5.

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Caminé entre las personas, y localicé el baño, entré, revisé mi maquillaje, lave mis manos, y Salí, en este club había dos veces más hombres que mujeres, o más o menos eso calculaba, salí, me encontraba en la mitad de la pista de baile, intentando dirigirme nuevamente a la barra, quería otra cerveza o tal vez algo más fuerte, hoy había ganado, un ligero toque en mi hombro me hizo girar, y me encontré a un chico bastante apuesto, tenía la misma estatura que yo con tacones de diez centímetros y plataforma, pero los de hoy son un poco más bajos, solo un poco, su cabello era castaño claro y sus ojos café igualmente claros, tenía un suéter gris manga larga pero estaba remangado a la altura de sus codos, por debajo de este salía un suéter blanco más largo que el gris, tenía un pantalón claro un poco holgado, y unos Nike blancos, relucientes, por debajo de su suéter, brillaba una cadena de oro, en sus antebrazos, había tatuajes, bastantes tatuajes, un Rolex plateado adornaba su muñeca y un arete en una de sus orejas, es bastante guapo, y el cambio de luces de colores lo hacía ver aún más guapo.

- Perdona, ¿quieres bailar?- dijo mientras me tendía una mano. ¿y ahora que le digo?, <<solo haz lo que cualquiera en tu lugar haría, baila>>, le hice caso a la voz de mi conciencia, y me giré, el ritmo cambió y ahora era uno lento, pero no era un lento romántico, no... era una lento, no sé... Caliente, moví mis caderas al ritmo de la música, y el no demoró en acercarse a mí, su pecho estaba contra mi espalda y sus manos en mis caderas, él se meneaba junto a mí en un ritmo sincronizado y lento, su tacto caliente en mi abdomen desnudo solo hacía que fuéramos más lentos, aunque la canción en momentos aumentara de ritmo, parecíamos estar a gusto bailando el uno con el otro, no sé cuántas canciones pasaron hasta que me sentí un poco cansada, me separé un poco a mirarlo y el parecía en un trance, sus ojos estaban cerrados y parecía disfrutar del momento, lentamente sus ojos café se abrieron dejándome pasmada por tanta belleza y mis ojos parecieron hacer en él el mismo efecto, ¿pero que me estaba pasando a mí?, simplemente no soy así, me alejé de él y tomó mi mano con bastante dulzura, tanta que me empalagó, ya había planeado una forma disimulada de quitar su mano, pero unos brazos en su pecho hicieron que diera pasos desesperados hacia atrás, lo habían empujado, ¿pero quién?, giré sorprendida, no asustada, porque vamos, ya sabemos la fama que tiene el trío con el que estoy, pero me llevé una grata sorpresa al girarme.

- ¿Qué mierda te pasa Jordan?- pregunté, el sujeto con el que bailé estaba otra vez a mi lado, pero ahora se veía un poco furioso.

- ¿lo conoces?- las personas y su manía de hacer preguntas con obvias respuestas.

- Evidentemente...- dije con entonación de "¿No es Obvio?"

- La única pregunta que merece respuesta es... ¿Qué haces tú bailando con él?

- ¿perdona?, tienes algún problema, ¿acaso te importa con quien bailo, hablo o me acuesto?, puedes decir y pensar lo que quieras pero la respuestas es no.- le sonreí y empecé a caminar en dirección a la barra.

JORDAN.

Esperé aproximadamente 5 minutos sentado en aquel mueble en forma de "L", que se encontraba en una esquina del club, Ash se levantó hace varios minutos, preciso en el momento en el que me senté, creo que cuando dice que le caigo mal y que ha iniciado una guerra, no lo dice para nada en broma, lo cierto es que no pensé que una niñata de 16 años me fuera a llamar tanto la atención, es que con simplemente ver como camina o se expresa, llama tu atención porque esta jodidamente caliente, y sus pechos no son para nada pequeños pero tampoco grandes, son algo así como una medida perfecta, y ni hablar de sus cintura es jodidamente estrecha y su abdomen está marcado, además utiliza chaquetas de cuero, ella es como una combinación de niña rica y buena, pero percibo en ella un esencia de malicia, me intriga, pero ese sentimiento me da igual, solo la quiero en mi cama, tal vez un par de veces, lo que no pongo en duda es que nunca he visto una igual de ella, porque Joder su físico la saca de este mundo, pero su carácter la coloca en una posición alejada de todo el jodido universo, maldita sea! Ha sido la primera mujer que me ha golpeado en los últimos tres años, sin contar que me ha retado, ha interrumpido un beso, me ha insultado e incluso declarado una guerra, y no nos hemos juntado por más de 24 horas, rio por ese detalle, y sinceramente me sorprendo esta demoniaca mujer claramente intenta apoderarse de mis pensamiento pero va a ser para ella muy difícil de conseguir, y por cierto está tardando en volver, estoy levemente preocupado, pero no exactamente por ella, si no por el desastre que sería esto si algo le pasa, digo por Scott y Max, no por mí, creo...

All Of Me.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora