Discusiones y castigos

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Gianna

Cuando llegué a mi casa traté de hacer el menor ruido posible ya que mi madre estaba dormida en el sofá, miré el reloj y eran las diez de la noche. Mientras me dirigía a mi recámara mi telefono vibró, lo cual hizo que mi madre despertara.

-¿Se puede saber donde estabas?-Preguntó.

-Estaba con Luna y George...en la cafetería, sólo estábamos leyendo un libro -Respondí tratando de estar lo menos nerviosa posible.

-Tyler y yo estábamos muy preocupados, sabes que tengo que levantarme temprano todos los días para que ustedes tengan algo que comer y tu estabas leyendo junto a tus amigos a esta hora. No creas que soy tonta y dime la verdad, Tyler fue a buscarte por las calles, pensábamos que te había sucedido algo malo -Dijo preparándose un vaso de agua.

-Madre, lo siento, no era mi intención que te acostaras tarde. Mira, nosotros estábamos en la cafetería pero luego nos fuimos a la casa de George porque su madre quería que comieramos con ella, sólo eso -Mentí.

-Gianna, yo también fui joven y hacia cosas a las espaldas de tus abuelos pero eso no quiere decir que también lo hagas conmigo. Eres mi hija menor, mi bebé, ¿Como no quieres que me preocupe?

-Madre, yo ya no soy una niña pequeña, ya voy a cumplir dieciocho años en un mes, tienes que superarlo -Dije mientras me retiraba y me dirigía a mi recámara.

-Gianna Isabella Scott Larsson te ordeno que vengas aquí, ahora. No me dejes hablando sola, sino acepta las consecuencias.

Estaba agotada, ya no podía mas y ahora mi madre empieza a discutir conmigo. Cuando tu madre te llama por tu nombre completo, prepárate, estás en graves problemas. Definitivamente hoy no es mi mejor día.

-¡¡Ya déjame en paz!! Estoy muy cansada y quiero dormir. Vamos a dejar esta conversación para otro día ¿esta bien? -Dije muy enojada.

-¿Se puede saber que está pasando aquí? -Interrumpió Tyler.

Justamente en ese momento llegó Tyler, lo único que faltaba, ahora otro se une a la discusión. Entré a mi cuarto y cerré la puerta, miré por la ventana y vi un auto estacionado en la acera, era Edward.

-¡Genial! Ahora va a burlarse de mi para siempre -Pensé.

Como mi casa era la primera de la barriada y mi cuarto tenía vista hacia la calle, podía verme perfectamente. Tyler comenzó a tocar la puerta fuertemente, pero estaba muy enojada y no tenia ánimos para recibir un sermón de parte de él.
De pronto la puerta se abrió y entró Tyler junto a mi madre, olvidaba que el tiene una copia de todas las llaves de la casa.

-¿Me puedes explicar que pasa aquí? No me digas mentiras, dime la verdad -Dijo Tyler.

Cuando mi padre está en el ejército, él deja a cargo de la casa a Tyler y tiene que velar por nosotras. Es el hombre de la casa cuando papá no está.
No tenía idea de que decir pero tampoco podía decirle lo sucedido, me mataría.
Al ver que no respondía nada, se acercó a la ventana y colocó un candado, piensa que me voy a escapar como si fuera una chica malcriada y rebelde.

-Estás castigada, no podrás salir los fines de semana y apenas sales del colegio vendrás a la casa, no mas paseos con tus amigos -Dijo seriamente.

-No puedo, ya tengo otro castigo por cumplir -Dije mirándolo a los ojos muy enojada.

-¿Qué? ¿se puede saber en que problema te metiste ahora? -Preguntó mi madre.

-Tengo que limpiar los jardines del colegio como castigo por un pequeño incidente que pasó, así que tendré que quedarme en la salida cortando césped y cuidando las plantas durante dos semanas -Dije sarcásticamente.

Los rostros de ambos me daba mucha gracia, estaban muy enojados y casi les daba algo cuando les dije sobre el castigo.
Al final me castigaron por dos meses, yo nunca había tenido este tipo de comportamiento con ellos pero el cansancio del colegio, lo sucedido en la casa de los Houston y lo que pasó con Edward, me tenía muy estresada y accidentalmente me desahogué con mi madre.
Y aparte de todo esto, me quitaron el celular y guardaron mis ahorros y mis libros en otra parte, con tal de no comprar más libros ni leer durante estos dos meses.
Como no me quitaron la computadora, decidí conectarme a Facebook, son pocas las veces que entro pero no tenia mas nada que hacer, estaba encerrada y no podía salir a ninguna parte, era mi único entretenimiento.

Tenía tres notificaciones, ninguna solicitud de amistad y ningún mensaje, algo que no me sorprendía. Comenzé a buscar los perfiles de algunos famosos y páginas de entretenimiento, luego le escribí a Luna y a George, rogando que tampoco los hubieran castigado.

Estaba a punto de dormirme cuando recibí algunos mensajes, eran ellos.

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Luna: Hola muggles :'(

George: Hola :(

Yo: Hola, ¿Qué les sucedió?

Luna: Me castigaron por dos meses

Yo: Por eso eres mi mejor amiga, tenemos tanto en común

Luna: Pero ¿Porqué te castigaron? A mi porque llegué tardísimo y tengo prohibido llegar tarde, ademas se supone que debí buscar a mi hermana a la guardería y... se me olvidó *emoticones de risas*

Yo: Pues, llegué un poco tarde y mi madre se molestó porque tenía que dormir y se quedó esperándome. Después tuvimos una discusión, mi hermano intervino y ...es una larga historia.

George: Ya somos tres, llegué tarde porque a Alex se le ocurrió la idea de dejar a sus amigas primero y de último a mi.

Luna: Uy...alguien tuvo una noche loca *emoticon de luna pervertida*

George: Ya viene esta bruja, la que tuvo una noche loca fuiste tú, no me digas que el tal Ryan no te hizo algo *emoticon de sol pervertido*

Luna: Pues no, yo soy una dama no una pe*ra. Se nota que Alex te quiere mucho, debes darle una oportunidad

Yo: Si le das una oportunidad haré como si nunca te hubiera conocido. Me siento como Gabriella cuando Sharpay le hacia bromas en High School Musical, ella no me cae bien. Si quieres que nuestra amistad siga ni se te ocurra darle una oportunidad

Luna: Uhhh...alguien tiene celos *emoticones de risas*

Yo: Hay por favor, sólo me cae mal y no es una buena influencia *emoticones de risas*

George:  Voy a darle una oportunidad...es broma *emoticones de risas* Ustedes están locas, las quiero <3

Seguimos con nuestra conversa por un buen tiempo hasta que me llegó una solicitud de amistad, algo raro porque yo no tengo muchos amigos y muchos de mis familiares no tienen Facebook. Quedé impresionada cuando vi quien era, no sé como obtuvo mi Facebook. Era él, era Edward.











At The Wrong Time [En edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora