Capítulo 25: Un nuevo sueño.

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(Flashback)



—¿Qué harías si volvieras a nacer con todos tus recuerdos?— Esa pregunta causo un silencio de varios segundos, solo pudiéndose escuchar los teclados y un pitido que comenzaba a palpitar rápidamente.




—JAJAJAJA— La risa desenfrenada de todos, contagió a la persona que había hecho la pregunta.







—¿Qué pedo con la pregunta? ¿Acaso también me preguntaras si no creo que el mundial fue comprado?— El mexicano del grupo toco varias veces los clicks y con ello el arma disparo simultáneamente.





—Como se nota que aun te duele la colaaaa— respondió en un tonó burlón el argentino que escribió por el chat de su grupo "Vayan por B"pero el pitido se volvió más fuerte y veloz.




—¡NOOOO MARICAAA!—Diciendo esas palabras con su acento, el colombiano solo puedo escuchar la explosión del c4 puesto.




—Todo por pensar en la pregunta que hizo este culiado— Tirando con brusquedad sus auriculares en su mesa, el chico terremoto (es de chile) se levanto enoja, viendo a su compañero a su derecha que se reía junto al resto ya que habían ganado la partida.




Habían hecho una juntada con sus amigos trayendo sus pc para jugar algunos juegos, cuando llegaron fueron todos risas que era después de comer a las 10 pm.



luego a las 12 pm comenzaron los insultos y 3 horas después cada uno confesaba lo mal que le iba en la vida con sus relaciones, trabajo, familia, etc.



Lo típico de cuando estas en llamada o en persona con tus amigos y ahora siendo las 5 viéndose el sol aparecer por la ventana, estaban hablando de cosas sin sentido.




—Yo aun me pregunto el por que si en una gota de semen tiene más contenido de vida que una de sangre, ¿por que Drácula no chupa pija?— volviendo hablar el fan de los tacos después de quejarse con sus compañeros.





—El que tiene hambre en pan piensa, ¿no lo crees?— las mejillas del que había hecho la pregunta se pusieron rojas por la vergüenza y ira, causando aun más la gracia de la pregunta.





—No para jajajaja— Dejando de reírse para ver al que había puesto la casa que aun le parecía raro todo lo que ocasiono un reto.




—¿por qué la pregunta, gato?— Todos llevaron su atención al que estaba en la ventana, fueron invitados a su cumpleaños por un reto, se le había caído el carnet y vieron la fecha de su cumpleaños y al convencerlo de jugar verdad o reto en plena clase que por extraña razón decidió participar, lo retaría a que festejara su cumpleaños en su departamento y los invitara para comer y jugar un rato en la pc.





—Si supiera todo lo que pasaría, ni bien naciera en vez de que me regalen juguetes de Ben 10 pediría que me regalen Bitcoin— Varios concordaron con la respuesta dada por el chileno, una delgada sonrisa apareció en el dueño del lugar.






—Yo tendría miedo...— lograron escuchar el susurro casi inaudible para ver su rostro serio pero con una sonrisa triste.






—¿Por qué?— Haciendo la pregunta que todos quisieran saber la respuesta, no sabían que le veria de malo a volver a renacer con todos sus recuerdos, pudiendo arreglar cosas en su vida.Tomandose su tiempo para responder, vio a los 5 chicos reunidos, cada uno de diferente nacionalidad, acento, rostro y personalidades, respiro profundamente antes de responder. —Seguro y varios de ustedes arreglarían cosas, por ejemplo lo del Bitcoin, sus relaciones, evitando que sucedan tragedias, pero...— llevo su mirada a la pantalla de su monitor, donde mostraba las 18 killls que se había hecho en esa ronda.




—Yo tendría miedo...





(Fin flashback)




Por fin había terminado la batalla contra Vetto la desesperación.





—¡Capitán Yami!— Golpeando con su cabeza al peli negro que seguía inmóvil viendo que no se levantara Vetto.






—¡Oye!— Se quejo por el repentino golpe, pero fue rodeado por los de su orden que comenzaron a agradecer por haberlos salvado y también por derrotar al miembro de la Third Eye.




—¿Yoriichi Niisan?— todos vieron curiosos como el pelirrojo, camino hasta los escombros donde estaría Mimosa aun inconsciente.





Sacando las rocas que estarían encima de sus piernas y escombros de sus hombros, la cargaría en forma nupcial para ir junto al resto.





—Puedes decir lo que quieras de que es un vago o que no parece humano, pero Yoriichi...— prendiendo otro cigarrillo para llevárselo a la boca y fumar.





—Es todo un caballero en mi opinión— Pero vio con molestia el como voló lejos para caer en el suelo.






—Magia de Sol: Regeneración Solar— Una luz cubrió el cuerpo de Yoriichi y de Mimosa que poco a poco empezó a abrir los ojos, encontrándose con el rostro del pelirrojo que le sonreía.




—¿G-ganamos?




Asintió con su cabeza el pelirrojo, causando que un peso que era la preocupación de la chica se fuera. —Buenos días, me alegra ver que estes bien— el primer instante en el que lo vio se sonrojo, pero fue dejada con delicadeza en el suelo para que lo viera.




—Yoriichi kun...— Viendo con sorpresa la nueva apariencia del espadachín, había tenido un enorme cambio, sus musculos y altura había sufrido una enorme transformación, y el calor que le había brindado su cuerpo cuando estaba en sus brazos no era lo único caliente. —Yo...— iba a decir algunas palabras Yoriichi su cuerpo perdió tamaño volviendo a su estado normal, para caer desmayado nuevamente al suelo.



—Ya se murió— Gauche vio con una gota de sudor como Mimosa comenzaba a curarlo nuevamente, pero solo estaría inconsciente.




—Gracias, tú descansa— Yami cargo como si fuera un saco de papas a Yoriichi, apareciendo una delgada sonrisa, para volver a ver en el túnel donde se escuchaban pasos.





—Oye viejo, dame la joya mágica— Todos vieron como del túnel aparecia el Sumo Sacerdote ayudando a su hijo a caminar que tenia un brazo al rededor del hombro de su padre, atrás de el caminaban Kahono ayudando a su hermano, Kaito, ya que en la batalla había perdido su pierna.




—La verdades que no sé que es, sólo sabía que ustedes lo estaban buscando, pero para compensar les daré lo que pidan— Justo cuando iba a ser cortado en rodajas de jamón por un molesto Yami. En ese momento se giro a ver al escuchar picotazos y encontrándose con Nero quién tenía la joya mágica en su pico, golpeando la cabeza de Asta con ella.



—Queremos lo que tiene el pájaro




—Es una hembra— Recalcó Asta que ya por fin dejo de batallar contra la ave que había esquivado todos sus ataques.





—¿Sólo eso? De acuerdo— El Sumo Sacerdote no tuvo problemas en aceptar lo pedido, en su mente pensó que la recompensa a los caballeros mágicos le saldría mucho más caro ahora al ser el Templo Submarino salvado.


—Buen trabajo— Los Toros Negros recibieron el cumplido de su capitán, sonrojandose de que fueran felicitados por el.

Luego de eso enviaron a todos los miembros de los Toros Negros que lucharon a una habitación para así tratar sus heridas y que se recuperen así que todos estaban encima de unas camillas.




(Horas más tarde)





Estando todos en su respectiva camilla, recuperándose de sus heridas a su manera, Charmy comiendo, Grey que ya se podía mover se tapaba el rostro con las sabanas para que no la vieran por la vergüenza. Pero la mayoría tenia un mismo pensamiento.




—Es increíble que no podamos regresar hasta que Finral se recupere, eres un inútil— Gauche fue el que dijo esas palabras, con sus manos detrás de su nuca mirando el techo.





—¡Soy tu superior!— Reclamó apareciendo en frente de su rostro, haciendo que el Adlai se girara para ver a otro lado.






—Déjalo descansar, al menos esta vez sirvió de algo— Finral se sintió ofendido pero acepto el cumplido/insulto de la bruja que otra vez estaba en su ropa interior, sin embargo ya todos en la orden estaban acostumbrados a verla así.





Magna que ya llevaba rato despierto al igual que Luck, que ni bien se despertó le pregunto a su compañero de al lado si quería pelear.




Apuntando con su dedo a Luck para luego llevarlo a Vanessa —¡No empieces y tú ponte algo de ropa!— La mujer solo pudo sonreir con picardía para acomodarse en su camilla.




—¿Acaso te sonrojaste, delincuente virgen?





—¡No soy un delincuente!





—Tampoco creo que hayas dejado de ser virgen— Ese comentario ataco el orgullo de Magna, habiendo sido lanzado por Yoriichi que tenia su brazo izquierdo totalmente vendado que le llegaban hasta su hombro, de su pecho hasta centímetros antes de llegar al ombligo también estaría vendado, unas vendas en su cabeza.



Estando del lado de la ventana, al menos podía recibir algo de la luz solar que se dejaba ver a pesar de estar en las profundidades del océano.





—Me sorprende tu resistencia, ¿acaso eres humano?— Preguntó Finral temeroso al verlo de pie.





—No lo creo— Todos acompañaron la opinión dada por Mimosa, que después del pelirrojo era la única medica, el chico había despertado pocas horas de haber usado una increíble cantidad de maná al tener una "Transformación" como esa, era el nombre que le habían dado con el cambio que tuvo Yoriichi cuando vio que Mimosa había resultado herida.




—Que rabia, lo único que hicimos fue que nos apalizaran




Luck que estaría viendo el techo hablo al escuchar a Magna decir esas palabras. —Era inevitable. Ese es nuestro nivel actual— Yoriichi cerró los ojos acostándose en la camilla boca arriba, suspirando mientras se desconectaba de toda la conversación.





—Nunca había visto a Yoriichi Niisan tan enojado— Habló Noelle que se sento en su camilla para ver al pelirrojo.




—es verdad. Cuando Vetto golpeo a Mimosa, el se enfureció y se volvió muy fuerte— Gordon susurro esas palabras que fueron escuchadas por Yoriichi y Mimosa, que este ultimo puso Rojo de la vergüenza.




—Me sentí tan protegida...— murmuro Mimosa que estaba curada pero sentada en su camilla.




—¿Eh, hay una fiesta?— Preguntó Charmy que dejo de comer, todos los demás se empezaron a levantar, Yoriichi se iba a levantar pero Mimosa se acercó a el ayudándolo a levantarse y se apoye en ella.





—Gracias, Mimosa— Ella solo aparto su mirada por la sonrisa que le dio, para luego devolvérsela con sus mejillas rojas, así todos juntos fueron hacia la ventana viendo sorprendidos a todos los habitantes del Templo Submarino celebrando y gritando:





—¡Gracias Toros Negros!




—¡Estuvieron increíbles!





—¡Los salvadores del Templo Submarino!




—¡Son geniales!— Les estaban agradeciendo por haber protegido su hogar y eso fue algo que los hizo sentir felices ya que finalmente los trataban no como rufianes o como la peor orden, si no como los caballero mágicos que son y que a sus ojos eran las personas que los salvaron de la catástrofe.





—Que te den las gracias no esta mal— Comento Vanessa, se le podía notar lo contenta que estaba.





Yoriichi simplemente hizo una pequeña sonrisa observando a las personas del Templo Submarino, aunque luego se alejó de la ventana para ver como Noelle se iba a la habitación de Kahono, siguiendo a la plateada.





Tocó la puerta para luego entrar, encontrándose con Kahono, Noelle y Kiato, el hermano de la chica cantante. Yoriichi observó las vendas en el cuello de Kahono al igual que al mago le faltaba la mitad de una pierna, bajo la cabeza sintiéndose mal.






—Kahono tiene las cuerdas vocales dañadas— Diciendo lo obvio, Noelle quiso presentar al pelirrojo con Kiato que lo miraba fijamente.






Apretando los puños con frustración, ahi iba otra cosa que no pudo cambiar, el sueño de estos magos fue arrebatado por lo que el culpaba era "Su debilidad" —Kiato el es Yoriichi, Yoriichi el es el hermano de Kahono— Yoriichi hizo una leve reverencia sin embargo escucho una voz en su cabeza que pudo reconocer al instante.






—No es culpa tuya, no tienes por que sentirte mal— Yoriichi levantó la mirada para verla sorprendido, pero hizo una sonrisa cuando ella se la ofreció quien le tendía un dedo meñique.





—Prométeme que nos vamos a volver a ver— Yoriichi no lo dudó y se acercó caminando hacia ella para así con su brazo sano levantar el meñique para entrelazar con el suyo.





—Lo prometo— Eso hizo que la sonrisa de Kahono se volviera más grande... Sin embargo Noelle había embobado con su belleza y poder a Kiato, y Yoriichi lo había hecho con lo caballero que fue y su fuerte determinación al no rendirse y proteger a su hermano Asta, lo que todo hermano debería hacer en sus palabras.






(Flashback)





—¿por qué lo tendrías?— El rostro del grupo de amigos se puso serio de repente, cuando vieron la mirada apagada que les mostraba el chico.





—Después de haber arreglado todo en mi vida, no se si seria el mismo y después de llegar a tener la edad que tengo ahora, yo no....





(Fin flashback)





—No sabría que hacer ahora— Termino por decir esas palabras al venirle el recuerdo, estando en frente del cuerpo de Vetto que fue tapado por una sabana blanca junto al capitán Yami.




—Capitán Yami...— susurrando el nombre de su líder, que dejo de dar sus respetos al cuerpo para mirarlo.





—Tengo miedo...— abrió la boca con sorpresa, noto como las manos del pelirrojo temblaban, no sabia la razón por la cual actuaba de esa manera.




—Yo no se que es lo que pasara en el futuro...— Lo que más temía Yoriichi cuando llego a este mundo era que no sabia lo que iba a pasar de ahora en adelante, sabia que su conocimiento era escaso pero pensaba que podría hacer algo para cambiar las cosas, sin embargo solo tuve leves cambios en la historia, ayudando en lo más que podía a los Toros Negros a volverse más fuertes, enfrentarse a sus miedos para enfrentar sin miedo de que salgan heridos o peor aun... que ellos murieran. Solo había llegado hasta el capitulo 51, pensó que para ese entonces podría saber quien era en verdad Licht, pero tenia más dudas que teorías y ni hablar de las respuestas, en el tiempo que paso en este arco de playa y del Templo Submarino, pudo sentir lo culpable que se debe haber sentido Asta al no poder haber evitado que el sueño de Kahono y Kiato se pudiera cumplir, Mimosa casi muere en batalla por su culpa, no sabia que pasaría más adelante y eso... Lo aterraba en su más profundo ser.




—Seas lo que seas que temas, no le des importancia, si necesitas un hombro en el cual llorar después de cada batalla...— Caminando para dejar solo al pelirrojo que se quedo mirando con los ojos abiertos. —Tendrás el de los Toros Negros, mocoso— Yami sonrió mientras sus pasos se escuchaban cada vez más lejos.





—¡No pienses demasiado en ello, centrate en el presente!— Con ese ultimo grito, el capitán Yami se había ido, dejando a Yoriichi pensativo para ver las flores de color celeste que le había dejado Asta a Vetto.




—El capitán Yami tiene razón, yo juro que...




(Horas más tarde)




Una vez Finral estaba recuperado al igual que la mayoría, los únicos con vendas eran Asta y Yoriichi por sus brazos rotos, todos los habitantes de la ciudad del templo submarino estaba allí para despedirlos, Finral abrió un portal pero antes de que empiecen a pasar el portal se empezó a escuchar una voz ronca cantar a lo que inmediatamente los tres que conocían aquella voz giraron a ver, Kahono estaba cantando usando su magia para despedirlos causando cierta tristeza en Yoriichi al recordar su sueño de ser Idol por lo que se le acumularon unas lágrimas en sus ojos.






—Kahono...— Dijo Yoriichi en un susurro. Poco después Kiato la acompaña en la canción. luego su padre al igual que el Sumo Sacerdote y así fue hasta que todos los habitantes empezaron a cantar aquella canción llenando de sentimiento a aquellos miembros de la orden para así uno por uno pasar por el portal, Yoriichi fue el penúltimo pues se detuvo para girar a ver a los habitantes de aquél reino para así levantar una mano con una pequeña sonrisa pero no era para hacer una simple despedida con aquella mano si no que sólo mantuvo el dedo índice levantado para así hacer una especie de disparo parecido a un fuego artificial el cuál explotó en múltiples colores cuyos brillos crearon un toro dejando maravilladas a aquellas personas para así pasar al portal cuándo el brillo de aquél toro se transformó en letras.





"Espero que nos volvamos a ver pronto"




Volviendo para ver el portal con un rostro serio lo cruzaría. Terminando por decir lo que lo había sumergido en sus pensamientos.




—¡Juro que cambiare el destino, para así poder protegerlos a todos!

Un fan reencarnado en Black cloverDonde viven las historias. Descúbrelo ahora