༺ Capítulo LXIX ༻

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En el momento en que Min Yoongi entró a su casa, inmediatamente detectó que algo estaba mal. Horriblemente mal.

La casa estaba casi a oscuras, a excepción de la fogata, la mesa en la cual se suponía que debería de estar servida su cena junto a la de su esposo se encontraba completamente vacía y no había señal alguna del joven esclavo de su doncel o de este mismo.

La culpa le invadió, ya que había llegado mucho más tarde de lo que prometió, lo que indicaba que su pareja seguramente se aburrió de esperarle para cenar juntos. Pero... Jimin no era exactamente la clase de doncel que se enojaría por ello, en especial cuando sabía que se encontraba ocupado con temas del clan.

Quitándose su capa, el guerrero la colgó cerca de la puerta. Sintiendo una presencia, su mano instintivamente viajó hacia la empuñadura de su espada y alzó la mirada. De entre la oscuridad, la hermosa figura de su doncel emergió.

—Finalmente llegas.

Todo el cuerpo de Yoongi se relajó al contemplar a su esposo, pero inmediatamente, sus músculos se volvieron a tensar al observar más a detalle la figura de su doncel. Parado en toda su altura, con sus hombros derechos, sus músculos tensos y una expresión en blanco, aquellos hermosos ojos plateados le observaban con una frialdad que sacudió al guerrero.

—Lamento haber llegado tarde. Me retrasé un poco con el trabajo, había más cosas que arreglar antes de las semanas frías.

—¿Tanto como para mantenerte mucho más tiempo después de que el sol se ocultara?

—Bueno, había otros asuntos que atender. No porque ya no estemos invadiendo otros lugares significa que tenemos menos trabajo que hacer —explicó.

Y aun así, esa expresión en blanco permaneció en su pareja.

—Tenemos cosas de las cuales hablar —anunció Jimin, con tono frío.

Tenso, Yoongi asintió. Quedándose donde estaba, cruzó los brazos sobre su pecho.

—¿Qué está ocurriendo? —indagó.

En silencio, Jimin se acercó más al fuego y lo observó abrazándose así mismo.

—Hoy me he enterado de cosas bastante interesantes —anunció, interrumpiendo ese tenso silencio.

—¿Qué cosas?

—Yo haré las preguntas aquí, Yoongi. Y tú me responderás cada una con ellas solamente con la verdad —aclaró y le observó sobre su hombro—. ¿Quedó claro?

—Perfectamente.

—¿Juras responderme con la verdad no solo por tu honor como guerrero, sino que también por tu familia, el clan Min?

Juntando sus cejas un tanto extrañado, Yoongi asintió.

—Quiero palabras.

—Lo hago.

Asintiendo satisfecho, el pelinegro doncel volvió su mirada hacia el chispeante fuego y lo contempló unos largos segundos en silencio.

—Aceptaste haber tenido amantes antes de conocerme, ¿alguno de ellos fue un doncel?

—Nunca. Te dije que no-...

—No quiero excusas o explicaciones. Limítate a responder lo que te pregunto y nada más —cortó Jimin.

Juntando sus cejas, el guerrero tensó su mandíbula, pero aceptó la demanda de su pareja.

—¿Te has acostado con algún doncel antes de conocerme? Ya fuera aquí en el clan o fuera de este —prosiguió Jimin.

༺ Wild Breeze ༻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora