mi alma gemela

capitulo 45

No me desperté del todo hasta bien entrada la mañana. Entumecida, me lave los dientes con el cepillo y la pasta del hotel y me vestí. Mi estomago rugió. Examine el mini bar y tome una galleta de chocolate y una botella de coca cola. Luego me senté a esperar. Me encontraba en medio de una crisis pero todo parecía muy tranquilo, como si me encontrara en el ojo de la tormenta

No me atreví a comunicarme de nuevo con Jorge. El savant debía de estar levantado y yo no conocía demasiado la forma de derribar escudos. Esperaba que Jorge recibiera mi mensaje de no venir volando hasta aquí. Necesitábamos un plan para que yo escapara de aquí y no un segundo rehén

Tocaron la puerta: no era el comportamiento que esperaba de mis secuestradores cuando se abrió apareció Gator con una bandeja

-buenos días, cariño ¿dormiste bien?

-realmente no

Ignorando mi respuesta dejo la bandeja en la mesa junto a la ventana

-desayuna. Come rápido el jefe quiere verte

No estaba segura de poder tragar algo. Para no irritarlo al negarme a cooperar en algo poco importante, levante la tapa. No, no podía comer esos huevos. En su lugar, tome unos sorbos de jugo de naranja y mordisquee una galleta. En vez de marcharse se posiciono al lado de la ventana fingiendo dispararles a los pájaros que volaban

-ya comí suficiente, gracias – exclame y me puse de pie. El hecho de que me encontrara con el jefe cara a cara no era un buen presagio para mí

-muy bien vamos – me sujeto fuerte del brazo y me condujo hacia el pasillo. Cuando llegamos Gator golpea la puerta una vez y espera el permiso y luego entró llevándome a la rastra

Había tres personas en la mesa. Mis ojos se dirigieron al mayor: un hombre con pelo negro teñido, tenía un traje de diseñador y usaba una corbata naranja que combinaba con su piel bronceada. A cada lado de él se encontraban un hombre y una mujer jóvenes. El parecido familiar era suficiente como para saber que eran sus hijos o parientes cercanos

-aquí esta Sr. Kelly. Esperare afuera – Gator me dio un empujoncito hacia la mesa y se marcho

Durante un rato el hombre se quedo mirándome en silencio. Era claro que los demás estaban esperando que el hiciera el primer movimiento. Lo único que sabía era que los blanco habían ayudado a condenar a dos de la familia Kelly. Supuse que estaba en frente del famoso Daniel Kelly presidente del imperio económico Kelly

-ven aquí – me hizo señas para que me acercara

De mala gana, camine alrededor de la mesa

-O'Halloran dice que eres un savant

-no lo sé – hundí las manos en los bolsillos para disimular el hecho de que estaba temblando

-lo eres puedo verlo. Es una lástima que te hayas visto envuelta en todo esto – me lanzo una sonrisa sin remordimiento. El joven a su derecha se movió

-papa, ¿estás seguro que los blanco se van a entregar por ella?

-sí, trataran de hacerlo no podrán contener el deseo de intentar proteger a una niña inocente

-¿y la policía? Ya deben de estar informados

-nunca podrán relacionarnos con el secuestro. Y ella les dirá exactamente lo que yo le pida que diga – se reclino en la silla – fascinante hay zonas muy oscuras dentro de su mente

Alarmada retrocedí unos pasos. Estaba leyendo mi mente. Jorge me había dicho que yo siempre revelaba demasiado a otro savant. Levante paredes tan pronto como pude

-turquesa. Un color tan de niña, ¿no lo creen?

-sin embargo no son tan fuertes – comento la joven - papi yo podría quebrarlas por ti

-no no quiero quebrarlas todavía

Sentí que el mundo se derrumbaba sobre mí. Los blanco habían pensado que había un solo savant involucrado en esto; lo que no habían previsto era que los Kelly tenían los mismos poderes que ellos. De repente todo el caso se había vuelto mucho más complicado

-te estas preguntando que haremos contigo ¿no es cierto, Martina?