Tras estar unas horas charlando con Edu, decidimos llamar a los demás para que vieran que estaba bien. Nada más llamarlos, fueron corriendo a la casa de Edu, Alex y Javier me abrazaron tan fuerte, que sentí que se me cortaba la circulación. Aunque en Javier noté cierta tristeza en su mirada.
-Javier, ¿Qué te ocurre? ¿No te alegras de verme?
-¿Cómo puedes pensar eso Aurorita? Es simplemente que lo he pasado muy mal mientras estabas desaparecida.
El resto de la tarde la pasé con Javier. Estuvimos dando vueltas por un parque, comimos helado, hicimos volteretas en el cesped y, como aquel día, caímos uno encima del otro.
Cuando se hizo de noche, me propuso la loca idea de colarnos en la piscina municipal, al principio me negaba, pero finalmente acepté. Fue muy divertido, ambos estuvimos como una hora bañandonos en aquella enorme piscina. Finalmente acabamos dando vueltas por el desierto pueblo de madrugada hasta secarnos y Javier, a pesar de que su casa estaba bastante lejos de la mía, insistió en acompañarme hasta la mía.
-Aurora, me atrevería a decir que hoy a sido el mejor día de mi vida. Me alegro muchísimo de haberte conocido, te quiero.
Éste me abrazó y me besó.
-Mmmm Javi, ¿Estás en tus días? No sueles ser tan cursi.
- -Ríe- ¡Idiota! Sólo estoy sensible.
En verdad también fue el mejor día de mi vida, Javier era lo mejor que me había pasado.
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Mi novio es un hombre lobo
Ficção Adolescente¿Cómo sería la reacción de una joven escéptica al descubrir que los seres ficticios existen? ¿Realmente los seres sobrenaturales son tan extraños y terribles como se muestra en las películas?¿A ti te ha pasado que tu vida es completamente normal y m...
