Termino de arreglarme y a pesar de que mis ojos se encuentran hinchados por todo lo que he llorado esta tarde, me gusta lo que veo en el espejo.Llevo un vestido azul marino, de tirantes finos, pegado al cuerpo, con un rajado al lado, me gustan los vestido que muestran una pierna. Este es sencillo, pero se ve delicado, además, el color queda precioso con mi tono de piel; lo acompañé de unos tacones plateados y una cartera de brillos del mismo color.
Salgo de la habitación y espero que mi ex jefe haga lo mismo.
Este lleva un traje negro con una camisa blanca, corbata del mismo color y zapatos formales.
¡Se ve fascinante!
No hace el esfuerzo de siquiera mirarme, sale de su suite y se encamina al ascensor, yo solo me limito a seguirlo en silencio.
Bajamos a recepción y ahí se encuentra el guardaespaldas y chofer, cuyo nombre no recuerdo en estos momentos, esperándonos para llevarnos al evento.
—Espero que hoy sea profesional y no termine haciendo algunas de sus estupideces—me advierte apenas llegamos al lugar.
No respondo, me dedico a bajarme, estoy enojada.
Observo por el cristal y alcanzo a ver personas llegando y periodistas, supongo que esperan a Darío.
—Llegó el magnate—habla uno de ellos, lo que nos convierte en el centro de atención.
—Señor Darío, ¿Cómo se siente hoy?— pregunta el anterior mencionado.
—Perfecto, como siempre—da este su habitual respuesta humilde.
Muchos periodistas se acercan a hacerle preguntas, acción que lo empieza a incomodar.
—Más tarde contesto sus preguntas, hay un desfile que ver.
—Si, nos cuentan que hoy presentarán una nueva colección, ¿es correcto?
—Si—contesta simple.
Entramos con los ojos de todos puestos encima nuestro, me desespera tener tanta atención, no es lo mío.
Al entrar, todo se ve maravilloso, es un ambiente bastante elegante y organizado, hay una música suave de fondo y meceros con bandejas con aperitivos, en el centro se encuentra una tarima, donde las modelos estarán presentando la colección. Darío y yo pasamos hacia los asientos de adelante, lo bueno de ser su asistente es que siempre me tocan los mejores puestos por estar pegada a él, disfrutaré esta noche, no creo que tenga oportunidad de volver a estar en otra fiesta de estas o peor aún, viajar a otro país.
Darío es una persona muy egocéntrica, malhumorada e irritable, a pesar de eso, extrañaré este trabajo, en especial el sueldo, no tengo donde vivir ni trabajo, no sé qué haré cuando regrese a mi país.
El desfile inicia con un ostentoso discurso de mi arrogante ex jefe, que todos aplauden con total agrado.
—Sin más preámbulos, les presento la nueva colección de Johnson's— dice para regresar a mi lado.
—En la tablet hay un pdf con cada prenda y un rango de validación, llénelo de acuerdo a las reacciones de las personas—me ordena.
No contesto, solo me pongo a hacer lo que me pide, quiero que todo salga bien, a ver si así se arrepiente de despedirme.
Como pieza de inicio, sale una chica morena, preciosa, luciendo un vestido rojo muy elegante, escucho varios sonidos de asombro, este de verdad encantó, anoté las reacciones y así fui hasta que terminó el desfile con un pomposo conjunto color azul rey, es precioso. Todo aplauden encantados, la mejor pieza del desfile.
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Más que tu jefe
Teen Fiction¿Qué harías si una noche tu madre decide echarte de casa sin nada más que la pijama con que pensabas dormir minutos antes? Naylea es una chica tímida, cariñosa y astuta, nunca ha tenido novio porque cree fielmente en que el amor no se busca, sino, q...