Universo Infinito

Capítulo XIII: ZEUS

Gemma

—Entiendo, yo me encargo…—colgué.

La mañana de este 1 de enero del 2018 acaba de comenzar y ya tengo una misión, me levanté y abrí mi armario, saqué un jean azul, unos botines marrones, una blusa blanca y una casaca verde.

Después del baño me cepille los dientes, me arreglé el cabello, me vestí y salí rumbo a mi destino sin antes decir.

—Ya vuelvo, no me esperen.

Tenía que decir eso para avisar a Felicia que había salido, ella era como mi protectora, enviada por la "agencia", designada especialmente por mi padre, aunque el sabe muy bien que me puedo defender sola.

Caminé un buen rato hasta que llegué a la casa del susodicho, una pequeña explosión me puso en alerta, me acerqué lentamente a la puerta, no escuché ningún otro ruido así que toqué el timbre, pasaron unos minutos hasta que un despeinado joven me abrió y cerró la puerta.

—Maldita sea Omar abre la puerta.

—No tengo tiempo para esto Parker, retirate de mi propiedad.

—No estoy para bromas.—abrí la puerta de un golpe.

—Que demonios, estas invadiendo propiedad privada.—me miró sorprendido.

—Tonterías, veamos si lo que me dijeron es cierto…—susurre y en un rápido movimiento le lancé una ráfaga de energía.

Vi como el joven no hacia nada, sonreí ya que le iba a doler, pero no es mi culpa "el profesor" me dijo que el tenía mis dones.

—Jajaja.—rio algo loco.

—¿Eh?—lo miré con asombro, el extendió su mano izquierda y detuvo mi "ataque".

—Enserio esto si debe de ser un sueño.—apretó su puño y desvaneció la energía.

—Parece que no se equivoco…Tenemos mucho de que hablar.

—Primero esto es un sueño así que esfumate.—chasqueo los dedos.—Demonios no funciona.

—Eres un grandísimo estúpido.—lo mire furiosa.

—¡Ey vocabulario!—exclamó serio.

—Bien para ahorrarme palabras mejor te doy esto de una vez.—busqué en mi bolsillo la pequeña esfera que me había enviado "el profesor".—Piensa rápido.—se lo lancé.

—¿Que es esto?¿Que está pasando?.—me miró sorprendido.

—Eso es una esfera mensajera, se abre con tu huella, si quieres saber la respuesta a todas tus dudas, abrela.—lo miré un poco seria.—Bien mi trabajo aquí terminó.—puse mis manos en el bolsillo y caminé de regreso a casa.

Omar

—Te dije que sería fácil sacar el balón.

—Esta vez no hubo nada extraño.—suspiró.

—La última vez fue de locos, ahora sigamos jugando.

Volvimos a mi patio, era la tarde del 17 de diciembre, Sonny y yo estamos practicando pases, el balón se nos había ido a la casa trasera por un error mío, cuando lo recuperamos volvimos y seguimos con nuestra rutina.

—Que opinas del Mundial pasado.

—Grandes partidos, mucha acción, sin palabras.—reí y le pasé el balón.

—Casi campeones, amigo mío.—me miro fijamente.

—Si pero la copa no quiso quedarse en Sudamérica, jajaja Argentina hizo lo mejor, sabes si yo hubiese escrito un libro hubiese hecho que campeone Holanda.