Christian me rodea con sus brazos, acariciando mi cabello y consolándome.
Confesar todo, escuchar mis propias palabras y recordar el terrible pasado me hicieron romperme en pedazos. No podía con esto, con la muerte de mi abuela, con la separación de mis padres, pero, sobre todo, con el rompimiento del increíble vínculo que existía entre mi hermana y yo.
―Lily ―susurra él―. No sé qué decir. Yo, lo siento mucho. No sabía que habías pasado por todo aquello; tampoco creí que Billy fuera capaz de...
― ¿Me crees? ―pregunto, separándome de sus brazos para verlo a los ojos.
― ¡Claro que te creo!
―Mis padres no lo hicieron ―digo con un sollozo, a lo que Christian me atrae a él, abrazándome otra vez.
Pasamos largos minutos así: él abrazándome, tratando de consolarme, mientras que yo no paraba de llorar.
Cuando finalmente me calmo, él cambia de tema de conversación a las luciérnagas. Hace bromas y todo lo que sea necesario para verme sonreír, cosa que logra con facilidad.
Parecía que esa era su habilidad, hacerme sentir segura y mejor...
―Gracias por todo ―digo, caminando mientras tomo su mano.
―Gracias a ti por confiar en mí ―dice, viéndome con dulzura en la mirada, cosa que me distrae y hace que tropiece con algunas de las piedras―. ¡Cuidado! ―exclama, tomándome por la cintura antes de que caiga sobre la tierra.
Y otra vez, ambos quedamos muy cerca.
Christian me miraba de una forma que no podía explicar, mientras yo desconocía lo que sentía en ese momento. Él me regala una sonrisa antes de acercarse lentamente y darme un beso en los labios.
Cierro los ojos, experimentando el contacto de sus labios con los míos. Incierta sobre cómo proceder ante su acción, pues, siendo sincera, era mi primer beso. Ante mis dudas, decido quedarme quieta y permitir que él tome el control del momento. Christian intensifica la presión de sus labios contra los míos, pero al notar mi falta de respuesta, retrocede ligeramente.
―Lo siento ―susurra, viéndome con culpa en la mirada.
―No, perdoname tú. Yo... no estaba preparada ―digo, con pena y nervios recorriendo todo mi ser.
Christian solo sonríe, tomándome de la mano para guiarme de regreso al auto.
💠🔷💠
El tiempo transcurre y nos la pasamos entre conversaciones y risas hasta llegar a casa.
― ¿Tu padre te enseñó a manejar tan bien?
Él aprieta los labios en una fina línea, poniéndose un poco tenso.
―Fue Sak. Él nos enseñó a manejar ―dijo con pesar en la voz.
Escuchar la mención de aquel nombre me recordó la situación actual: Billy tenía contacto con ese tipo.
―Gracias por traerme a casa ―le agradecí con una sonrisa. Después me acerqué a él para darle un beso en la mejilla; sin embargo, mientras yo le iba a besar la mejilla derecha, él haría lo mismo y terminamos por darnos un beso en los labios, cosa que nos hizo apenarnos y reírnos segundos después.
Al bajar del auto, me despido con un gesto de mano, así hasta ver que se marcha por completo.
Con una sonrisa plasmada en el rostro, doy la media vuelta para entrar a casa y me encuentro con Billy, parada frente a la puerta, cruzada de brazos y con la mirada molesta. Billy nos había visto.
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ECOS DEL PASADO
Mystery / ThrillerTras cinco años de ausencia, Lily se ve obligada a volver a su antigua ciudad en California, donde se enfrenta a su terrible pasado y se reencuentra con su hermana, Billy. Sin embargo, nada es como lo recordaba: todo ha empeorado. Con nuevos amigos...