•El arte de conectar en tiempos difíciles•
En un mundo devastado por los muertos vivientes, Daryl y Rose encuentran consuelo en el otro. Unidos por la lucha por sobrevivir, enfrentan tanto las amenazas externas como sus propios miedos y sentimientos...
Capítulo 26. ________________We are the walking dead.
"Soy un desastre y eso es lo que mejor tengo para ofrecer." Ron Israel.
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Rose había estado en peores situaciones, pero eso no significaba que estuviese acostumbrada a la angustia que la invadió al ver la horda aproximarse. Sin ningún arma a su disposición, la posibilidad de supervivencia era casi nula.
-¡Maldita sea, Spencer!- Rose golpeó las rejas de la comunidad con furia, viendo cómo una pequeña horda de caminantes se aproximaba rápidamente. El pánico la invadió al darse cuenta de que no tenía armas. -¡Abre la maldita puerta, marica!
Desde el interior, Spencer apenas había visto a un par de caminantes, pero su instinto de supervivencia lo llevó a correr hacia la seguridad. Sin pensarlo, cerró las rejas con desesperación, ignorando los gritos de Rose.
Él solo pensaba en protegerse, en evitar que los muertos entraran y destruyeran todo lo que quedaba.
-Más vale que estas cosas me maten, o te juro que serás el primero al que me lleve- gritó Rose, su voz llena de rabia, mientras la horda la rodeaba, cada vez más cerca.
Atrapada, sin otra salida, Rose miró desesperadamente a su alrededor. Sus ojos se detuvieron en una piedra cercana, y sin pensarlo dos veces, la levantó con fuerza. Golpeó el cráneo de uno de los caminantes con toda su energía, viéndolo caer al suelo. No había tiempo que perder. Los siguientes vinieron más rápido, y Rose, con una fuerza desmedida, utilizó huesos rotos que le arrancó a los otros cadaveres y la piedra para clavarlos en los cerebros de los muertos, uno tras otro, haciendo lo que fuera necesario para mantenerse viva.
Un ruido familiar corto el aire, un sonido que Rose había llegado a reconocer demasiado bien. Una flecha atravesó el cráneo de un caminante que, justamente, le había rasgado la manga de su camiseta. Por suerte, el filo de los dientes o las uñas no la habían llegado a dañar.
...🧟♀️
-No vuelves a acercaste a él.- Amenazo Daryl, en voz baja, su tono tan frío que parecía que cortaba hasta el aire.
-Ya soy lo suficiente..- Comenzó Rose, pero Daryl no la dejó terminar.
-Me importa un carajo lo que seas, la jodida reina de Inglaterra puedes ser.-Trataba de hablar calmado, pero los nervios y el enojo jugaban en contra.- Pero no te vuelves a acercar a ese idiota, y si tengo que matarlo para que no lo hagas, lo hago.- Apuntó un dedo hacia ella, los ojos fijos en los suyos.- Sabes que lo haría, gata.
Rose lo miro en silencio, sin moverse una pulgada. Finalmente se encogió de hombros, como si todo fuera una simple pelea más.
-No entiendo qué pasa por tu cabeza.- Siguió el hombre, su frustración demasiado evidente.- Soy capaz de sacrificar mi vida por ti, sin ser absolutamente nada para ti, y tú quieres correr a los brazos de un niño que prefería sacrificar tu vida para salvarse el culo.
