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Una luz blanca me encandila, se hace molesto para mis ojos y comienzo a parpadear lentamente para tratar de quitar la molestia, pero es un intento fallido, cada vez se vuelve más molesta. Siento personas a mi al rededor moviéndose de un lado a otro pero no están en mi campo de visión.

Pienso lo peor de manera inmediata, tal vez lograron sacarme de Miami y no lo sé... me duele muy fuerte la cabeza y ignoro mis pensamientos para no agobiarme, trato de incorporarme pero es inútil, inútil y muy doloroso.

-¿como te sientes? - me siento desubicarse al no saber de donde proviene la voz masculina que me habla. Busco girando mi cabeza lentamente y la encuentro a mi lado de derecho, el hombre quien supongo que es médico está con una jeringa, inyectado algo en una bolsita transparente que desprende un cable, sigo la trayectoria de este y termina en mi mano, pegado con una cinta de color piel.

- Ashley, ¿como te encuentras? - pregunta nuevamente.

- bien.- mi voz es casi inaudible. Salvo el dolor de cabeza, el dolor en todo el cuerpo, la incapacidad de moverme y la sensación de debilidad, me encuentro bien.

- eres fuerte, te vas a recuperar pronto. Tienes muchas personas que te quieren, no se han movido de aquí desde que llegaste. - el mira hacia el fondo de la habitación y yo con esfuerzo levantó un poco la cabeza para ver de qué me habla. Hay un montón de peluches, globos, flores y cajas decoradas, con un montón me refiero a muchas. Mis chicos.

Quiero preguntarle por ellos pero realmente hacer el esfuerzo mínimo requerido para hablar me resulta doloroso.

- acomodare un poco tu camilla para que estés más cómoda.- asiento muy ligeramente y este se inclina para presionar algunos botones que elevarían el espaldar de la cama.

-¡ouch! - gimo de dolor cuando la camilla empieza a elevarse lentamente, realmente me duele todo.

- te prometo que te recuperas en nada, llamaré para que te hagan el informe y luego puedan pasar a visitarte todos. También que te den algo para disipar un poco el dolor.

- Gracias.- susurro levemente y este se marcha luego de darme una sonrisa amable.

Los alemanes me llevaron a una casa, reconocí las calles y podía asegurar que estaba cerca del dichoso instituto, la casa pude verla antes de que me metieran rápidamente, tenia un aspecto demasiado común como para que fuera sospechosa, adentro la casa era un jodido laberinto y entre tantos pasillos había un sótano, cundo llegamos abajo, los hombres de los
Alemanes movieron estantes donde apareció otra puerta, recuerdo que en ese momento pensé que estaba perdida por completo, no había manera posible de huir, eran muchísimos hombres muy armados y yo estaba completamente indefensa y bastante herida, ya habia recibido muchos golpes, mis manos escocían de tanto moverlas tratando inútilmente de reventar la soga que las ataba con fuerza. Pero lo que en ese momento no sabía, es que todos los golpes que me habían dado hasta ese momento eran una amable introducción de lo que me esperaría en cuanto cruzara esa puerta.

Cada hombre me golpeó por lo menos 3 veces , recibí muchas humillaciones y los intentos de violaciones fueron muchos, demasiados. No se cuanto tiempo pasé ahí, entre golpes perdía la conciencia y luego otro golpe me levantaba, fue verdaramente horrible, luego todos se fueron y "descansé" a ratos volvía a perder la conciencia, pero trataba de mantenerme fuente y sollozaba amargamente por el dolor de mis heridas, me habían cortado, tanto la piel como mi ropa, sangraba por todas partes y mis ojos estaban entrecerrados de lo hinchado por los golpes, el sabor metálico de la sangre era constante en mi boca y una parte de mi torso dolía terriblemente.

En ese momento había perdido todas las esperanzas, yo había escuchado su plan mientras me golpeaban, iban a enviar a muchos hombres de señuelo para tratar de matar a Jordan y me sacarían a mi de Miami para seguir negociando en caso de que no lograran matarlo. Eran un plan bastante bueno, con un margen de error pequeño, iba a morir y a pesar del esfuerzo que seguramente los chicos estaban haciendo no iban a poder evitarlo, eso era lo que tenía en mi mente.

All Of Me.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora