Capítulo 6: Entrenamiento III

563 51 2
                                    

Pov en tercera persona

Sonando Dragon Ball Z Soundtrack Saga Freezer .
—¿Qué mierda?



—¿Desde cuando hay esqueletos en este mundo? ¿También hay creepers?— Esquivando los ataques con las espadas, Yoriichi tenia dificultades por la gran cantidad de enemigos que lo rodeaban.



—Puta madre— Quejándose al haber recibido un corte en su antebrazo, se pondría serio para sacar su grimorio.



—Magia de Sol: Destello solar— Levantando su nichirin hacia arriba que seria cubierta por fuego que iria desapareciendo hasta estar en la punta y crear un destello.



—Problema resuelto...— Siendo mandado lejos por una patada. —Y uno nuevo empieza— Viendo con rabia a su atacante que era un esqueleto con escudo de color negro con una estrella en el medio.




—¿Capitán Ámerica?— Preguntaría confundido por el símbolo, el esqueleto en respuesta apuntaría con su dedo, haciendo que los demás que habían sido cegados momentáneamente atacaran.



—Llego la hora— inhalando grandes cantidades de oxígeno, aumentando el bombeo de sangre por todo el cuerpo, enfocándolo la fuerza total del cuerpo en las piernas y soltando el ataque a toda fuerza para atacar su objetivo.


Sonando Fight Back


—Respiración del Sol: Segunda postura: Cielo azul— Yoriichi giro su cuerpo ejecutando un corte circular a 360°.



Los esqueletos serian cortados en mil pedazos para luego ser quemados, quedando solo uno en pie.



—Ahora solo quedas tú— Caminando con un aura siniestra cubriendo su cuerpo, el esqueleto ni se inmutaría pero en un parpadeo tendría que cubrirse con su escudo para evitar un corte horizontal.



—Pudo bloquear la primera postura— Yoriichi no se contuvo y corrió nuevamente para comenzar una pelea.



—Magia de Sol: Manto solar: Espada flameante— Su nichirin se cubriría en fuego amarrillo para comenzar dar varios cortes que eran bloqueados por el escudo. Intentando dar un barrido con sus piernas, el esqueleto tomaría distancia, para agarrar un martillo de uno de sus soldados caídos. Recibiendo en su pecho el golpe provocado por su martillo para ser mandado lejos.




—Ja, lo sabia— Esquivando su escudo que fue lanzado hacia su cuello intentado rebanarselo, enojado volvería a verlo para recibir una patada doble en su pecho, siendo mandado metros lejos.



—Hijo de puta— Escupiendo sangre por su herida causada, agarraría su nichirin para prenderla de nuevo en fuego.



—Esto aun no termina— Sus músculos crecieron levemente para lanzarse hacia el, pero el martillo y el escudo serian enviados a la misma vez.



—Respiración del Sol: Tercera postura: Espejo Carmesí Sofocante— lanzando dos cortes defensivos. Bloqueando exitosamente el ataque pero el esqueleto no se detendría para comenzar a pelear a puño limpio.




—Estando tan cerca no puedo cortarlo— Bloqueando sus ataques viendo como su Nichirin sufría por los fuertes puñetazos del esqueleto, que empezaría a aumentar la velocidad de sus combos.




Yoriichi vio una apertura al bloquear un ataque con los dos puños del esqueleto con su katana. para pisarle el huesudo pie de su enemigo evitando que escape, el esqueleto miraría hacia arriba para luego recibir un fuerte cabezazo tirandolo al suelo.



—¡En tu cara, perra!— gotas de sangre comenzarían a caer de su frente pero no le importo, prendiendo nuevamente su nichirin respiraría para intentar dar otro ataque de su segunda postura para cortarle el cuello, pero recibiría seria derribado por un ataque del esqueleto que tomo impulso y se lanzo contra el, debido a la posición en la que estaba. El ataque había ido a...



—¡AAAAAAAAAAAH MIS BOLAS!— Neron que miraba expectante la pelea en una baldosa que salía de la pared, solo pudo mirar a otro lado sintiendo el dolor que sufria Yoriichi.



El esqueleto pareció burlarse mientras se alejaba agarrando sus armas, Yoriichi estaba arrodillado con su Nichirin en el suelo clavada, levantándose lentamente, levanto la mirada mostrando su rostro cubierto de venas por lo enojado que estaba.



—¡Pagaras muy caro tu insolencia, gusano!— Poniendose en postura para atacar, esperando el movimiento del esqueleto, ambos saldrían disparados al escuchar el aleteo del ala de Nero como si fuera el silbato dando inicio nuevamente a su combate.



—Cuarta postura: parhelio Arcoíris— Dando una danza evasiva con giros y rotaciones a alta velocidad, esquivando el escudo que chocaría con las paredes que intentaba golpearlo o cortarlo a la mitad, sin detenerse, se acercaría hacia el esqueleto que daría un martillazo ascendente, que le atravesaría la cara. Desapareciendo al haber sido una imagen secundaria de Yoriichi.



—¡Detrás de ti, imbécil!— Escuchando la voz del peli rojo atrás suyo.



—Quinta postura: Rueda de fuego— Estando en el aire mientras giraba su cuerpo lanzando un ataque en rotación que le cortaría la cabeza al esqueleto.



Cayendo lejos patinando en el suelo, Yoriichi respiraría agotado, pero feliz al ver como su enemigo había sido derrotado.



—Lo logre— Levantándose con dificultad caminaría hacia la siguiente puerta, pero Nero que había volado hacia su dirección comenzó a picotearle la cabeza.



—Ay ay ay— Quejándose del dolor, sus manos se alejaron de la puerta.


—Esta bien no la abriré— Dijo Yoriichi al ver como Nero había parado de picotearlo.



(Minutos más tarde)

(Comenzando a sonar 1 Hour - Most Epic Anime Mix - Fighting/Motivational Anime OST)

—Listo— Sonrió feliz al ver su antebrazo que había sufrido un corte, completamente vendado.

 —Sigamos— Empujando la puerta que esta vez no necesito destruirse para que se abriera, aparecieron más trampas y esqueletos.




—Hagamos esto una ultima vez— Cansados de estos enemigos su grimorio brillo mientras flotaba a su al rededor mientras guardaba su nichirin, los esqueletos al notar su presencia se dirigieron a el a gran velocidad.



—Magia de sol: Explosión de Fuego Solar— Estirando sus manos el hechizo que conjuro lanzaría una enorme explosión de energía solar incinerando todo a su paso, este hechizo solo lo podía usar una vez ya que su cuerpo había acumulado durante todo el día que estuvo afuera entrenando. El humo de color negro ocasionado por el fuego, se iria volviendo blanco dando a entender que se fue apagando poco a poco, para solo ver ceniza en el suelo.




Nero entrecerró los ojos curiosa por ese hechizo, de haberlo usado en su anterior pelea no hubiera terminado herido por su combate.



Escuchando pasos que venían a gran velocidad, Yoriichi sacaría su Nichirin para respirar profundamente, viendo como de la siguiente puerta 20 esqueletos llegaban empuñando diferentes armas como Espadas, lanzas, palos de madera con la punta filosa, incluido 3 arqueros atrás de todo.




—¡Lo que me faltaba!— Se quejaría visiblemente mientras sostenía con mas fuerza su nichirin.Gritando mientras corría a la tripulación de Puro hueso dispuesto a darlo todo.




Sin notar como de los muros grietas aparecieron y rocas comenzaron a caer.





(4 horas más tarde)





—¡YA ESTOY CANSADO DE ESTA MIERDA!— Nero volaba lejos al ver el evidente enojo de Yoriichi que estar sin la parte superior de su ropa, su cuerpo tenia cortadas en varias partes, una flecha había atravesado su hombro y hace unos segundos la había sacado y por eso estaba enojado, su Nichirin se las había bancado todas. Llevaba 29 puertas con la anterior donde eran puros arqueros y estuvo 30 minutos para eliminar a 50 esqueletos que no le erraban ni un tiro.




—¿Quién los entreno, Legolas del señor de los anillos? Hijos de puta— Insultando a sus enemigos mientras caminaba a paso lento, de no ser por la concentración total sus heridas hubieran haber llegado a mortales, estando enfrente de una puerta pero esta vez con oro en los bordes y con formas del trébol de 4 hojas, Yoriichi estuvo varios segundos observándolas sin saber si abrirla o no.




En la puerta 18 había tomado un descanso de 20 minutos para recuperar el aliento y vendarse en la parte donde tenia más heridas, pero la mazmorra estaba hecha de mana al igual que los enemigos, esto provoco que a los 5 minutos comenzaran a escucharse paso atrás suyos que eran 16 esqueletos dispuestos a enfrentarse a el.



Los derroto pero no descanso nada, antes de que tuviera que volver a avanzar temiendo que los de la puerta en la que estaba se regenerarían o llegarían los de las puertas inferiores.




—La verdad no quiero entrar, Nero— Hablandole a la Antipájaro en su cabeza, se podía notar que en algunas partes donde tendría que haber plumas estaban quemadas o no había. En respuesta le tiraria el pelo, quejándose del dolor, dio un largo suspiro cansado para abrirla, pero lo que vio lo dejaría impresionado, montañas de oro que brillaban tanto que lo cegó por unos segundos, corriendo mientras ignoraba su dolor Nero estaría arriba de un casco hecho de oro mirando como ignoraba el oro y avanzaba hacia una fuente de sol por el inexistente techo que había.




Eran las 3 pm y había entrado a las 11 a la mazmorra, aun había sol, acostándose mirando al cielo, su cuerpo comenzó a calentarse y su grimorio brillo al lado suyo.




—Magia de Sol: Regeneración Solar— Aprovechando el poder curativo del sol para regenerar rápidamente las heridas y restaurar la vitalidad del usuario. Las partículas en forma de circulo aparecieron en su cuerpo comenzando a curarlo.



—Solo descansare 5 min...— Su voz se silencio y fue remplazada por unos leves ronquidos, Nero volando hacia su dirección se quedo mirándolo fijamente para luego acostarse a su lado y comenzar a dormir, para su sorpresa sintió calidez en su cuerpo al haber sido envuelta en el hechizo hecho por Yoriichi, haciendo que sus plumas comenzaran a crecer.






(Horas más tarde)




Yoriichi se despertaría al sentir un temblor, Nero a su lado volaría metros arribas viendo como grietas aparecían en los muros.



La mazmorra se estaba por romper, el peli rojo había acabado con todos los oponentes habiendo provocado daños severos a la estructura.




—Mierda a este paso quedaremos como Obito, aplastados— Agarrrando dos cofres vacíos comenzando a cargarlos en oro. Nero tuvo una gota de sudor al ver esto, la mazmorra se derrumbaba y el solo pensaba en el dinero, ignorando momentáneamente al oír pasos, esqueletos llegarían de la puerta.




—¡CHINGAS A TU MADRE!— Con claro enojo y preocupación en su voz al ver como 80 esqueletos se preparaban para atacarlo, una gran roca cayo encima de ellos sellando la puerta.



—Ah, olvídalo— Volviendo a lo que estaba haciendo, lleno por completos los cofres, cargando uno en cada brazo.




—Muy bien hora de irnos— Estando todo listo preparado para dar un salto y largarse por el techo. Algo lo detuvo llamando su atención, viendo en una estantería de oro.




—Un minuto— Soltando los cofres correría hacia la estantería con nero en su cabeza que estaría confundida por su repentino cambio de planes.


—Woooow— Mirando con ojos en forma de estrella lo que tenia en sus manos. Una especie de pergamino del que desbordaba un fuego que lo impresiono. Tomándolo en sus manos, lo abriría para decepcionarse.



—¿QUE MIERDA DICE ACA?— Se pregunto mentalmente el peli rojo, saltando lejos evitando ser aplastado por una roca. —No conozco esta escritura— Sin darse cuenta su grimorio comenzaría a brillar al igual que el pergamino, viendo como las letras que poseía comenzaban a desvanecerse.



—¿WHAT THE FUCK?— Exclamó en voz alta al ser cegado por una luz amarrilla, que pocos segundos después desaparecería.




—Las letras...— Pensó seriamente mientras vio que ya no había nada en el pergamino, tirandolo al suelo corrió hacia donde deberían estar sus cofres pero lloro cómicamente al haber como eran aplastados.



—vámonos, Nero...— Cabiz bajo pego un fuerte salto, saliendo hacia la superficie para caer 20 metros lejos y ver como la mazmorra se desmoronaba y se sellaba con arboles y rocas.



—Ahí se fue el dinero para mi jubilación— sin poder hacer nada para recuperar su dinero, se vería los bolsillos.




—Aunque al menos me lleve algo Jeje— Rio por lo bajo mientras caminaba hacia su campamento.




—Soy tremendo soy muy loco— Decía pero fue picoteado por Nero que intento dormir mientras se acomodaba en su cabeza.



—Hoy fue un día largo, supongo que tendré que ir a la ciudad para comprar algo de ropa y pagarle a un diseñador para que me haga una yukata— Suspirando al saber que sus monedas de oro que saco de sus grandes bolsillo pronto se irían.




—Pero fue divertido— Viendo el cielo estrellado por la noche, una fuerte pero agradable sensación de tranquilidad lo inundaría para solo cerrar los ojos y sonreír.


—Mañana será un nuevo día.

*Avance del siguiente capítulo*


—Aquí esta el sueldo de su mes— Arrojandoles una gran bolsa de dinero a varias personas que agradecieron felices por haber recibido sus pagas.

—¡Con esto podre beber hasta reventar— Exclamó euforica una mujer con pelo de color rosado ondulado que lo tiene hasta la mitad de la espalda, que mantiene suelto con un peinado lobulado con flequillo hacia el lado izquierdo, ojos morados, labios carnosos y un cuerpo voluptuoso.

Estando en ropa interior,  que consiste en un par de lencería roja de tirantes finos con diseños de volantes y, usa su bata de escuadrón encima de este atuendo que era la cabeza de un toro negro y al igual que varios personajes más.

—¡Yo podre comer hasta reventar—  Una joven de estatura demasiado baja que podría confundirse fácilmente con que era una niña. Su cabello es de color negro y lo lleva recogido en un rodete donde deja unos cuantos cabellos levantados y otros dos mechones un poco más largo que caen al costado de su cara. Sus ojos son de un peculiar tono verde esmeralda. Entre sus rasgos faciales, lo que más destaca son sus delgadas cejas y su frente ancha, además, en sus mejillas se puede notar un constante sonrojo profundizando aun más su apariencia de niña.

Su vestimenta consiste sólo en una sudadera o buzo de color claro y pantalones de color oscuro. Dicha sudadera se extiende por debajo de su cintura y tiene mangas largas. Además, también tiene un bolsillo en el frente alrededor del área del estómago. Sus pantalones se extienden por debajo de sus rodillas y en sus pies, lleva un par de sandalias simples. Debido a que debe llevar su grimorio a todos lados, posee un bolso de color celeste que lo lleva al lado izquierdo de su cuerpo.

Como miembro de su orden de caballeros mágicos,  lleva una especie de capa con el símbolo de su escuadrón. Es una capa corta y negra que sólo cubre su torso

—Y yo podre salir en muchas citas con varias chicas lindas—un joven esbelto de estatura y complexión media. Tiene los ojos "caídos" y su cabello rubio sucio es algo rebelde. su atuendo es bastante simple. Encima de una camiseta blanca, viste una túnica holgada de color verde claro con mangas largas y faldas largas en la espalda. También usa pantalones oscuros y un par de botas verdes anchas hasta la rodilla que se atan en la parte delantera. Lleva el manto corto de la orden a la que pertenece, y su soporte de grimorio está en su cadera izquierda. También usa un par de aretes verdes.

—¡YA CALLENSE!— Un fuerte grito y un golpe poderoso se escucharía de parte de  su capitan que se fue sin decir otra palabra al no oír nada más y encontrarlos arrodillados pidiendo disculpas.

—Esperenme dulces damas, por que Finral Roulacase va por ustedes— Con una sonrisa y expresión seductora viendo por le agujero provocado por su capitan a la luna que brillaba con intensidad esta noche.

Un fan reencarnado en Black cloverDonde viven las historias. Descúbrelo ahora