Amor Equivocado.

Capítulo 63 "Última Broma"

Zanahoria se cubrió por completo, es decir, jeans oscuros y un suéter oscuros de capucha. Cualquiera puede decir que es un delincuente desadaptado. Llegamos a la casa de Lou, saludamos al señor Salvatore, el cual le lanzó una mirada asesina a Lucky; subimos al último piso y nos encontramos a todos, obviamente que April no se encontraba. La chica estaba en la fiesta de despedida de porrista, fui invitada, pero seamos honestos... Terminaría suicidándome. Bueno exagero, moriría de hambre.

-Ehm... Luck -Louise se percató de que éste seguía con la capucha.

-¿Qué? -me miró, yo sonreí y me senté junto a Lou.

-Bueno... -Agatha seguía mirando a zanahoria con el ceño fruncido -La despedida de April, ella se va en cuatro días. La fiesta se hará en mi casa -sonrió.

-¿Por que no hacemos una fiesta de despedida para todos? -propuse.

-¡Me parece genial! -chilló Louise.

-Bueno... Los chicos se encargan del refrigerio -los señaló seria, éstos se quejan -¿O quieren encargarse de la decoración, las mesas, las sillas, las invitaciones...? -siguió hablando.

-¡NOOO! -gritaron todos.

-¡Perfecto! Ahora muevan ese trasero ¿si? -sonrió Lou. Todos se fueron mientras se iban, yo iba entre ellos, no quería ser interrogada.

-¿A dónde vas tu jovencita? -dijo Agatha con su voz maternal.

"Por una parte odio que sea madre, siempre usa esa voz tan fastidiosa"

-Deja de voltearme los ojos -me señaló -¿Cuando pensabas decirnos lo de Grecia? Pensé que éramos amigas.

-No le veo la importancia de comunicarles eso -crucé los brazos -Es decir, no quería molestarlas con ese tema fastidioso. Agatha tienes que encargarte de Milo y tienes que volar hacia Inglaterra para tu academia de Artes. Louise viajaras hacia New York y Harvad no es cualquier Universidad -suspiré cansada.

-Py... No importa todo eso, sólo que un mensaje de texto basta para que nosotras estemos ahí -sonrió Lou.

-Entiendo que a veces te agobiamos con nuestros asuntos... Pero siempre estaremos para ti -me abrazó -También que April aún es nueva en algunas cosas... Bueno en todo, pero ella también es de nuestra pequeña familia.

-No quiero estar en esta trastornada familia -la miré asustada -¿Quien llama a su hijo como el pez azul que salía en Cartoon? -mi mirada pasó de asustada a divertida.

-¡No es mi culpa que el abuelo Nicholas se haya llamado así! -estallamos a carcajadas.

-Bueno prefiero que se llame así que Sebastian -nos miró asustada Lou.

-¡Imagínate! Recordado todos los días de tu vida a tu querido ex novio -dije en tono de un poeta.

-Pudrete perra -reímos a carcajadas.

Sebastian fue un chico el cual salía con Lou, era muy guapo; ojos grises, alto, pálido, de contextura fuerte y una sonrisa increíblemente hermosa. Hay que admitirlo, fue un gran chico y un buen amigo, siempre me ayudaba con el instituto; pero sus padres lo obligaron irse a Canadá. Lou quedó devastada y fue allí donde comenzó la historia de Lucky y ella.

-Puta madre -gritó Agatha tomando su estómago mientras reía.

-Las extrañaré -me senté entre las dos.

-Estaremos en contacto a toda hora... Además sé que extrañaras al pequeño Milo.

"Ese pequeño terremoto que tanto amaba".

-¡Glu...! -balbuceaba el pequeño y sonreímos.

-Es mejor que me diga eso que "Per" -reímos.

***

Llegué a la casa de mamá-la cual estaba bien acompañada-, saludé a Scott, el nuevo pretendiente de mamá. Un hombre de cuarenta y cinco años, simpático, excelentes dotes culinarias y es detective. Así que siempre hay un pequeño conflicto entre la sheriff (mamá) y el detective (Scott). Es gracioso verlos peleando por quien hacía mejor su trabajo.

Papá también está en casa, es muy extraño, pero qué se le hace. Estábamos en el patio trasero, papá y Scott hacían la parrilla, mamá y yo colocábamos la mesa, y Lucky se encargaba en ser un pinche vago durmiendo debajo de un árbol. Hora de un plan malvado

-Ma... Aún tienes a cariñoso? -la miré curiosa, cariñoso es mi mascota, es una serpiente. Mamá la escondió porque el bebé de mi hermano se reusó a salir si mi mascota vivía adentro de esa casa.

-Está en el zota... -me miró con el ceño fruncido -¿Para que quieres saber de cariñoso?.

-¡Es mi mascota! -grité riendo.

-No la vayas a sacar.

***

¿Qué pasó? Bueno llamé a las chicas, Lou amarró a Lucky al árbol, Agatha de encargaba de filmar todo y yo... De mostrarle a cariñoso a mi queridísimo hermano. Ahora está gritando como una nena mientras que nosotras estamos sentada a su frente tomando una soda.

-¡Haré todo lo que pidan! -se retorcía como una oruga.

-¿Pyper? -escuché la voz de mi padre. Mierda, plan número dos. Correr.

-¡Corran! -gritó Agatha y no lo pensamos cuando todas saltamos de la silla para correr.

-Uhm... Hamburguesas -me detuve para ver tal tesoro. Lo se, sé que fue muy estúpido de mi parte hacer eso; pero siempre huyo. Tomé dos hamburguesas y corrí hasta mi auto.

-¡Muevete! -Agatha retrocedió y salté a los asientos de atrás.

-¡Te atraparemos! -gritaba mis padres.

-¿Hamburguesa? -les entregué sus comidas sonriendo.

-¿Cual será la próxima broma? -preguntó Lou.

-Deberíamos darle una grandiosa despedida al director -reí.

Querido director, no sabe lo que le espera. Y nuevamente, el trio está junto para su última broma.