capitulo 19 parte 2

659 52 1
                                    

-Está bien Mechi, iré con el – y tome el casco

- si estás segura – agrupo su pelo hacia atrás, un gesto que significaba que estaba incomoda. En realidad no estaba segura, pensé

  - nos vemos mañana-si- su última mirada me dejo en claro que cuando la volviera a ver recibiría un duro interrogatorio sobre lo sucedido. Jorge me condujo hacia su motocicleta, estábamos atrayendo demasiadas miradas de asombro-nunca anduve en una de estas antes – admití mientras subía detrás de el

 - El secreto es sujetarse fuerte – no podía ver su cara pero hubiera jurado que sonreía. Me deslice hacia adelante y enrolle mis brazos en su cintura, mis piernas rozaban su caderas. Saco la moto con cuidado del estacionamiento y se dirigió hacia arriba de la colina. Sentí una leve caricia de su mano sobre la mía en un gesto tranquilizador - ¿estás bien ahí atrás?

-perfecto

-¿quieres ir un poco más lejos? Puedo llevarte arriba de la montaña. Todavía quede una media hora de luz

 -tal vez un viajecito corto – paso la curva que llegaba a mi casa y siguió por otra ruta. La zona era bastante desierta, había unas pocas cabañas para casas y un par de chalets aislados. Se detuvo en un promontorio con una hermosa vista sobre el valle. El sol se estaba poniendo en frente de nosotros y bañaba todo de una luz color miel que le otorgaba cierta calidez a pesar del frio. Una vez que estaciono la moto me ayudo a bajar y dejo que contemplara la vista unos minutos

- Martina, ¿Cómo pasaste el día hoy? – proviniendo de Jorge una pregunta tan común, resulto una sorpresa: ¿el hombre lobo se convertía en un perro faldero?

-bien. Durante la hora de almuerzo me dedique a componer

-te vi tocando el piano

-¿y no entraste?

-estoy siendo cuidadoso contigo – respondió sonriendo y alzo las manos – muy cuidadoso. Eres una chica brava

-¿yo?-piénsalo. Me gritaste en el estacionamiento frente a mis amigos, atajaste mi mejor penal, me echaste de tu manzano... si eres aterradora

-me gusta cómo suena eso – repuse con expresión risueña. Super Martina. Esbozo una sonrisa ¿habrá adivinado mis pensamientos?

-pero lo que más me atemoriza es que haya tanto detrás de nuestra relación y tu ni siquiera estas enterada

-muy bien, Jorge – dije con suspiro – intenta explicarme nuevamente. Esta vez te voy a escuchar

-supongo que no sabes nada sobre los savant

-se mas de futbol – el comentario le resulto bastante gracioso

-te voy a dar un poco de información como para empezar. Sentémonos un momento – al alzarme para que pudiera acomodarme en un tronco caído, puso sus ojos al mismo nivel que los míos. Eso era lo más cerca que habíamos estado desde la balsa y de pronto sentí la intensidad de su mirada recorriendo mis rasgos, como si estuviera recorriendo mi piel con sus dedos y no con la mirada

 – ¿estás segura de que quieres oír? Porque si te lo cuento, tengo que pedirte que guardes el secreto, por la seguridad del resto de mi familia-¿a quién se lo contaría? – mi voz sonó extrañamente agitada

-no lo sé. Tal vez a un periódico sensacionalista como el National Enquirer. A Oprah. A la corte suprema – contesto con tono irónico

-eh, no, no y definitivamente no – reí mientras enumeraba con los dedos

-muy bien -

bueno, espero que les guste este capitulo, la novela se pondra cada ves mas interesante, pasaran muchas cosas que ni yo cuando lei el libro me imagine que pasaran. espero que les este gustando. mañana intentare subir un capitulo o dos  

mi alma gemelaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora