Cuando Jimin despertó, lo hizo soltando un miserable sonido y con sus manos haciendo presión en su cabeza, como si eso realmente pudiera ayudarle con el horrible dolor que sentía en ese momento.
Con la cama hundiéndose ligeramente a su lado por otro peso, el doncel se quejó.
—Por eso te dije que no bebieras tanto anoche —indicó la profunda voz de su tonto esposo.
—Pero si no bebí tanto —se quejó—. Me quitaste todo y solo me dejaste comer —refunfuñó.
—Y si así sientes que tu cabeza te quiere matar, significa que tienes poco aguante para la cerveza y bebiste lo que más pudiste —suspiró Yoongi, observándolo.
—No necesito un sermón en este momento —refunfuñó—. Yo no te di ninguno cuando te desmayaste de tanto beber —le recordó.
—Vamos, siéntate —indicó el guerrero.
—No, déjame morir aquí tranquilamente —se quejó.
—No sabía que además eras un dramático —resopló Yoongi, solo un poco divertido—. Ven aquí —anunció, y ayudó al doncel a sentarse cuando fue obvio que este no se movería.
Tirando del cuerpo delgado y pequeño contra él, Yoongi lo apoyó en su costado y volvió a tomar el vaso que había llevado.
—Aquí, bebe esto —indicó, acercándoselo a esos labios rellenos.
—¿Qué es eso? —se quejó Jimin, sin abrir sus ojos.
—Es un brebaje mágico para el dolor de cabeza —indicó, empujándolo directamente contra esos rellenos labios.
Observándolo beber un trago, sonrió levemente cuando todo el rostro de su esposo se arrugó en disgusto tras probarlo.
—Ugh, esto es peor que malo —se quejó.
—Lo sé, pero ayuda —aseguró, volviendo a empujar el vaso, pero Jimin solo corrió su rostro presionando sus labios con fuerza—. Vamos, no eres un niño de cuatro años —indicó.
—No me gustan las cosas amargas —se quejó, entreabriendo ligeramente sus ojos.
—Tienes que beberlo si no quieres que tu dolor de cabeza solo empeore —indicó, observando ese hermoso color plateado.
—Solo déjame dormir más, pasará con ello, como todos los dolores —aseguró volviendo a cerrar sus ojos.
Solo que, sus palabras volvieron a pinchar en Yoongi y no de la forma correcta.
¿Por qué parecía que Jimin había estado cuidado de sí mismo durante toda la vida cuando era el hijo de un jefe?
Esa duda tenía un poco molesto al guerrero, y no le gustaba para nada la sensación de que realmente fuera así.
—Lo siento, no te dejaré —anunció y apoyó bien a Jimin contra su cuerpo antes de presionar su pulgar sobre ese relleno labio inferior.
Obligándolo a bajar, Yoongi aprovechó y empujó el vaso para que Jimin se bebiera todo de un solo viaje, lo que por supuesto que molestó al doncel, quien se incorporó molesto.
Antes de que este se comenzara a quejar, Yoongi calló esa boca presionando sus labios juntos, solo una leve presión, dulce y sin ninguna intención más. Cuando se alejó, se encontró con la confundida expresión del doncel, con esos destellantes ojos plateados mirándole con sospecha.
—¿Por qué hiciste eso? —preguntó Jimin, entrecerrando su mirada en él.
—Para que no te quejaras —respondió y le volvió a acomodar en la cama—. Duerme más, cuando despiertes deberías de estar mejor —indicó, observándolo.
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༺ Wild Breeze ༻
FanfictionUn matrimonio no deseado y un triángulo amoroso en el que no estaba incluido nunca han sido una buena combinación. El doncel Park Jimin no es el joven más feliz del mundo cuando su padre, el jefe del clan Park y un hombre que lo odiaba irracionalme...