XXXXVIII

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Creo que es necesario recapitular de nuevo en esta historia. Pero no vamos a recapitular hacia delante, porque la última vez que supimos de Lana, estaba viendo un combate de lo más surrealista.

Tenemos que cambiar un poco la localización.

Concretamente, a un poblado alejado de toda civilización, en medio de las vastas praderas de Wakanda. Junto a un lago, un hombre cortaba leña con un solo brazo, una tarea un poco difícil, pero si una anciana se lo había encomendado, ¿quién era él para decir que no?

Bucky suspiró mientras veía una nave acercarse por el cielo, con forma puntiaguda y unos lados semejantes a la crin de un león. Bueno, mejor dicho, una pantera. Dejó el hacha clavada en el tocón de árbol donde había estado cortando trozos de madera y se llevó su única mano a la cintura.

Que él supiese, hoy no esperaba la visita de nadie. Eso lo alarmó un poco, pero seguramente no sería nada. Quizá él mismo había perdido la cuenta de los días, o quizá se había confundido con cualquier cosa.

La nave atrajo a varios niños de la tribu donde vivía. Niños que se habían encariñado con él, y, obviamente, él se había encariñado con todos ellos, que lo perseguían para jugar.

Quizá Bucky también los usaba como entrenamiento, levantando a más de tres con solamente un brazo. Sí, la vida por ahí no estaba mal. A veces era un poco locura, y muchas veces echaba de menos a Steve y a Lana (otras pocas a Sam Wilson, incluso, pero que nadie se lo diga), pero la tranquilidad y el hecho de que cada vez estaba mejor, eso lo arreglaba.

Se quedó a las puertas de la nave mientras esta se abría y de ella emergían dos personas. Una la conocía muy bien, Shuri sonreía mientras saludaba hacia Bucky, y detrás, con aire más real, salía T'Challa.

Ambos tenían un aire extraño, y Bucky ya se empezó a preocupar de verdad, no se había confundido. Estos dos venían a decirle algo. Se le clavó el estómago en el cuello, ¿era sobre Steve? ¿O sobre Lana?

Lo único que sabía de Steve era que estaba haciendo misiones de lo más peligrosas, aunque siempre tenía tiempo para mandarle un mensaje o hacer una llamada de Skype, de Lana sabía menos, solamente que estaba entrenando algo entre Tokio, Londres, Nepal y Estados Unidos.

- Vaya, ahora entiendo por qué le llaman Lobo Blanco. – T'Challa se acercó a Bucky y le dio un golpe en el brazo, mientras él hacía una mueca, bajando las comisuras de los labios para saludar. – Entre lo peludo, el olor extraño y el pelo alborotado...

- Muy gracioso, Lana me explicó lo que era un furry, ¿qué se siente al ser lo peor de internet? – Bucky retorció, haciendo que Shuri se echase a reír y que el rey de Wakanda mirase hacia otro lado.

- Ni una palabra. – T'Challa señaló a Shuri, que seguía riendo, mientras saludaba a Bucky, que asintió de manera seria. – He venido a verle, ¿qué tal está?

- Mucho mejor, muchas gracias. – Bucky miró cómo T'Challa observa a la gente que se había amontonado delante de la nave, saludándolos con una sonrisa. - ¿Sucede algo? ¿Es Steve?

El rey y su hermana se miraron unos segundos antes de mirar hacia Bucky, que se temió lo peor. Steve era un poco idiota, y su sentido de lo que estaba bien o era peligroso estaba bastante atrofiado después de la guerra entre él y Tony. Lana era otro tema, aunque se acercaba bastante al nivel de idiotez de Steve.

- Debemos hablar en privado. Vamos, Lobo Blanco, tenemos cosas de las que hablar. – Shuri comandó, y los tres comenzaron a caminar hacia la pequeña cabaña de Bucky.

No había mucho, una cama sin hacer, con una manta de color rojo, una mesa pequeña con dos sillas de madera, y una mesa auxiliar de color negro que aguantaba dos cosas. La primera, un teléfono móvil de tapa, por si acaso había que llamar a Steve. La otra cosa, una foto de Lana, impresa en papel fotográfico.

Era una foto sencilla, Shuri se la había dado justo cuando se había despertado. Era del Instagram de la joven, en la cual salía sonriendo y haciendo el símbolo de la paz mientras comía palomitas. Era en la torre de los Vengadores, así que supuso que era anterior a cuando salían.

Ella, tan feliz, adorable. Su Lana.

- Es una bonita foto. – T'Challa se dio cuenta de lo que miraba. Esa fotografía era lo que más llamaba la atención de toda la caseta.

- Ella es bonita en sí. – Shuri soltó un sonoro sonido de adoración mientras se sentaba en una de las sillas. - ¿Qué tenéis que decirme?

- Primeramente, siéntate. – Bucky hizo lo que T'Challa ordenó, sentándose en la silla al lado de Shuri, mientras el rey se sentaba en su cama, cogiéndose ambas manos.

- ¿Es sobre Steve? ¿Ha salido mal la misión?

Los dos monarcas se miraron fijamente unos segundos, y Shuri sacó una de sus perlas, dejándola en la palma de su mano.

- No exactamente, verás. – Shuri sacó un gráfico extraño. Como si fuese un mapa. – Es sobre Lana.

Bucky notó que el estómago se le volvía a subir a la garganta, notaba su corazón palpitando a mil por hora.

- ¿Está bien? Tenemos un sensor vital en ella, ¿no? – T'Challa se levantó y mostró su pulsera, en la cual salía un holograma de Lana que daba vueltas lentamente.

Pero no marcaba nada, solo la imagen.

- El problema es que no lo sabemos, ha sobrepasado el radar de vigilancia. – Bucky levantó una ceja y miró hacia Shuri, que soltó aire.

- Pero... ¿dónde está?

- El problema es que no lo sabemos. – La chica comentó, mostrando un mapa de Noruega que se acercaba a una parte de la costa, marcando un punto concreto de color rojo. – El rojo es la potencia máxima de aquello que se llevó a Lana.

- Hizo un salto espacial de Nueva York a Noruega, así que algo raro está pasando, algo muy extraño. – T'Challa explicó mientras Bucky fruncía las cejas, ¿dónde narices se había metido su novia?

- ¿Y este punto rojo?

- Es un traslador espacial. Una fuente tan poderosa que puede transportar a gente entre mundos.

- Me estáis queriendo decir que han abducido a Lana, ¿verdad? – Bucky se llevó una mano a la cara mientras cerraba los ojos, ambos monarcas mirándolo con curiosidad. - ¿Steve sabe de esto?

- Sí, de hecho, creemos que sabe dónde está. – Shuri sonrío para sí misma mientras T'Challa se cruzaba de brazos. – Se movió hacia Noruega con el equipo, y, justo en el suelo, acompañado de una marca, estaba esto.

Shuri sacó un teléfono móvil con la pantalla rota de su bolsillo, pasándoselo a Bucky, el cual lo cogió con una mano mientras lo desbloqueaba y miraba una imagen muy familiar para él. Lana y él en Romania.

- ¿Qué tipo de marca?

- Una asgardiana. – Bucky se echó hacia atrás cuando T'Challa dijo eso, mirándolo fijamente para acabar suspirando. – Steve coincide, creemos que Lana lleva en Asgard tres meses. 

HEKATE [Bucky Barnes]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora