Día 34

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Nada más llegar a clase fui directo a hablar con Owen, no me había dicho como tal fue en la comisaria, y yo por no ser pesado tampoco le dije nada.

"Puede que se olvidara."

—Hey —le dije con una sonrisa algo forzada— ¿qué tal fue?

—¿Eh? —dejo de sacar los libros de la mochila.

—Me refiero a lo de ir a explicar lo que sabíamos a la policía —asintió acompañado de una cara tonta y sonriente.

—Sí, es verdad, perdón por no llamarte al final —acabó sacando su estuche y se sentó en la silla— básicamente no me hicieron mucho caso, dijeron que no descartaban la idea de que Alice se hubiera escapado, pero que ya habían pensado en un secuestro —me sentí satisfecho, por una vez era de ayuda—, también les comenté que si habían encontrado alguna pista que conectara los dos casos.

—Genial, ¿y que dijeron?

—Que si es así, se trata de un psicópata —vaya, que buena noticia— quien sea que mató a mi novia, descubrió algo que le gusto con esa experiencia, y Alice podría ser su siguiente víctima.

—Te han contado mucho, ¿con quién hablaste?

—Con mi primo.

—¿Qué? —joder. Podría haber dicho antes que tenía contactos en la policía.

—Mi primo trabaja desde hace dos años allí, le comenté que estaba intentando ser de ayuda para resolver lo que le paso a Harper, y se enfadó diciendo que era peligroso, entonces se le fue de la lengua todo esto del psicópata —Owen era de ayuda, más de lo que pensaba.

—Me has impresionado, los de tu familia saben hacer de todo ¿no? —se río.

—¿Pues a que no sabías que el director del instituto es el hermano de mi primo policía? —... ni se me había pasado por la cabeza— .Los de mi familia tienden a querer llegar a lo más alto, y te puede sonar bien, pero es agobiante... —suspiró y yo asentí totalmente asombrado. Seguro que de alguna manera está emparentado hasta con Obama (o con los hermanos Hemsworth, eso le pega más).

—¿Y tú también apuntas a lo alto? —le pregunté con tonó burlón.

—Quiero ser policía, aunque eso me va a costar bastante —sonrió y se pasó una mano por el pelo— ¿y tú?

"¿Yo?"

Mi consciencia se esfumó y pensé si en algún momento de mi vida había jugado con saber el futuro como cualquier persona.

—De pequeño quería ayudar a la gente —sin querer lo dije, me avergoncé por haberlo soltado sin pensar.

—Eso está bien, podríamos hasta trabajar juntos —no me crítico ni se burló. Papá se rió cuando lo dije, y mamá me consoló diciendo que podría intentar hacer algo más fácil. Tan solo tenía ocho años y eran incapaces de mentirme para darme esperanza, los odie en aquel momento.

—Supongo... —fui a sentarme a mi sitio, crucé los brazos encima de mi mesa y escondí la cara.

"Owen me recuerda a Alice, peroa la vez son diferentes , ¿por qué?"

ElliotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora