Capítulo 4

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Estaba durmiendo placenteramente aquel sábado por la mañana cuando un mensaje de WA de mi móvil me despertó. Era Noe...

YO: Noe... por qué me despiertas tan prontoo -.- ? Tengo sueño...

NOE: Ejem, ejem, perdone usted, eh? como que las 12 del mediodía es pronto...

YO: Un sábado sí!!! qué quieres?

NOE: Joder, a ver qué tal. Ya le has dicho eso a Sergio?

YO: Sí... y no he necesitado tu ayuda.

NOE: Y qué tal reaccionó?

YO: Bueeeeeeno.... quiso pegarme...

NOE: QUÉEEE?!!?!?! QUE EL JOPUTA DE SERGIO LE HA PUESTO LA MANO EN CIMA A MI TACO???? "Taco" era como me llamaba Noelia. Un día se le ocurrió eso, y le gustó cómo me quedaba.

YO: No mujer. déjame acabar... de repente vino un chico muy majo... y me defendió... y él y Sergio se pusieron a darse hostias y tal...

NOE: Oins que mono <3 Ya te lo has tirado?

YO: GUARROSA, cállate puta xD Cómo me lo voy a tirar? Estás muy necesitada...

NOE: Yoooo??? Un poco.... EN FIN. Esta noche salimos, vale?

YO: Ok, a las 23.00 en Zoo?

NOE: Claro ;D Pero antes quiero quedar contigo, y así me presentas a tu amante.

YO: Cabrona :P Vale, a las 18.05 en Sol

NOE: Okis guapis. Te dejo dormir Taco, chao vaga!

YO: Chao.

En ese momento ya me había desvelado, así que no pude descarnsar más. Bueno, ya va siendo hora de levantarse... me dije a mi misma. Estaba desayunando la típica tostada con mermelada mientras me tomaba un café, cuando alguien llama a mi telefonillo.

- ¿Me abres? - Era Rubén.

- ¿Me vas a violar? - Contesté divertida.

- No lo sé... Vale, por esta vez no, pero déjame entrar.

Le abrí, y pasados unos 5 segundos ya estaba en la puerta.

- ¿Qué rápido has subido, no? - Pregunté sorprendida.

- Ya.... es.... que.... quería... verte.... princesa....- Respondió Rubén tomando poco a poco aire para no asfixiarse.

Le dejé entrar, y nos sentamos en el sofá, yo con mi taza de café, y el aun intentando descansar un rato.

- ¿Y...? - Dije por fin para romper ese silencio incómodo.

- ¿Y qué?  

- Coño, que para qué has venido, justo cuando estaba desayunando...

- Ahh... nada, que quería saber qué tal estas, y si esta noche te vienes de fiesta conmigo. - Añadió ya tranquilo.

- Mmm... es que hoy ya he quedado con una amiga...

- Oh... ¡No importa, me acoplo con vosotras!

- Bueno, no es mala idea. Pues a las 11 vete a Zoo, ¿vale?

- No, mejor te vengo a buscar, total, te tengo al lao' - Dijo alegre.

- También es verdad. Pues a eso de las... 11 menos cuarto me pasas a buscar.

- Vale. Te iba a invitar a desayunar, pero por lo que veo ya has desayunado... - Expresó exagerando tristeza.

- No, que va, este es mi café de todas las mañanas.

- Pues venga, vamos.

- Me tengo que arreglar.

- Joder, es verdad, que eres MUJER. Bueno, te espero abajo.

Rubén se fue por la puerta y a mi se me dibujó una sonrisa en mi rostro. fui a mi habitación y me puse mis pantalones vaqueros pitillo, con unas vans negras y un jersey negro, marrón y blanco, ya que estaba empezando a hacer fresquillo. Me dejé el pelo suelto y bajé.

Allí estaba Rubén, apollado en el marco del portal.

- Ya estoy. - Le dije a Rubén. Me miró de arriba a abajo.

- Guau, que vamos a desayunar, ¿eh? Nah, es broma, estás muy guapa. ¿Vamos al Dunkin Donuts? 

- Sí claro.

Fuimos hacia allí andando, y hablando de nuestras cosas.

- Princesa, ¿esta noche puede venir un amigo mío de fiesta con nosotros? - Preguntó Rubén.

- Claro que sí, yo no soy nadie para decir quién puede ir de fiesta y quién no. - Respondí feliz.

- ¡Yupi! - Dijo Rubén saltando cual niño pequeño. 

- Tampoco es para tanto...

***

Acabamos de desayunar cuando ya era la hora de comer, aunque yo, por lo menos, no tenía demasiada hambre, así que yo y Rubén nos dirigíamos a casa. De repente, nos cruzamos con Sergio... mi cara palideció totalmente...

Tú eres mi destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora