Baila para mi, kitten.

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Entonces, ¿entendiste, Lou? –Preguntó un profesor recostado en el piso, tirando una pequeña pelota al techo.–

Sí, sí, pero ya me aburrí profesor Harry..–Respondió un Louis tumbado en el sofá de terciopelo, haciendo un pequeño puchero con sus labios.–

A ver. –Susurró Harry pensando en algo (que no fuese tener sexo) para pasar el rato.– ¿Quieres jugar, Lou? Podemos jugar verdad o reto.

¡Si! –Respondió Lou sentándose en el sofá en posición de yoga.– Será mucho mejorcito que estar acá de aburridos, no me lo tome a mal profesor, pero estoy aburridito de tanto colegio.

No te preocupes Lou, a ver, ¿verdad o reto? –Habló primero el mayor mientras miraba de reojo al menor.–

Verdad, profesor. –Mencionó Lou luciendo del todo relajado.–

¿Cuantos años tienes? –Dijo ahora Harry con cierto tono curioso.–

18 años. –Contestó Lou sonriendo de lado.– ¿Y usted? ¿Verdad o reto?

Genial, eres todo un adulto, ya puedes votar por un presidente que valga la pena, asi como Obama...Y no tendría que ir a la carcel. –Harry se encoje de hombros y acaricia su barbilla, pensativo.– Verdad, nene.

–Louis enarca sus cejas al escuchar los últimos comentarios y niega riendo sonrojado.– ¿Le agrada ser profesor de psicología?

Veamos, ¿me agrada ser profesor de psicología? –Mencionó Harry volviendo a lanzar la pelota al techo, atrapándola de nuevo.– Si, amo la psicología, el hecho de aguantar a un grupo de estudiantes densos, estúpidos, groseros, maleducados, y normalmente unos hijos de su reverenda madre no es taaaan bueno. –Dijo alargando la "a" por unos cuantos segundos.– Pero en si, y de ahí en fuera, amo mi profesión; y claro, no todos los alumnos son así, por ejemplo, tu, pequeño, tu no eres así, y de ante mano disculpa por las groserías.

No se preocupe profesor Harry, usted tiene mucha razón con esa rebeldía de hoy en día, ya no hay valores, con la influencia del internet y específicamente del WhatsApp, de Instagram, de Face..–Se escucha una notificación del celular de Louis y este esconde el móvil debajo de un cojín.– Book.

–Harry comienza a reír y niega.– ¿Verdad o reto, pastelito?

Reto. –Dijo esta vez Lou convencido de querer ser un tanto mas atrevido, ya era hora de crecer y de ser más rudo, ¿no?.–

Haber Lou. –Harry pasó su dedo medio y el índice por su labio inferior repetidas veces, formulando algo demasiado bueno.– Ya se. –Harry se levantó y se sentó en el sofá, cruzando una de sus piernas, colocando su pie en su rodilla.– Baila para mi, Lou.

Las mejillas de Louis tomaron de pronto y sin previo aviso un carmesí encendido, orillándolo a bajar la mirada y morder su labio inferior haciéndolo pensar si, ¿esa era la rudeza que el buscaba? Mientras que por su lado, Harry reía y rogaba por dentro que si Lou aceptaba, no tuviese una erección en medio de menudo espectáculo.

Si no quieres hacerlo no lo hagas, elige v..–Habló Harry siendo interrumpido por un empujón del pequeño Louis, haciéndolo recostarse en el sofá.– ¿Pero qué?

Lo haré, Harry, ¿puedo llamarle Harry, profesor? –Dijo Louis luciendo, para la jodida y estúpida mala suerte de Harry, completa y enteramente inocente, este mismo camina hasta el estéreo de Harry y enciende el bluetooth de su celular, presionando después el botón del mismo en el estéreo esperando que se conecte. Una vez que eso sucede, Louis busca en su biblioteca "Crazy in love - Beyonce, 50SDG Versión" y da play en el título, dejando el móvil en una mesa cercana.– De acuerdo, acá voy.

(Ahora si, reproduzcan la canción y sientan la magia)

–Harry asintió, y con la misma estúpida cara de sorpresa, frotó sus palmas esperando ansioso que Lou comenzara a moverse.–

La canción comenzó a sonar y Lou, dándole la espalda a Harry, comenzó a mover sus caderas de lado a lado en un ritmo lento y sensual, llevando una de sus manos sobre su cabeza, mientras que la otra la posaba en su cintura y comenzaba a subir y bajar con sensualidad, moviendo su cuello de lado y haciendo un guiño a Harry, haciendo un "shake" con sus hombros y volteando su cuerpo, quedando de frente a Harry, ganando así la atención de este, y que el mismo mordiera su labio inferior quizá por..¿instinto?

Mientras tanto, Harry se encontraba fascinado con lo que veía, es decir, esta no era una de sus fantasías. No era parte de una mala broma de su mente que amaba jugar con el, no.

Era Louis, el mismísimo Louis Tomlinson bailando de forma sensual para y únicamente el.

Siguiendo con sus movimientos lentos de cadera, a paso lento y tintaleando, Louis se acercó a Harry, pasando en un dado momento su mano libre por su cuerpo, y después de ello, subiendo y teniendo ambas manos sobre su cabeza, volver a mover sus caderas al ritmo de la música, subiendo y bajando una, y otra vez, ahora de nueva cuenta dándole la espalda a Harry, permitiendole una vista maravillosa del prominente y exquisito bien formado culo de Louis.

En un rápido movimiento, Louis metido de sobre manera en el baile, mordió su labio inferior y comenzó a bailar a Harry, rozando de forma descarada sus cuerpos, dejando a Harry con la boca abierta.

Después, Lou se sentó en las piernas de Harry a horcajadas de este, tomó sus manos (las de Harry), e hizo que las posara en su espalda, restregando su culo en la entre pierna de Harry.

Si vemos todo esto desde el punto de vista de Harry, tenemos el resultado que ver a ese pequeño y precioso chico delgado, con esa falda que a penas cubría debajo de su trasero, y que cada vez que Lou bajaba dejaba a la vista mucho que desear, al solamente notarse un poco de encaje color rosa pálido, era la escena, o la vista mas erótica y caliente que alguien tendría la suerte de ver, y que Harry se sentía completamente afortunado de vivir en carne propia.

Cuando la canción finalizó, Louis dejó de moverse y abrazó el cuello de Harry dejando sus rostros casi juntos, haciendo que, sin ser una de las fantasías de Harry, sus respiraciones se mezclen y sus lenguas se paseen por sus labios.

Louis...yo. –Formuló Harry con la respiración agitada, y sabiendo bien, que podía apostar que Louis había sentido ya su erección en su trasero.–

Callase y béseme por lo que mas quiera, Harry. –Pidió de forma casi desesperada Lou, llevando su boca al cuello del mayor, besando este de forma húmeda.–

Estaba sucediendo.

Never Enough.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora