HEKATE [Bucky Barnes]

XXV

A/N: ¿Os imagináis que hubiese desaparecido de nuevo como 5 meses? JEJE no, es broma, aquí tenéis el siguiente capítulo. Y, por cierto, de nada :) ¡Ah! Y otra cosa más: a las que comentaron en el anterior post la respuesta a lo de la nueva novela: ¡HABRÁ UN NUEVO LIBRO DE BUCKY! Y a todas aquellas que comentaron, os dedicaré un capítulo a cada una :)

·benigno·

A Bucky no le gustaban los aviones comerciales de bajo coste. Pero era lo primero que había podido conseguir en menos de un día. Había salido del bar corriendo, ignorando a la gente que se abrazaba alegre. Los Vengadores los habían salvado de nuevo, pero nadie había dicho nada de Lana.

No dijeron nada hasta que llegó al piso y escuchó la radio. La estaban llevando de urgencia a la República Checa, el país vecino a Sokovia. La estaban manteniendo viva, por el momento.

Es por eso por lo que pasó la peor noche de su vida, esperando a que el país volviese a abrir los vuelos y las rutas comerciales. No durmió, se limitó a escuchar la primera cadena que hablaba sobre los Vengadores.

Era por eso por lo que en ese momento se encontraba esperando a que el idiota del azafato abriese la puerta presurizada para poder salir de ese avión de quejicas. Había tenido a varios turistas quejándose de que no llegaban a tiempo a su destino.

A Bucky no le parecía normal que la gente hubiese estado tan cerca de morir y en ese momento solamente pensaba en llegar a Praga. Había muerto tanta gente que los contadores no paraban de subir, y a la gente solamente le interesaba no perder el tiempo en un avión.

Fue el primero en salir, con una mochila a su espalda y saltando las escaleras que lo separaban del suelo de la pista de aterrizaje. Tenía que llegar al hospital central de Praga, y no le importaba encontrarse a Steve de bruces. Necesitaba ver a Lana. Saber que al menos estaba bien.

La gracia fue cuando vio que la prensa estaba rodeando literalmente todas las puertas del hospital, hablando sobre el estado de la Vengadora.

Y por eso decidió colarse de noche en el hospital.

Esperó pacientemente en el parquin del hospital, mirando hacia la puerta del lugar mientras vigilaba que no viniese el dueño del coche en el que se había metido, cruzando los dedos para que a Lana no le diese por morirse sin la oportunidad de haberle echado la bronca.

A eso de las dos de la mañana, decidió moverse. Subió las escaleras de emergencia rápidamente, llegando a la planta principal, que estaba desierta. De hecho, solamente había una mujer en la recepción. Se escondió entre las sombras, mirando hacia la recepción.

No hubo problema para llegar hasta ella y sobrepasar a la mujer, caminando hacia el otro lado. Ahora solamente le faltaba saber qué habitación tenía Lana. Subió otras escaleras, llegando al primer piso y paró.

Sacó la cabeza, esperando a ver a alguien en el pasillo, pero no vio nada, y decidió adentrarse en el pasillo, buscando otra recepción o algo dónde se informara de qué pacientes estaban ahí.

Encontró su objetivo a unos metros, vacío, o al menos, eso ponía en la mesa, que avisaba que la enfermera había ido a hacer la ronda de las 2:30 de la mañana. Bucky entró al pequeño cubículo y miró los nombres de los pacientes del ala donde se encontraba.

Lo mejor fue cuando encontró un enorme papel junto al cartel con los nombres, que avisaba de que no podían dar el número de habitación de Hekate. Rodó los ojos al ver que al lado de la palabra en clave, había un único número: 618. No eran muy inteligentes, al parecer.