Capítulo 13: Sombras en la Pista

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Al cruzar la puerta hacia la pista, el sonido del público se hizo escuchar. Había muchas personas presentes, muchas llevando diferentes pancartas con fotos de sus patinadoras favoritas. Entre ellas, muchas mostraban la imagen de Irina, lo cual era normal; siendo una de las mejores patinadoras del país, tenía una base sólida de fans.

Ethan y Klara caminaron hacia el borde de la pista, ubicándose en su posición. Mientras esperaban a que las patinadoras entraran al hielo para el calentamiento previo a la actuación, ambos permanecían en silencio, cada uno concentrado en su propia manera. Klara, siempre más observadora, notaba las miradas de algunos de los entrenadores presentes. Era normal, después de todo, Ethan a pesar de ser conocido como patinador, esta era la primera vez se presentaba como entrenador en una competencia con una patinadora tan destacada como Irina. 

Klara, por otro lado, era aún más enigmática para los demás entrenadores. Desde la perspectiva de ellos, parecía una acompañante más, una entrenadora casual con poca experiencia. Algunos parecían sorprendidos al verla junto a Irina, como si intentaran deducir su relación o su rol. Las preguntas no tardarían en llegar a las gradas de los otros competidores, donde los cuchicheos ya empezaban.

—Se están preguntando quién eres —murmuró Ethan, sin apartar la vista del hielo.

—Y les va a tocar quedarse con la duda —respondió Klara sin ningún interés aparente.

El momento de entrar al hielo llegó, e Irina, junto al resto de las patinadoras, se deslizó hacia el centro de la pista para comenzar su calentamiento. Su figura se movía con una fluidez innata, dominando cada paso con precisión. Pero lo que más destacaba era la mirada fría y calculadora que acompañaba cada movimiento. Era evidente que Irina no veía a sus rivales como iguales. Para ella, ellas no eran más que obstáculos.

Ethan se apoyó en la barrera, con los ojos clavados en cada detalle de su patinadora. Su expresión era seria, casi severa. Sabía que el talento de Irina no estaba en duda, pero su actitud le preocupaba. Mientras tanto, Klara permanecía a su lado, con los brazos cruzados, sin apartar la vista del hielo.

Varias patinadoras se acercaban a sus entrenadores para recibir pequeños consejos antes de regresar al centro de la pista y continuar con el calentamiento. Irina, por su parte, solo se acercó un momento para entregar su abrigo, cuando ya sentía que su cuerpo estaba más caliente. Su actitud era clara: no necesitaba consejos, al menos no de su entrenador.

Ethan observaba la escena con preocupación. Sabía que Irina no se acercaría para escuchar sus sugerencias, como era costumbre. La patinadora estaba acostumbrada a imponer su propio ritmo, sin considerar las recomendaciones que no se ajustaban a sus planes.

—¿Lo notaste, no? —preguntó Klara, interrumpiendo el silencio.

Ethan asintió con la cabeza, sin apartar la vista de la pista. Sus ojos seguían los movimientos de Irina, observando cada giro, cada salto.

—Sí, no deja de practicar triples Axel. Y el programa que preparé para ella no tiene ninguno —respondió Ethan, soltando un leve suspiro mientras frotaba su barbilla pensativo.

—Hará lo mismo que con el resto de entrenadores, modificará el programa en la pista —comentó Klara, negando con su cabeza. 

—No es lo único que me preocupa —replicó Ethan, con su mirada aún fija en la pista. Había algo más, algo que iba más allá de las modificaciones en el programa.

—¿A qué te refieres? —preguntó Klara, girando ligeramente hacia Ethan.

—Me di cuenta de algo. Irina no ha estado descansando de los entrenamientos. Lo disimula bien, pero ayer noté cómo no dejaba de frotarse los músculos, y su mirada se nota cansada —explicó Ethan, notándose la inquietud que sentía.

Orgullo de InviernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora