Doctora Bloom || Hannibal.

17

— Tengo un dilema — Alana se mordió el labio mientras tomaba su taza de té — Jack es mi jefe, lo conozco hace muchos años, tengo que participar activamente en el caso de Will y sé que él hizo las cosas mal ahí. ¿Qué harías? Porque francamente no sé si lo mejor sería acusarlo, no es justo, ninguno creyó que la mente de Will colpasara de esa manera.

Estaba sentada en la alfombra con Winston en mis brazos mientras la escuchaba atentamente.

— Jack Crawford parece un buen tipo, pero estoy segura de que no sabe lo que está haciendo la mayor parte del tiempo. El caso de Will lo desencajo, no solo tiene que lidiar con la prensa que lo acusa de tener a un asesino en el FBI, sino que también con su propio remordimiento.

Winston rugió en mis brazos, como si supiera de lo que estábamos hablando. Alana sonrió al verlo.

— Desde que volviste no se volvió a escapar, no sé que es lo que sienten los perros, pero estoy segura que te veo como un espacio familiar.

Sonreí de lado, nunca me habían gustado los animales, nuestros padres nunca nos habían permitido tener una mascota, pero con este perro era diferente, tenía la necesidad de protegerlo y cuidarlo. Y cuando veía sus ojos, veía los ojos de Will.

—¿Puedo saber por qué no le contaste a Hannibal que yo volvería? — pregunté recordando de repente. Ella suspiró y me miró.

— No lo sé, tenía miedo de como iba a pasar después de todo lo que pasaba con Will.

—¿Como reaccione yo? — pregunté — ¿Tendría que reaccionar de alguna manera al ver a Hannibal?

— ¿Cómo, Will no te lo dijo?

Estaba segura que mi cara era todo un poema, no entendía ni siquiera una palabra de lo que Alana estaba insinuando.

— Estoy deseando que seas clara, porque en realidad, volví a la ciudad después de muchos meses sin saber nada, estoy cubriendo el caso total de un asesino y posible caníbal que está vinculado emocionalmente contigo, todos actúan como locos, y aún así Hannibal fue la unica persona que me recibió de forma normal.

Ella me miró sorprendida pero asintió.

— Bien, Will cree que Hannibal es el culpable de todo lo que sucedió y de alguna forma le tendió una trampa.

Todo se detuvo a mi alrededor, no entendía nada, ¿Will acusando a Hannibal? ¿Acaso no tenían una buena relación?

— ¿Y tú le crees? — fue lo único que salió de mis labios, no podía imaginarme un escenario en el que Hannibal esté culpando a Will de algo que él mismo hizo.

Alana suspiró — No, pero de todos modos Jack le va a hacer una investigación a Hannibal.

—¿Será una estrategia? — pregunté con duda, en realidad me resultaba extraño que no me haya dicho nada — Cuando tuve la entrevista con Will, él enfatizó que Hannibal le había hablado sobre mi, pero en ningún momento lo nombró como un posible "verdadero culpable"

— Will Graham es imprescindible, no sé qué pensar sobre él. Por momentos creo en su inocencia cuando noto su deplorable estado mental, pero cuando busca culpar a alguien de crímenes que tienen su huella, como el de Abigail Hoobs, lo veo más culpable que nunca.

— Nada revela tanto como el acto de culpar a otros... — murmuré — el principio básico del FBI, ¿No es así?

Alana se sentó al lado mío y acarició a Winston, ya dormido.

— Quiero pensar que él está tan confundido hasta el punto de buscar culpables — negó varias veces — sus pérdidas de memoria son lo que me preocupa.

Me levanté y caminé hacia mis hojas, me había tomado el tiempo de investigar, o mejor dicho, darle un diagnóstico correcto a Will.

— Creo que puede estar padeciendo encefalitis.

— Inflamación en una zona del cerebro que provoca perdidas de memoria y actitudes violentas y poco usuales — agregó — llegué a la misma conclusión, Hannibal también creía que se trataba de eso.

— ¿Entonces a quien culpamos de los crímenes? ¿A la enfermedad, a Will, o a quien culpa Will?

— Es un punto débil que vamos a poder discutir en el juicio. Desde el FBI apelaremos a su enfermedad mental, tenemos buenos testigos, pero la defensa que acusa puede jugarnos en contra. Estamos esperando un milagro con todo esto.

— Mañana tengo una cita con Frederick Chilton, en el hospital psiquiátrico. Bueno, él me citó, parece que quería hablar de algo importante.

— ¿En serio? — preguntó sorprendida — ¿Chilton te citó?

— Estoy igual de sorprendida que tú, pero supongo que quiere saber cosas sobre Will.

Rodó los ojos con molestia — Está desesperado por tener un poco de validación en el caso, quiere que Will sea el asesino que lo lleve a la fama, que lleve a la fama a su estúpido hospital.

—¿De verdad?

— Ya lo verás.