Soy Nina

Estilista Luna 2

Al otro día en el Blake cuando llegué algunos chicos se acercaron a mí, -¿Sos la amiga de Luna? ¿Crees que podamos hablar con ella?

Esto no estaba en mis planes, tener tantas personas juntas en un mismo espacio, decidí calmarme y contestar sus inquietudes, yo asentí y les dije que cuando ella llegue Luna se pueden acercar, efectivamente eso hicieron, Luna ahora tenía seguidores y no era para menos, su presentación en el roller fue estupenda.

En la clase de historia miraba el reloj cada dos minutos, -Nina, por más que mires el reloj las horas no pasarán rápido- dijo Luna en tono burlón.

-Sí lo se- dije resignada.

-¿Tienes algún compromiso? Una cita tal vez

-No, digo... es solo para un trabajo- dije avergonzada.

-¡Vas a salir con Gastón!- me susurró emocionada.

-Shh, no lo digas, es solo con motivos de trabajo- dije mientras hacía círculos en mi libreta.

-Debes de ponerte bonita, voy a acompañarte a tu casa para ayudarte con lo que te vas a poner.

-No, no y no- dije, en ese momento la profesora nos llamó la atención por hablar en la clase, al final de la hora Luna me agarró, no podía escapar, mi mamá había llegado.

-Luna, ¿cierto?- dijo mi mamá al verla entrar, -¿Cómo estás?

-Estoy bien.

-Nina me alegra que lleves a tus amigos a casa, deberías de volver a invitar a ese chico Gastón.

-Mamá se nos hace tarde para llegar a casa- dije y ella emprendió la marcha, sentí la mirada de Luna diciéndome "Con que fue a tu casa"

Cuando llegamos subimos a mi habitación, era la primera vez que estaba allá.

-No puedo creer que Gastón haya venido primero que yo que soy tu mejor amiga- dijo ella sentándose en la cama.

-Esa visita fue estrictamente laboral, nada que ver con tus fantasías de romance- dije aunque realmente me hubiese gustado más romántico pero eso sería mucho pedir.

Luna empezó a buscar en mi closet, hasta que se topó con un vestido, -Es perfecto, es hasta las rodillas y es muy casual- dijo.

-No me lo voy a poner, Mora me regaló ese vestido para mi cumpleaños pero no es mi estilo- dije.

-Esta es tu oportunidad de cambiar de estilo, está hermoso- dijo ella y me lo pasó.

Entré al baño y me duché rápido, luego me puse el vestido, era corto y muy bonito pero sentía que no encaja en nada con mi personalidad.

-Nina, ese vestido te queda como anillo al dedo, te ves muy linda, ponte estos zapatos y listo, apenas tienes accesorios aquí- Luna no me dejaba respirar, literalmente.

En cuestión de minutos ya estaba lista, para mi mala suerte mi mamá entró en ese momento.

-Nina, estás hermosa, yo nunca te había visto así- dijo casi llorando, mi mamá aveces se pone medio dramática.

-Lo ves Nina- dijo Luna.

-Me siento un payaso... mejor no voy- dije y me senté en la cama.

-¿Tienes una cita?- preguntó mi mamá.

-No es una cita, es solo un trabajo y ya- dije molesta y avergonzada.

-Luna muchas gracias por ponerla así de bella- dijo mi mamá tomando a Luna de las manos.

-No es para tanto, Nina de por sí es linda solo debe de cambiar un poco su estilo y dejar atrás la timidez- dijo ella dándome un empujoncito.

-Esto merece una foto- dijo mi mamá buscando la cámara, no entiendo porque hace eso.

Al final Luna se tuvo que ir, debía de juntarse con Matteo para ensayar una escena de Romeo y Julieta, yo me fui para la plaza, ya era casi la hora acordada del encuentro.