En El Corazón De Gian...Hasta El Final. Libro II

Capitulo 21 Miedos y dolor

Me dolía demasiado el cuerpo y los mismos dolores no me dejaban dormir, trate de estirar mi brazo para poder apagar la luz pero lo único que logre fue lastimarme aun mas, Ernesto me estaba mirando desde aquel lugar de la habitación, pude observar que sus ojos se estaban llenando de lágrimas, el y yo siempre hemos sido demasiado unidos, aun recuerdo cuando mis padres me dieron la noticia de que tendría un hermano, a la mañana siguiente cuando llegue a la escuela les conté todos de que por fin seria hermano mayor, aquel precioso recuerdo hizo que mis ojos se llenaran de lágrimas al igual que los de Ernesto, lo mire fijamente para después regalarle una sonrisa que el me correspondió de inmediato .

-Ernesto: ¿necesitas que te ayude?

-Gian: si, podrías apagar la luz por favor, ¿quieres dormir conmigo Ernesto?

-Ernesto: listo luz apagada, pero no te quiero lastimar más de lo que ya estas hermano

-Gian: tienes razón, yo te cuido desde aquí vamos a dormir porque el día ha sido demasiado pesado para todos

Ernesto se puso el pijama para poder ir a la cama y de repente todo se hizo obscuridad, yo nunca le he temido a la obscuridad pero debo de aceptar que en aquel momento tenia ganas de gritar y salir corriendo de la habitación, hice todo lo posible para encender la lámpara que tenia en mi cómoda, hasta que lo logre, mi frente estaba empapada en sudor y mi cuerpo temblaba de miedo.

-Ernesto: ¿estas bien Gian?

-Gian: te molesta si dejo la luz prendida esta noche

-Ernesto: no para nada, ¿te sientes bien hermano?

-Gian: puedes ir por papá por favor Ernesto

Ernesto se levanto de la cama y salió corriendo de la habitación, cuando me quede solo un miedo aun mas fuerte me invadió trate de controlarme y respirar profundo pero por mas que lo intentaba el miedo seguía allí y crecía cada segundo más y más. Cuando escuche la voz de mi padre el miedo se comenzó a calmar un poco, cuando al fin entro tenia lágrimas y estaba sudando demasiado yo extendí mis brazos como si tuviera tres años, mi padre entendió aquella señal de inmediato, cerro la puerta para que Ernesto no pudiera pasar, después me abrazo con mucha fuerza, acaricio mi cabello con sus manos para desenredarlo un poco, me miro fijamente a los ojos, tomo su pañuelo que traía en su abrigo y seco mi frente.

-Ercole: entiendo que estés asustado nada de esto ha sido fácil para ninguno de nosotros mucho menos para ti, pero siempre nos tendrás a tu lado Gian nunca te dejaremos solo

-Gian: papá es que en verdad tengo mucho miedo, tengo miedo a dormir y no despertar no quiero dormir papá

-Ercole: pero necesitas descansar en algún momento y tu lo sabes, sabes que no puedes estar despierto toda la madrugada, tal vez necesite preguntarle algo a la doctora Lisney, debes de tener su numero de celular, ¿verdad?

-Gian: claro que tengo su numero de celular, esta en mi teléfono, yo lo busco

Mi papá me paso mi celular y con la mano que no estaba lastimada busque en el directorio su numero de Lisney, hasta que por fin lo encontré, mi papá presiono el botón de llamar y abrió la puerta al mismo tiempo, Ernesto entro a la habitación y se sentó en la orilla de la cama, mi padre nos dejo en la habitación y el salió a hablar al jardín.

-Lisney: hola corazón de melón, como estas bombón

-Ercole: buenas noches doctora Lisney soy el padre de Gianluca, tengo algunas dudas que aclarar con usted

-Lisney: señor Ercole buenas noches una disculpa enorme creí que era Gianluca, diga me lo escucho

-Ercole: lo que pasa es que Gian no quiere dormir y hace unos momentos me comento que tiene mucho miedo, no se que hacer doctora, tal vez le haría bien a Gian verla en persona