por qué aceptast...? —Midoriya estuvo de finalizar su pregunta para despues enfocarse en su gesto. —Olvídalo. Estas aburrido.

—Estoy cansado de no hacer nada. —Bufó emberrinchado —Zoro quería venir, pero la rata no lo dejó...

—Porque porta armas... —Aclaró Endeavor

—Dudo que ese maniaco siquiera los deje vivos... —Masculló Bakugo, provocando que sus dos compañeros pasaran saliva, mientras que el número uno apretaba sus puños al escuchar con atención a los pasantes.

—¿Quiénes más nos pueden ser de ayuda?

—Eto... —Deku trataba de elegir los cientos de palabras que podía usar para describir a cada uno de los sombrero de paja, más Shoto le interrumpió antes de que comenzara a murmurar.

—Todos... Pero hay razones por las cuales no es recomendable que participen.

—Problemáticos.

—Que lio. —Respondió Luffy hurgándose la nariz

—No conocen las reglas del todo... —Dijo Todoroki

—Apenas las respetan. —Agregó Bakugo

—Que complicado. —El emperador respondió, tirando su moco en Burnin

—¡NO LANCES TUS ASQUEROSOS MOCOS HACIA MI!

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La iluminación blanca y nítida acentuaba cada detalle del espacio, revelando mesas quirúrgicas alineadas con precisión y herramientas especializadas en orden meticuloso. Las paredes de mosaico antibacterianos desprendían un frío que se filtraba hasta los huesos, creando una atmósfera clínica y distante, mientras el olor a alcohol flotaba en el aire, impregnando cada rincón.