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Subí a la camioneta seguida de Luke. Me senté en los asientos de atrás, rápidamente Carl se cambió de lugar al asiento de mi lado, haciendo que Luke se tuviera que sentar a un lado de Noah.

-¿Y bien, a dónde vamos ahora?-Pregunté a Glenn.

-Iremos por el bosque, caminaremos un poco hasta que encontremos algo.-Respondió el asiático y asentí.

Él manejo por unos 30 minutos haya que paró la camioneta.

-Bien, caminaremos por aquí.-Avisó y todos bajamos del auto.

Glenn comenzó a marcar un circulo con pintura en aerosol en uno de los arboles mientras caminábamos.

-¿Que haces?-Preguntó Tara mirando a Glenn.

-Trato de poner marcas para no perdernos, por si tenemos que volver rápidamente.-Sacudió sus hombros.

-Sigamos-Habló Harry siguiendo caminando junto a Enid.

Llegamos a un gran supermercado después de andar por el bosque como una hora o dos, comenzamos a caminar sigilosamente hacia él.
-Bien, tomen uno de los cestos cada quien y recolecten todo lo que pueda servir, si es posible vayan en parejas.-habló Glenn una vez dentro del supermercado.

Caminé junto a Carl por uno de los pasillos y escuché unos gruñidos, avisándome que teníamos compañía. Saqué el cuchillo de mi cintura y junto a Carl atravesamos el cráneo de aquellos caminantes, comenzamos a juntar todo lo que encontrábamos, vendas, medicamentos, comida en lata, agua, etc. Vi como Carl tomaba una caja de preservativos y la guardaba en el bolsillo trasero de su pantalón. Lo miré con una ceja alzada.

-N-no son para mi-Me dijo soltando una risita nerviosa.-Son para Glenn.

-Como sea, andando.-Reí para después caminar el resto del pasillo. De repente un caminante se acercó a mi tirandome al piso, ni siquiera lo había notado y estoy segura que Carl tampoco. Alejé al caminante lo más que pude de mi pero éste se resistía. Tiraba mordidas hacia mí, no podía tomar mi cuchillo ya que éste se encontraba en mi cintura y tenía mis manos demasiado ocupadas como para poder tomarlo.

-Mierda, Ellen. Resiste- Escuché a Carl decir, mientras disparaba a unos cuantos caminantes que intentaban acercarse a él con intensiones de morderlo.
Mis brazos comenzaron a dolerme por la fuerza que estos estaban haciendo. Realmente no resistiría más si Carl no se apuraba. Otro caminante cayó encima mio haciendo que mis brazos se doblaran un poco mas, ocasionando que uno de los caminantes se acercara más a mi cuello. Mis brazos temblaban y cerré mis ojos cuando sentí que estos no resistirían más, dándome por vencida. Escuché dos disparos y aquellos caminantes dejaron de intentar morderme, por lo que suspire aliviada. Carl les había disparado. Él quitó a los caminantes de encima mio y me ayudo a ponerme de pié para luego abrazarme.

-¡Chicos! ¡Tenemos que irnos!-Escuchamos la voz de Glenn y corrimos fuera del supermercado.

Cuando todos estuvimos juntos nuevamente, corrimos hacia el bosque y derrepente Glenn se detuvo.

-¿Qué sucede?-Pregunta Noah.

-Shh-Susurró mirando a todos lados. Todos hicimos lo mismo. Comenzamos a escuchar pasos arrastrados y gruñidos. Mierda, mierda, mierda, una horda era lo que menos quería ahora.

-Es una horda-Exclamó Tara asustada.

-No tenemos las balas suficientes para luchar. Solo, escondanse y esperen a que la horda pase.-Dijo Glenn y me giré la horda estaba cerca, tenía que encontrar un escondite o moriría devorada por caminantes. Estábamos en medio del bosque, no habían muchos escondites. Corrí hacia un arbusto, y me escondí tras él, al igual que Tara. La horda comenzó a pasar, eran mas de 60 caminantes, todos iban hacia el supermercado por lo cual supuse que habían escuchado los disparos. Los minutos pasaban y la horda no acababa, si que eran lentos. Escuché como alguien pisaba una rama seca, haciendo que algunos caminantes se detuvieran, me tense rápidamente pero para nuestra suerte ellos no le tomaron mucha importancia y siguieron su camino.
Mire por todos lados tratando de encontrar a Carl. Y lo encontré. Él estaba escondido en un árbol hueco junto a Enid, y ambos estaban peligrosamente cerca. Sus labios estaban rozándose, ellos estaban por besarse. Sentí mi corazón pararse por un momento, la furia y la tristeza se apoderaron de mi. ¿Dónde había quedado aquella promesa que él me había hecho? Las lágrimas comenzaron a inundar mis ojos recordando que no era la primera vez que Carl hacía algo como esto. ¿Qué acaso no era lo suficiente para él? ¿Entonces por que seguía mintiéndome de esta manera y diciéndome cosas lindas si yo para él no significaba nada; si él no me amaba lo suficiente?
Oh Grimes, esta vez te va a costar.
Tara me miró al verme tan enfadada y soltando unas cuantas lágrimas, me susurró un "¿Qué pasa?". Negué levemente e hice lo mas estúpido que alguien puede hacer habiendo una horda a mitad del bosque; salir del escondite y correr hacia otro lado captando la atención de caminantes los cuales no dudaron en seguirme, pero estaba tan enfadada que ni siquiera pude pensar con claridad.
Pude notar como alguien gritaba mi nombre pero simplemente seguí corriendo. Mi vista se comenzaba a tornar borrosa debido a las lágrimas que soltaba, me detuve por un momento luego de correr varios minutos. Escuché algunos caminantes acercarse y me escondí nuevamente, a medida que caminantes pasaban me di el tiempo de tomar un poco de aire y quitar mis lágrimas. Estaba destrozada. Había confiado en él y él volvió a fallarme. Mis pensamientos se vieron interrumpidos cuando un caminante cayó encima mío sin darme cuenta, saqué mi cuchillo y atravesé su cráneo. Seguí corriendo hasta que choque con algo o mas bien con alguien, pude oler un perfume masculino por lo que pensé que era Carl, él me abrazó fuertemente y yo trataba de soltarme de su agarre mientras sollozaba.

-Shh tranquila, Ellen-Escuché la voz de Luke decirme y me calmé.
Lo abracé fuertemente mientras lloraba en su pecho haciendo que mojara su camisa con mis lágrimas. Escuché pasos acercarse y entre ellos la voz de Carl llamarme.
Me separé de Luke y Carl se acercó a mi.
-Ellen, por dios, que susto me has dado-Habló abrazándome. Lo aparte de mi, empujándolo por los hombros fuertemente y llevando la palma de mi mano a su mejilla con fuerza, haciendo que su rostro girara hacia la derecha. Él me miró confundido y con dolor en su mirada.

-Nunca más vuelvas a tocarme.-Le dije llena de furia y caminé lejos de él haciendo que todos me miraran sorprendidos por mi acción.
No seré un juguete para ti nunca mas, Grimes.

Strong | Carl GrimesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora