Cool For The Summer era la canción en turno después de un mix de melodías mixtas, algunas más movidas que otras, otras más sensuales, algunas incluso melancólicas con algunos ajustes para volverlas adecuadas al ambiente.
Las personas estaban divididas en varias secciones, una de ellas era aquellos que bailaban perfectamente al ritmo de la canción que se escuchaba, otros eran aquellos que solo hablaban entre si, pasaban un buen rato y tomaban fotos para posiblemente sus redes sociales, por último pero no menos importante, estaban aquellos que se tocaban, besaban de forma pasional y movían sus cuerpos entre si como si no hubiese mañana; Louis pertenecía a los que bailaban.
Después de haber comido sus chocolates, Louis había decidido divertirse por lo que comenzó a bailar con Zack al azar, o mas bien, bailar sólo acompañado de los torpes movimientos por parte de Zack, Louis no sabía si decirle o reírse, pero optaba mas bien por la segunda, disfrazando esas risas por risas por los momentos divertidos que estaban sucediendo.
Desde la oscuridad y en el grupo de las personas que solo hablaban, unos ojos le miraban atentamente, y es que era imposible no mirar ese perfecto cuerpo, esos sensuales movimientos y ese angelical rostro, que, para gusto de cualquier chico se vería preciosa desde arriba mientras propina una buena mamada; no sabía si era buena idea hablarle, tampoco tenía idea si el chico fuese a hacerle caso, aunque tampoco descartaba todo ya que el guiño por parte del ojiazul no decía que le desagradaba del todo la idea de ser observado por alguien.
Pero que precioso gatito. –Susurró el misterioso preso mientras se mordía los labios, llevando una de sus manos hasta donde su boca para con su dedo medio he índice acariciar su labio inferior.–
Por su parte, Louis dejó de moverse para tomar un poco de aire, mirando a su alrededor en busca de las bebidas, estremeciéndose con fuerza al encontrar nuevamente la mirada del misterioso chico viéndole, no podía negar que si le causaba cierta intriga, pero tampoco podía negar que le gustaba eso a pesar de no saber lo que pasaba, a Lou siempre le había gustado que le viesen.
Iré por algo de beber Zack, ¿quieres algo? –Susurró Lou para Zack, mirando de reojo al mismo lugar del chico, encontrándose siempre con su mirada.–
No, solamente no tardes cariño, tengo algo divertido en mente que quiero. –Exclamó con tono pícaro, llevando una de sus manos hasta la cintura de Louis.–
–Louis al instante se separó y caminó hasta donde se encontraban las bebidas.–
Aún no creía que Zack no viese las cosas, que no viese que Louis lo detestaba y que sinceramente nadie le querría.
¿Por qué tan solo, amor? –Susurró una voz gruesa bastante conocida para Louis en su oído, haciéndole girar y encontrarse con el preso.–
Dios, casi muero. –Murmuró Louis recuperando su blanquecino color, sonriendo a penas.– No estoy solo, estoy con alguien.
¿Te he asustado? Lo lamento. –Exclamó el chico negando, haciendo que Louis nuevamente se girara y el pudiera abrazar a éste por la espalda.– Vamos cariño, ¿esa cosa con la que bailabas es con quien viniste?
En efecto. –Susurró Louis sonrojándose por los brazos en su cintura, mordiéndose sus labios.– Es un amigo.
¿Qué te parece si dejamos a tu amigo bailando solo y tu y yo bailamos en una habitación? –Mencionó con un tono de voz aún mas ronco, presionando a su cuerpo a Louis, provocando una deliciosa fricción entre su miembro y el prominente trasero de Louis.– ¿Qué dices?
–Louis no pudo evitar soltar un vergonzoso jadeo por la fricción, sintiéndose completamente vulnerable en esos instantes.– Eso no sería correcto, además, seguro y se molestaría mucho y...–Los besos húmedos que el chico misterioso le estaba dando en el cuello lo interrumpieron, dejando que un par mas de jadeos hasta un gemido saliera de su boca.–
Lucirías tan bonito entre mis sábanas, gatito. –Exclamó con esto tomando entre sus dientes el lóbulo del menor, haciéndolo girarse por inercia.– Imagina lo que sería tocarte con atención y delicadeza, llevaría mis manos y labios hasta los lugares mas escondidos de tu cuerpo, besaría esos preciosos labios sandía como un maldito loco, te follaría como animal. –Susurró mirando de forma pícara y coqueta al menor, llevando una de sus manos hasta la entrepierna del ojiazul, frotando en esta sin dejar de mirarle.– No me imagino esa boca tan hermosa entreabierta deseosa por mi miembro, rogando y gimiendo por mas.
¿Y qu...que te hace pensar q...que será t...tan fácil tenerme? –Preguntó Louis con la respiración entrecortada y la voz temblorosa, bajando su mirada hasta la mano del misterioso chico.– ¿No puedes s...ser mas descarado?
Oh amor, puedo chupártela aquí mismo si quiero. –El chico soltó una risa y siguió con las caricias, bajando segundos después el cierre del pantalón de Lou para adentrar su mano, haciendo una muchísimo mejor fricción por mucho de la que había.– Y, ¿como no? Tratándose de ti, todo se vuelve tan caliente.
Louis no podía mas, quería a ese chico, quería que ese chico lo follase y lo quería en ese mismo momento.
–Por ello, subió sus manos hasta las mejillas de su acompañante, atrayéndolo hasta el para comenzar a besarlo de la forma mas necesitada y pasional, dejándole en claro que estaba dispuesto a bastantes cosas y que no le desagradaba ni un poco lo que le daba.–
–Enseguida de eso, los brazos del chico misterioso atrajeron aún más a Louis a su cuerpo ya que sus manos se posaron entrelazadas en la espalda baja del pequeño como una seguridad para que éste no se separara.–
Lo único que se escuchaba en ese lugar además de la música, eran los chasquidos de los labios de aquellos fogosos chicos bastante necesitados uno del otro.
–En dado momento, Lou decidió pagarle con la misma moneda, bajando de forma juguetona una de sus manos por el abdomen bastante bien trabajado del chico, arrancándole un par de suspiros.–
Cuando por falta de aire ambos tuvieron que separarse, tanto de uno como de otro se podían admirar unas mejillas teñidas de carmesí, una ligera respiración acelerada y una erección a la vista.
Asi qué... –Susurró el chico misterioso mientras miraba a Louis y lamía sus labios.–
Salgamos de aquí para que puedas follarme, tomarme y besarme, Harry. –Dicho esto, Louis tomó el antifaz y lo sacó del rostro de su ojiesmeralda, formulando una amplia sonrisa al mirarle nuevamente, tomándole de la mano, y por último, caminando fuera del lugar.–
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Never Enough.
أدب الهواةEsta historia es del tipo "Daddy" y "Sugar Baby", pero, con una muy muy grande diferencia entre ello. Descubre la vida de Louis Tomlinson, el tierno empleado de la dulcería "McClain" y del profesor de psicología de la Universad Hamsword desde un pu...