Narra Darío
—Naylea, yo necesito...—trato de hablar pero me interrumpe.—Necesitas nada Dario, todos siempre necesitan algo de mí, siempre quieren algo de mí, siempre hablan, pero, ¿cuándo me toca necesitar a mí?, ¿cuándo puedo hablar yo?, ¿cuándo podré querer algo?
>>Dario, yo necesito que me escuches. Me alegra que hayas vuelto, que estés renovado y que de alguna extraña manera te hayas desapegado tan rápido del alcohol, ahora, lo que yo quiero y necesito que entiendas es que tu momento finalizó, este juego de la asistente obediente, de la Naylea tranquila, de la chica que te cree todos tus cuentos, ya no existe, se esfumó, si por alguna razón desaprovechaste tu oportunidad de estar sexualmente conmigo, pues lo siento por ti, pero no quieras venir a terminar lo que dejaste inconcluso, no planeo volver a caer como una tonta.
>>Y,¿sabes lo gracioso?, yo si llegué a quererte, llegué a creer que habías vuelto a ser ese hombre que con tanta admiración Naylea describía, pero no, demostraste que fruta podrida no vuelve a su frescura. Mi mayor miedo es que tu cercanía me dañe, porque no quiero terminar arruinada, arruinada como tú...—concluye.
—Lo siento, ¿si?, hace unos meses era simplemente un hombre vacío por la falta de sus padres, un hombre que creó un caparazón impenetrable el cual destruía a todo aquel que intentara acceder o acercarse a él, pero tú...tú ni siquiera lo intentaste y lograste entrar..Naylea, te quiero, ¿si?, y sé que fui un idiota, te usé e ilusioné, no eres una chica de una noche, eres especial, y aunque me avergüenza admitir esto, ese día cuando ya te tenía desnuda, no pude lograr tener una erección, al principio creí que el problema principal era que no me gustabas lo suficiente como para llegar a algo más íntimo, pero me tardó dos meses darme cuenta de que el problema es que me gustabas tanto como para solo tenerte en la intimidad.
>>Solo te pido que me dejes entrar, que me des la oportunidad de conquistarte correctamente, de quererte a mi manera, y te juro que no insinuaré nada que incluya tu cuerpo hasta que haya recuperado completamente tu confianza. Me cansé de fingir que no me duele no tenerte en mi vida, me cansé de fingir que no fuiste diferente, que no me cambiaste, que no me hiciste sentir, porque la verdad es que estoy jodido...jodido por ti. No pierdes nada con dejarme tratar de conquistarte, te juro que si no veo avance, aceptaré mi derrota y te dejaré vivir feliz.
—Dario, es difícil, es muy difícil para mí, esto tengo que pensarlo—es lo único que contesta—lo que si te aviso, es que: sea cual sea mi decisión, no voy a volver a tu empresa.
—Entiendo, piénsalo—contesto mientras me acomodo en la cama—tengo toda la noche.
—NO, necesito espacio, estas cosas no se aceptan a la ligera, decirte que no significaría encontrarte cada día en mi cama esperando por una oportunidad—tiene razón— y aceptar tu propuesta significa condenarme a que me rompas en mil pedazos.
—Eso no pasará, aclaré mis sentimientos, te quiero a ti.
Tomo su cobertor y me enrollo en ella, planeo dormir aquí.
—Imagina que soy un amigo que se queda a dormir—es la primera mujer con la que he podido amanecer, todo este tiempo estuve extrañando eso.
—Pero no eres mi amigo, sal de mis sábanas.
—Pues, imagina que soy un pobre hombre desamparado que necesita un refugio en esta horrible noche fría—dramatizo la situación.
—De pobre no tienes nada.
—¡Ay Naylea!—la halo hacia mí y la abrazo—vamos a dormir.
Sus músculos pasaron de estar duros y desconfiados a relajarse, posterior a esto, se acomodó a mi lado.
—Pase lo que pase, lo mantendremos oculto, no quiero tener problemas con mi jefe.
—Si, ese idiota, será del primero que me desharé desde que aceptes ser mi novia.
—No creo que lleguemos a ese tipo de relación.
—Tendremos qué.
>>y sobre lo del trabajo, no te preocupes, siempre tendrás un lugar en Johnson's, no necesitas cohibirte por mantener algún puesto, la única condición de esa empresa es ser novia del jefe, solo con ese pequeño detalle te mantienes vigente—sonrío, como si no estuviera hablando de mí mismo, pero esta no me contesta.
•
No sé en qué momento me quedé dormido, pero me despierto y lo primo que hago es volver a cerrar los ojos.¡Tanta claridad dejará esta mujer ciega!
Palpo a mi lado y me doy cuenta de que estoy solo en la cama, me esfuerzo por abrir los ojos y mirar la hora en mi celular.
¡1:00 pm!
¡Nunca había dormido tanto!
A mi lado hay una pequeña notita rosa.
"Me fui al trabajo, vete de mi casa" y un pequeño corazoncito.
¡Cuánto ha cambiado esta mocosa en tan solo dos meses!
Antes no se habría atrevido a escribirme algo así.
O tal vez siempre fue su personalidad, pero la mía no la dejaba desarrollarse.
No sé, me encanta.
Me guardo la notita y finalizo mi intrusión, por ahora.
Reviso mi celular y tengo como 5 llamadas perdidas de Natalia, tal vez está preocupada por mí, ya que ni en mis peores días falté de esta forma a la empresa, es tarde.
Me subo a mi vehículo tarareando una melodía y me dirijo a casa a tomar un baño, mi día empezó con el pie derecho.
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Cortito, pero ACTUALICÉ.
Gracias por su apoyo y paciencia, BESOSSSSSSS💗
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Más que tu jefe
Teen Fiction¿Qué harías si una noche tu madre decide echarte de casa sin nada más que la pijama con que pensabas dormir minutos antes? Naylea es una chica tímida, cariñosa y astuta, nunca ha tenido novio porque cree fielmente en que el amor no se busca, sino, q...