༺ Wild Breeze ༻

༺ Capítulo LXVI ༻

Jimin se sentía un completo idiota.

Aunque se había dicho a sí mismo que no dejaría que las palabras de SeHun y el imbécil de Min-Hyuk le molestaran y perturbaran su relación con Yoongi, la verdad era que tan pronto como había dejado la casa del abuelo Min... Estuvo pensando en aquel doncel llamado Byung-chul.

Claramente había intentado no pensar en ello y distraerse tanto como pudo, pero con las cosas que le habían dicho aquellos dos idiotas y Taehyung reconociéndolo, no podía dejar de pensar en la teoría de que Byung-chul, podría haber sido uno de esos amantes que tuvo Yoongi en el pasado. Y eso... No le agradaba.

No le gustaba, porque hasta donde sabía, dicho doncel podría tener algunas intenciones sobre su esposo, razón por la cual se pudo haber quedado en el clan Min y que seguía dándose vueltas por el pueblo, seguramente buscándolo.

No es que desconfiara de Yoongi, como le había dicho a este, realmente no le interesaba las relaciones que tuvo en el pasado antes de que siquiera supieran de la existencia del otro, pero... Si una persona del pasado aparecía repentinamente, eso sí lo volvía su asunto.

La posibilidad de que su tonto esposo le engañara era absurda, por más que intentara el idiota de Min-Hyuk y SeHun intentarlo convencerlo. ¿Cómo podría ser aquello posible cuando ese hombre no podía mantener sus manos lejos de su cuerpo, al igual que él?

"Solo estoy perdiendo el tiempo al pensar en estupideces" Se dijo a sí mismo.

Terminando de preparar un medicamento para la fiebre, Jimin la guardó en uno de los fresquitos que su esposo le había regalado y salió de la habitación.

—¿La cena estará lista pronto?

Dejando de revólver la olla, Hoseok le observó con su rostro ligeramente sonrojado al estar cerca del fuego.

—Me falta solo un poco, debería de estar lista para cuando el señor Yoongi termine con sus deberes y vuelva —prometió.

—De acuerdo, entonces saldré un momento —anunció.

—¿En este momento? ¿Cuándo ya falta poco para que el sol se oculte? —preguntó inseguro.

—Aún falta para ello —indicó—. Y quiero darle una vuelta a Silver, este día no he salido de la casa, lo que me ha llevado a pensar tonterías durante todo el día —contó con su nariz arrugada.

El joven esclavo le observó curioso.

—Noté que algo te molestaba ante lo silencioso que estabas y el señor Yoongi también se percató de ello. Me preguntó si alguien había venido a molestarte e incluso interrogó a Jackson al respecto —contó.

—¿Y por qué no simplemente me preguntó?

—Lo hizo, y dijiste que no era nada —indicó.

Sin recordar dicho momento, Jimin arrugó su frente y negó.

—Por eso necesito salir, tengo que despejar mi mente —suspiró.

Acercándose a la mesa, dejó el fresquito en esta y observó a su joven amigo.

—Alguien vendrá por esto, dile que solo le debe de dar una cucharada pequeña a su hijo, uno en la noche y otra en la mañana, no más que eso —instruyó.

—Puedo hacer eso —asintió y le observó tomar la capa de su esposo—. ¿Vas a ir con Jackson?

—Por favor, como si ese guerrero se despegara de mí cuando salgo —resopló—. El único momento en que no me observa es cuando estás tú a mi lado. ¿Algo que debería de saber al respecto? —cuestionó observándole con una ceja alzada.