HEKATE [Bucky Barnes]

IV

Steve Rogers sabía que podía confiar al completo en Lana Corton. La había conocido años atrás justo cuando lo habían sacado del hielo. Entonces, Lana no era agente de S.H.I.E.L.D, sino mercenaria. Trabajaba para la empresa en alguna que otra misión, pero también trabajaba para otros.

Al principio, eso era lo que le había apartado de la joven durante unos meses, hasta que se enteró de qué tipo de mercenarismo era.

Buscaba a personas desaparecidas y las devolvía a su familia. Algo que le parecía muy fácil una vez sabía dónde estaban metidas, dado a sus habilidades de camuflaje y lucha.

Ahora, Steve seguía a Lana por un pasillo estrecho, llenos de luces de color blanco, con Nat y Sam detrás. Hill iba delante, caminando rápidamente.

- Herida de bala, ha perdido medio litro. – Hill informó hacia el doctor Fine, que se acercaba corriendo hacia ellos, levantando el brazo.

- Incluso uno. – Sam informó, haciendo que Lana se girase con una ceja levantada hacia Nat.

- Yo me ocuparé. – Lana se mordió la lengua al intentar hacer un comentario irónico. Por supuesto que se iba a ocupar él, solo tenían un médico, y claramente Lana no sabía tratar heridas de bala. De peleas sí, incluso sabía algo de coser. Pero tratar heridas de bala sin whisky y un trapo sucio dudaba que fuese a ayudar.

- Pero antes que lo vea. – Hill dijo misteriosamente, caminando hacia la sala principal, donde guardaban la mercancía. Si por mercancía se referían al director Furia.

- Oh, vais a flipar.

Y lo hicieron.

Lana se quedó detrás del grupo con una sonrisa de lado mientras Nat y Steve intentaban que sus ojos se adaptasen a la oscuridad de la sala y la sorpresa que se llevaron al ver al director Furia vivito y coleando.

- Mira quién aparece. – Furia comentó, con voz un poco menos débil que como Lana la recordaba.

- Señorita Romanoff, por favor. – El doctor Fine hizo que Nat se sentase en un taburete y él empezó a sacar cosas de la bolsa de cuero, dejándolo al lado de Natasha.

- ¿Cómo?

- Columna vertebral lacerada, esternón fracturado, la clavícula destrozada, hígado perforado y dolor de cabeza. – Furia nombró, haciendo que Lana soltase una risita por lo bajo.

- No olvidemos el neumotórax. – El doctor Fine añadió, poniendo presión en la herida de Nat, mientras esta evitaba que se le notase el dolor en la cara.

- Ni el esguince de codo. – Lana añadió justo antes de soltar una risita, notando la mirada del director de S.H.I.E.L.D encima de ella.

- ¿Quiere hundirme más, Corton?

- Pensaba que estaba a dos metros bajo tierra, más abajo que eso. – Furia soltó una risa débil, mirando hacia Steve, que miraba a Lana serio.

- A parte de todo eso, estoy bien.

- Su corazón se paró mientras lo operaban. – Nat comentó, sentada en el taburete del doctor Fine.

- Tetrodotoxina B, el pulso cae a un latido por minuto, Banner la desarrolló para el estrés. A él no le funcionó, pero a nosotros nos ha ido de perlas. – Furia explicó, mirando hacia el Capitán.

- ¿Por qué tanto secretismo y no contárnoslo? – Steve estaba confuso, bueno, ahora que la gente volviese de entre los muertos era algo normal para él.