24 de Abril
12:00. Estoy muy demasiado nerviosa. Con los pelos de punta. Se supone que quizás esta semana, llega Jeremy. Me muero de pánico y de curiosidad.
¿Cómo estará? Quizás más gordo… más viejo de seguro. Con barba… ¡Oh! ¡Horror de horrores! Se me acaba de ocurrir que quizás… se casó. ¡Uf! Pero ¿Por qué sigo pensando en este bastardo como si fuera el amor de mi vida? Estúpida Gabriela, estúpida.
Me suelo comportar como una niña de jardín infantil. Sé que debería tener más confianza en mi misma… que no debería dudar de mis capacidades… tengo mucha gente a mi alrededor que me quiere. Debería tenerme más fe…
El viernes fui a la feria del libro usado que esta en Providencia. Estuve viendo algunos libros que me parecieron bastante interesantes. Carla me había recomendado que comprase uno de autoayuda, uno donde se hablara de la autoestima y de cosas similares. Me recomendó al escritor Paulo Coelho. Mientras paseaba mi mirada por las mesas donde tenían dispuestos los títulos, a precios realmente irrisorios, di con uno que quizás me ayude, “Aumente su autoestima”, del doctor Lair Ribeiro. Lo compré, aunque no muy convencida.
Supongo que si es uno de los géneros que más se vende en el mundo, porque no podría servirme a mí.
15:00. El libro me duro dos páginas. La verdad es que no sirvo para este tipo de literatura. Es siempre tan extrañamente obvia en los consejos que dan. Me parece que en mi caso, debería tener una visita con un psicólogo.
Ok. Retomaré la lectura nuevamente…
15:13. No definitivamente mi cabeza anda en otro lugar. Mis preocupaciones están girando en torno a: Jeremy.
Este ha sido un día perdido…
15:18. He pensado en llamar a una de las chicas, para charlar un poco de cosas triviales. Llamaré a Berenice…
15:32. Ok. Berenice no contesta. Cristina fue de paseo con los niños y su esposo. Carla iba de salida a dejar a su hijo a la casa del papá del niño.
Me aburro como una ostra…
15:34. Creo que voy a echarle un ojo a las revistas de decoración. Tengo que ver de qué color pintaré las paredes interiores del departamento. Intentaré pensar en positivo, solo para calmar mis nervios.
15:38. Me preguntaba… mmm… qué sentirá tener tanto dinero. Estaba hojeando la revista de Vivienda y decoración de años anteriores y he dado con unas fotografías de le hicieron a la casa de descanso de la familia Mollins. Debe ser fantástico tener una fortuna como la que amasa el magnate de mi nuevo jefe. Tener acceso a lo que se venga en gana, cuando se desee. Es quién toma la sartén por el mango siempre.
A parte, se nota que tiene un éxito arrollador con las mujeres. Ya me imagino cómo habrá reaccionado la Cote el día de la reunión. Debe estar pensando en aumentarse los implantes. Atrapar a un multimillonario debe ser realmente toda una hazaña. Creo que a varias de las de ventas se les ha despertado el hambre con el nuevo dueño.
En los últimos rumores, que los escuché el día viernes, nos enteramos que se instalaría en las oficinas del Meneghello. Fue algo inesperado porque se decía que continuaría supervisando las nuevas acciones desde su oficina, en Las Condes. Pero al parecer quiere conocer bien el negocio y necesitará más tiempo…
Creo que me dormiré una siesta…
21:13. He decidido pintar las murallas, de color violeta. Adoro ese color. Quizás un murallón violeta claro y en contraste el otro dos tonalidades más oscura. Ese color me gusta y me relaja…
22:03. Uuuff!!... la curiosidad me mató. Ingresé a mi cuenta en Facebook y me dio por mandar invitaciones para hacer amigos con diferentes escritores, periodistas, editoriales, etc. Pero de pronto se me ha ocurrido hace algo muy, muy malo para mi salud mental. Busqué a Jeremy… y… LO ENCONTRÉ… pero no me atreví siquiera a ver las fotos que tenía habilitadas… bueno…miento… alcancé a ver una sola… una donde salía una perrita… ¡nefasto!... no puedo ser tan aterradoramente psicópata. No puedo ser tan kamikaze con mi corazón.
La verdad es que no pude seguir apretando la flechita para ver más fotografías de su gran vida en Perú… no… Argentina, que tonta… se me cruzaron los cables de pronto.
Me perturba toda esta situación. No puedo dejar de imaginar nuestro encuentro cuando llegue…
¡Oh!... papá quiere que conversemos… tiene mala cara. Cuando algo lo preocupa se le pone una profunda arruga horizontal en la frente…
23:08. Muero de sueño. Acabo de terminar de charlar con papá. Me ha contado que está un poco complicado con el asunto de la librería.
Resulta que muchos de los locatarios están desistiendo de oponer resistencia a la empresa inmobiliaria que los quiere sacar. Ayer tuvieron una reunión con el comité y de los 28 que se resistían, cinco han tenido han comenzado a negociar.
Papá me ha contado que lo que la Inmobiliaria desea, es expropiarlos para derribar el edificio y construir un Mall. Para eso se han estado organizando, y ya establecieron contacto con una firma de abogados, para que los represente. Me parece un espanto lo que esta sucediendo. Esa zona está llena de construcciones de la época de la colonia, son un tremendo patrimonio cultural. Yo no sé para qué desean seguir levantando feas y frías construcciones.
Papá está bajo una dura presión. Por un lado, no desea dejar el negocio que tiene toda la una tradición familiar, pero por otro las deudas le están comiendo los ahorros que le quedan.
Yo le dije que, si lo deseaba, podíamos usar el dinero que tengo para el departamento para solventar los gastos de los abogados. Me ha dicho que no es necesario. Pero no lo sé… este tipo de cosas me hacen dudar de mis caprichos. Me pongo a analizar, que ese dinero puede servir para una buena causa y… ¡haij!… estoy cansada… me voy a dormir… quizás durante el sueño logre aclarar mis decisiones finalmente.
Que día más confuso…
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Próxima entrega: ¡miércoles!
Nota: Amigas, a petición de lectores que siguen mi novela, les cuento que a partir de la primera semana de Septiembre las entregas serán tres veces por semana: lunes, miércoles y viernes. Espero les guste esta noticia :-) Cariños y no estamos leyendo...
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Yiyi, La peor de todas
RomanceComedia Romántica. Yiyi, es una mujer normal. Ni tal delgada, que bebe, no fuma, le gusta leer, viste de negro, escucha Apocalyptica, usa lentes y jamás se preocupa por su imagen. Trabaja en un lugar que detesta, pero su grupo de "secuaces" amistad...