Un nuevo comienzo ~ Sakura y Shaoran

Capítulo 83: Inolvidable

Al día siguiente a la salida, Eriol y Yamazaki estaban muy afligidos porque tenían entendido que era el último día que contarían con la compañía de su querido Shaoran Li en Tomoeda.

Estaban completamente decididos a hacerle una despedida a su amigo, y de hecho ya tenían todo preparado junto a Chiharu y Tomoyo que los apoyaban siempre en todo.

-Oye Sakurita…¿estás de acuerdo en que todos vayamos a mi casa para despedir al principito? - preguntó el inglés - No puede ser que hoy sea su último con nosotros…ni siquiera irá con nosotros a las montañas… - agregó con pesar

Sakura no entendía por qué su amigo dijo aquella afirmación. Observó confundida a Shaoran ya que ella sí sabía que él podía ir a la excursión, pero por lo visto los demás seguían sin saber.

Shaoran sonrió disimuladamente, se cubrió el rostro con ambas manos pero pronto ya no pudo aguantar la risa.

-¿Qué pasa? ¿por qué te ríes? ¿no ves que estamos devastados? - cuestionó Yamazaki con una mano en el pecho victimizandose

-Es que… al final no me marcharé mañana, mi vuelo es el lunes y sí podré ir a la excursión con ustedes - replicó el castaño sonriente

-¿Queeeee? ¿O sea nos tienes hechos un mar de lagrimas por tu antojo? - increpó el jovencito de lentes

-Nooo, no es mi antojo, mi madre cambió de opinión a última hora y quería darles una sorpresa pero no puedo más con sus caras tristes - agregó el chino casi a punto a reírse nuevamente

Sus amigos no tardaron en abalanzarse sobre Shaoran para abrazarlo y despeinarlo como si fuera su hermano menor. Estaban notablemente felices.

Las chicas sonrieron al verlos tan emocionados. No cabía duda que esos tres eran inseparables, y es que eran amigos desde pequeños y habían pasado demasiadas cosas juntos por más que a veces discutían y querían matarse entre ellos.

En casa de Eriol, los chicos habían preparado globos decorativos y también compraron muchos ingredientes para cocinar todos juntos. Los padres de Eriol estuvieron muy tristes al enterarse de que Shaoran iba a volver a Hong Kong, pero le dieron muchos ánimos para afrontar los nuevos retos, luego se marcharon ya que tenían mucho trabajo, y también para dejar que los adolescentes celebren sin presiones.

Shaoran y sus amigos lo pasaron increíble, bromeando, riendo y haciendo torpezas en la cocina. Al final comieron las pizzas que habían preparado y después se dedicaron a jugar videojuegos entre todos.

Sakura estaba muy feliz de ver a su amado tan contento. Él era muy amigo de Eriol y Yamazaki desde hace años e indudablemente lo pasaban muy bien juntos. Por lo que le contaron todos ellos se conocían desde cuarto grado de primaria por lo que su amistad era inquebrantable.

La celebración duró como hasta las nueve de la noche, hora en que todo el mundo fue de prisa a sus casas ya que al día siguiente tenían el tan esperado viaje de invierno a los alpes japoneses y debían alistar sus cosas.

Shaoran se encargó de llevar a Sakura hasta su casa pues ya era un poco tarde. A él le hubiera gustado mucho poder hablar con el señor Fujitaka pero lamentablemente él estaba muy ocupado en la universidad de Tokio con las evaluaciones de fin de año de sus estudiantes. Aún no perdía la esperanza de al menos poder despedirse de él, que siempre lo trató tan bien y lo recibió con mucho cariño.

Al día siguiente:

Eran apenas las siete de la mañana y la preparatoria Tomoeda estaba muy animada. Los estudiantes de todos los cursos habían llegado muy temprano para el tan esperado viaje de invierno.